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Sociedad

Los ciberataques se multiplican entre 2020 y 2021, ¿está comprometida nuestra seguridad?

La Conferencia sobre el Futuro de Europa (CoFE) es una oportunidad para compartir las diferentes visiones sobre la Europa que queremos construir. Ya es posible participar mediante la plataforma digital multilingüe o inscribiéndose en los eventos. 

14 febrero, 2022 00:09

Si bien la digitalización hace tiempo que llegó a nuestras vidas para quedarse, la COVID-19 ha acelerado todos los procesos y se presenta como una pieza fundamental, tanto para la recuperación económica como para la resiliencia de los sectores sanitario y asistencial. La digitalización ofrece soluciones a muchos de los retos que enfrentamos hoy en día en Europa. La creación de empleo, el progreso de la educación, el aumento de la competitividad y la innovación o la lucha contra el cambio climático y la facilitación de la transición ecológica encuentran en la tecnología su mejor aliada.

Sin embargo, todo progreso enfrenta ciertas amenazas o, en este caso, “ciberamenazas”. Según datos de la Agencia Europea de Seguridad de las Redes y de la Información (ENISA), entre 2020 y 2021 asistimos a un incremento notable de los ciberataques y a una sofisticación de los mismos. Una tendencia que, lejos de decrecer, prevé mantener una línea ascendente en los próximos años.

¿Qué está haciendo la UE para combatir las ciberamenazas?

Plenamente consciente de esta realidad, la UE busca dar una respuesta firme en materia de ciberseguridad, creando un ciberespacio abierto y seguro que nos permita desenvolvernos con confianza. Seis son las principales líneas de acción:

  1. Fomentar la ciberresilencia

En diciembre de 2020, la Comisión Europea y el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) presentaron la nueva Estrategia de Ciberseguridad de la UE para proteger a los ciudadanos y empresas de las ciberamenazas, promoviendo sistemas de información seguros. Además, también se está trabajando en dos propuestas legislativas para abordar los riesgos actuales y futuros en Internet y fuera de Internet. Paralelamente, ya se encuentra en vigor el Reglamento de Ciberseguridad de la UE, que introdujo un sistema de certificación para toda la UE y un mandato nuevo y reforzado para la Agencia de la UE para la Cibreseguridad. A todo ello, hemos de sumar la Directiva sobre la seguridad de las redes y sistemas de información (SRI) en la que se establecen obligaciones de seguridad para los operadores de servicios esenciales y los proveedores digitales.

  1. Luchar contra la ciberdelincuencia

Desde Europol, se ha creado el Centro Europeo de Ciberdelincuencia para ayudar a los países de la Unión a investigar los delitos en línea y desmantelar las redes delictivas. También existe la plataforma multidisciplinar europea contra las amenazas delictivas (EMPACT), una iniciativa de seguridad impulsada por los Estados miembros de la UE para detectar, priorizar y atajar las amenazas que plantea la delincuencia internacional organizada. Atajar el fraude en los pagos sin efectivo, mejorar la seguridad de los menores en internet, facilitar el acceso a las pruebas electrónicas, garantizar la seguridad tanto mediante el cifrado como a pesar de él o favorecer la conservación de datos a efectos de lucha contra la delincuencia son algunas de las prioridades.

  1. Impulsar la ciberdiplomacia

La Unión está poniendo un gran empeño en protegerse contra las ciberamenazas procedentes de terceros países, especialmente a través de una respuesta diplomática conjunta denominada conjunto de instrumentos de ciberdiplomacia. Esta respuesta incluye la cooperación y el diálogo diplomáticos, medidas preventivas contra los ciberataques y sanciones.

  1. Intensificación de la ciberdefensa

La Unión coopera en materia de defensa en el ciberespacio gracias a las actividades de la Agencia Europea de Defensa (AED), en colaboración con la Agencia de la UE para la Ciberseguridad y Europol. La AED apoya a los Estados miembros en la creación de unidades de personal militar especializado en ciberdefensa y garantiza la disponibilidad de tecnología de ciberdefensa proactiva y reactiva.

