Una pelea se salda con un atropello intencionado en Murcia: los vídeos que analiza la Guardia Civil

La riña se saldó con una venganza, en forma de atropello intencionado, donde resultaron heridas dos personas inocentes que no tenían nada que ver con la disputa. Este es el terrible saldo de un suceso que ha consternado a los vecinos de la localidad murciana de Archena y que fue grabado por las cámaras de un negocio, motivando la apertura de una investigación de la Guardia Civil por un homicidio en grado de tentativa.

"El origen de la pelea se desconoce, todos los implicados aseguran que la causa fue un tema de tráfico, pero no se descarta que pueda haber algo más entre ellos", tal y como explican fuentes de la investigación. El rompecabezas comienza pasados unos minutos de la una de la tarde de este viernes, en la calle de Santiago Ramón y Cajal de Archena, una vía estrecha, de sentido único, jalonada de comercios. Las cámaras de seguridad captan cómo el conductor de un BMW se detiene frente al Supermercado Khilla. 

Justo unos metros por detrás, un Ford estaciona y se bajan dos hombres, visiblemente alterados, que le recriminan algo al conductor del BMW. Cada vez es mayor la tensión entre el propietario del coche de alta gama, un ciudadano español, y los dos ciudadanos marroquíes -allegados del dueño del súper-. De hecho, un hombre sale del local a poner paz entre ambas partes, pero no lo consigue y se monta una batalla campal en plena calle.

El dueño del BMW corre a por el conductor, pero es interceptado por el copiloto del Ford que le suelta un empujón, lanzándolo contra el capó de un todoterreno que aguarda a pasar porque la pelea ha cortado el tráfico de la calle. A partir de ese momento, el propietario del turismo de alta gama cae al suelo y empieza a ser golpeado por los dos hombres marroquíes -con los que había empezado a discutir- y contra los que se lanza su pareja que se baja del coche para intentar prestarle auxilio.

"En la riña hubo implicadas personas de etnia gitana y procedentes de Marruecos", tal y como confirman fuentes de la investigación. En la zona se agolpan los vecinos, contemplando con asombro una pelea que solo termina cuando varios marroquíes logran meter a sus dos compatriotas en el Supermercado Khilla. Este momento de calma tensa es clave en el atropello, ya que el conductor del BMW le dice a su pareja que se suba al coche, pero antes de irse, baja la ventanilla, para dirigirse con una conducta en apariencia amenazante contra los que están dentro del local.

La calle de Santiago Ramón y Cajal retoma la normalidad, el tráfico vuelve a ser fluido y comienzan a entrar los clientes al Supermercado Khilla, cuando en escena reaparece el conductor del BMW: le ha dado la vuelta a la manzana para subirse encima de la acera, con la supuesta intención de atropellar a los dos ocupantes del Ford con los que se había peleado. Sin embargo, no materializa su presunta venganza, los marroquíes se pegan a la pared evitando la embestida y el coche de alta gama se lleva por delante a dos personas inocentes que no tienen nada que ver con la riña.

"Las personas atropelladas eran unos clientes que salían del supermercado con unas compras: un ciudadano de Argentina y una ciudadana de Paraguay", según precisan las citadas fuentes de la investigación. El hombre fue arrollado y voló por encima del capó del BMW, sufriendo un fuerte traumatismo craneal por el que ingresó en el Hospital Morales Meseguer de Murcia. "Parece que los dos heridos no revisten gravedad".

Tras el presunto atropello intencionado, el conductor del BMW acudió al cuartel de la Guardia Civil a denunciar a los dos ciudadanos marroquíes: "Presentó una denuncia por la agresión que había sufrido su pareja, para tener una coartada, sin ser consciente de que todo lo ocurrido había sido grabado por las cámaras de seguridad".

En la calle de Santiago Ramón y Cajal, se personó la Policía Local para elaborar un atestado sobre lo sucedido y recabar las grabaciones de las cámaras de seguridad que jugarán un papel clave en la investigación: "Se enzarzaron en una riña, se marchó con el coche, dio la vuelta a la manzana y embistió a tres personas: una estaba implicada en la pelea, pero se equivocó con las otras dos porque no tenían nada que ver. No fue un accidente, tiró a por ellos como represalia a la riña".

La Policía Local avanza que tras visionar los dos vídeos que ilustran esta información, en el atestado se catalogará lo sucedido "como un delito de homicidio en grado de tentativa porque hay intencionalidad de atropellar". De forma que la Policía Judicial de Cieza ha abierto una investigación, para esclarecer los motivos que provocaron la pelea que precedió a un atropello que mandó a dos inocentes al hospital.