Entre las pruebas pendientes se encuentra el cotejo de ADN del exnovio de la joven viguesa, después de que una primera muestra se hubiera tomado de forma irregular, en 2002, y una segunda, tomada en 2010, no fuera analizada
Los abogados de la familia aseguran que el informe solo consta de nueve líneas y que las comprobaciones se realizaron sin permitir la presencia de los peritos de las partes
La familia de la joven hallada muerta en O Rosal en 2002 explica que el testimonio del forense es "crucial" para conseguir "cambiar la situación del proceso"