  1. Financiación e investigación

NextGenerationEU, el plan de recuperación de la UE que ayudará a reconstruir la Europa posterior a la COVID-19, conlleva, entre otras cuestiones, una importante inversión en el ámbito digital, que incluye la ciberseguridad. Además, la ciberseguridad es un componente fundamental en el programa marco de financiación de la investigación y la innovación de la Unión, Horizonte Europa, que ayuda en cada convocatoria a cientos de proyectos emprendedores que persiguen marcar la diferencia. Por otra parte, la UE también se ha comprometido a invertir 1.600 millones de euros en capacidades de ciberseguridad y en la implantación general de infraestructuras y herramientas, tanto para las administraciones públicas como para las empresas y los particulares, a través del programa Europa Digital para el periodo 2021-2027.

  1. Ciberseguridad de las infraestructuras críticas

En enero de 2020, la Unión acordó un conjunto de instrumentos para determinar un posible grupo de medidas comunes que mitiguen los principales riesgos de ciberseguridad de las redes 5G y para proporcionar orientación. Las redes 5G generarán en 2025 unos ingresos mundiales estimados en 225.000 millones de euros y constituyen un recurso clave para la competitividad de Europa en el mercado mundial.

Nuestro papel protagonista: ¿Qué podemos hacer nosotros?

La Conferencia sobre el Futuro de Europa es una oportunidad única para que los ciudadanos puedan debatir sobre los retos y prioridades en materia de ciberseguridad, entre otras muchas cuestiones. Se trata, en esencia, de un foro abierto a la participación ciudadana donde reflexionar sobre el rumbo que queremos que tome la UE.

Existen diferentes formas de participación para que cada persona pueda involucrarse de la manera que prefiera. La primera es a través de la plataforma digital multilingüe, donde es posible debatir sobre temas ya existentes (cambio climático y medioambiente; salud; una economía más fuerte, justicia social y empleo; la UE en el mundo, valores y derechos, Estado de Derecho y seguridad; transformación digital; democracia europea; migración; y educación, cultura, juventud y deporte), participando de las ideas que otros ciudadanos europeos ya han compartido o lanzando nuevas propuestas.

También es posible asistiendo a eventos u organizándolos. Estos pueden ser tanto online como de carácter presencial, facilitando el acceso a cualquiera persona interesada. Mediante la propia web es posible conocer de manera sencilla aquellos que van a acontecer cerca de tu zona y apuntarse.

Paralelamente, todas las ideas que se han ido tratando mediante estas vías se están poniendo en común en los paneles de ciudadanos europeos. Compuestos por 200 ciudadanos europeos elegidos de forma aleatoria en los 27 Estados miembro, a fin de reflejar la diversidad de la UE, son el “traductor” de todas las propuestas y debates en curso.

Estos representantes presentan el resultado de sus conclusiones en el Pleno de la Conferencia, compuesto por 108 representantes del Parlamento europeo, 54 del Consejo y tres de la Comisión Europea, así como 108 venidos de los parlamentos nacionales, entre otros.

El resultado final se presentará en un informe a la presidencia conjunta y las tres instituciones deberán decidir cómo dar seguimiento a las propuestas. El objetivo es que, durante esta primavera, la Conferencia haya alcanzado conclusiones decisivas y aporte orientaciones claras sobre el futuro de Europa.

Propuestas que está escuchando la Unión Europea

Numerosas ideas se están debatiendo y escuchando en la plataforma digital multilingüe de la Conferencia sobre el Futuro de Europa sobre ciberseguridad y transformación digital, entre otros muchos temas.

Existen propuestas como esta para fomentar un Mercado Único Digital competitivo y seguro: “la UE debe impulsar y promover el desarrollo, distribución y adopción de software seguro por diseño hecho en Europa que se apegue a estándares europeos de ciberseguridad y a la normativa que promueve los valores europeos de protección de datos personales y de propiedad intelectual”.

Otras aportaciones proponen favorecer la independencia tecnológica: “La UE debe fomentar la inversión en I+D+i de los Estados miembros, así como desarrollar una industria tecnológica propia”.

El debate ha empezado y todos podemos formar parte de él. Ahora es el momento, y la oportunidad, de transmitir a la UE lo que nos preocupa como ciudadanos y trasladar nuestras propuestas para que la Europa del futuro sea la que queremos que sea.