Extraordinaria embestida de 'Destilado' en la muleta de Bolívar

Extraordinaria embestida de 'Destilado' en la muleta de Bolívar PAGÉS

Toros

La Palmosilla pide a Federer

Gran debut de la ganadería gaditana en la Feria de Abril con tres toros de nota. Muy bueno 'Destilado', lidiado en 4º lugar, al que Bolívar le cortó una oreja.

12 abril, 2018 22:20
Sevilla

La lluvia durante las corridas de toros produce el efecto Patria en el cronista. Todo gira alrededor de esta circunstancia. Es una obsesión. Sirve como paisaje y excusa. El chof del agua, los fogonazos repentinos de sol, la plasticidad del albero, el tiroteo de los paraguas al abrirse a la vez. Al tiempo lo rodean tantos tópicos. Seguro que se escapa alguna comparación en las entradillas con alguna plaza del norte en plan, ya sabe, Sevilla está al sur, ¿cómo va a llover aquí?

La tarde de este jueves se explica por los toros. Siempre es así; pero en los análisis existe una ida y vuelta: todo lo que ocurre se debe explicar descifrando primero a los toros y en cuanto la faena toma importancia se tira del hilo de la acción del torero. Esta vez faltó la vuelta.

La Palmosilla ha debutado en Sevilla con una corrida agresiva, con toros muy serios, astifinos, malencarados, altos algunos y largos otros. El-toro-sevillano, un concepto antiguo, se ha diluido. Para mí está en el toro aquel de Gabriel Rojas en el que se congeló Curro en un desplante. Flautino, creo.

Hubo cuatro toros de nota. Bueno, tres. El quinto tuvo guasa. Destilado fue el mejor. Luis Bolívar armó un saludo frío con el capote. La lidia no fue tampoco extraordinaria. Al toro lo cantaban los cabales. Bolívar brindó al público. En los medios se encontró con Destilado, puesta la derecha, todo a media altura al principio sugestionado el colombiano de sí mismo: un tirón hizo resbalar al palmosilla. Se sucedieron varias tandas sin eco. Cuando por fin lo enganchó delante, el toro sacó el ritmo. Hizo el avión. Hasta entonces se le intuía la clase. Hubo transmisión por fin. Los oles creo que fueron para Destilado.

Es verdad que Bolívar llegaba a Sevilla de estar prácticamente quitado. Lo apodera el sobrino de Canorea. Venir a Sevilla a ver qué pasa, pues no sé: Destilado se cortó la oreja solo. Perdonen la dureza. La gente saltó con un espadazo caído, atracado el matador de toro. Es poco probable que Bolívar vaya a tener otro boleto premiado del Euromillón en la mano.

Luis Bolívar recoge la oreja del cuarto

Luis Bolívar recoge la oreja del cuarto Efe

Goloso, el segundo, fue exigente. Joselito Adame volvía a una plaza de las que deciden carreras después de su periplo por los portales. Tiene en su cuadrilla a Fernando Sánchez, que es exagerado hasta para pegarle voces al toro. Ya veo populismos en cualquier parte. Los estatuarios que abrieron la faena tuvieron emoción. El desprecio, eléctrico, cayó de bruces. Ese efectismo se lo llevó por delante Goloso embistiendo. Adame no sabía por donde meterle mano, situados en la línea del sol y sombra.

Pura transmisión el de La Palmosilla, con movilidad y fijeza. Ahí está la emoción. El mexicano toreó hasta el primer aviso. Le puso muletazos encima como para apagar un incendio. La estocada a recibir era otro truco y por suerte para él pinchó. El toro recibió una gran ovación camino del desolladero. Adame no.

Rafa Serna completa la nueva generación de toreros sevillanos. Hay algo en él más serio. El tercero fue fuerte, castañazo, astifino y rabón. Alto de cruz. Fue un caso extraño. Quería embestir bien pero flojeaba. Fue el que más calidad tuvo en el pitón izquierdo. Apenas fondo para tirar del armazón. Por ese lado era un super clase. Algunos naturales de Serna tuvieron el trazo y la intención. Capricho protestaba siempre en el cuarto muletazo pero qué profundidad antes. Del desarme se fue hasta una estocada bien agarrada.

Al primero se le juntó todo con su falta de poder. Diluviaba entonces con el barro reciente. Fue complicado mantenerlo en pie. No estuvo cómodo Bolívar, rodeado de inclemencias, pesaban los trastos, frío el viento. No se vio. El quinto tuvo una expresión de parte capotes terrible. Fruncía el ceño. Embistió con los pechos. Adame aguantó este tropezón de bestia. Tuvo alguna intención buena como anécdota en el aluvión que acudía a la muleta. La gente ya estaba de parte de los toros, claro. Adame intentó entrar en una refriega sin resultado.

Serna pasó un rato malo con el sexto, que medía, tan mirón, detrás de la mirilla. Ronquillo puso un buen par. Huido siempre, miraba de reojo a los toriles. El sevillano fue capaz de torearlo lejos de allí. Quizá por eso fue más áspero. Volvió la lluvia con los truenos de los tornillazos. Imposible.

FICHA DEL FESTEJO



Plaza de toros de la Maestranza de Sevilla. Jueves, 12 de abril de 2018. Tercera de abono. Un tercio de entrada. Toros de La Palmosilla, 1º flojo, 2º con movilidad, clase en el pitón izquierdo del desfondado 3º, muy bueno el 4º, bruto el 5º, 6º mirón.

Luis Bolívar, de grana y oro. Pinchazo traserísimo y caído y espadazo atravesado (silencio). En el cuarto, estocada caída (oreja).

Joselito Adame, de teja y oro. Estocada casi entera delantera. Dos descabellos. Dos avisos (leves pitos). En el quinto, pinchazo casi entero y estocada casi entera (silencio).

Rafa Serna, de azul rey y oro. Buena estocada (ovación en el tercio). En el sexto, pinchazo tendido y espadazo perpendicular. Un descabello (silencio).