Arévalo, retrato de ese machomoscón® que busca arrimar la cebolleta

Cuando la popularidad de los famosos mengua con el paso del tiempo siempre hay un recurso al que pueden acudir para volver a la palestra: polemizar en las redes sociales. Algunos de ellos lo hacen siendo conscientes del alcance que tendrán sus palabras, pero a otros, simplemente, les sale de dentro y no miden la repercusión que puede llegar a tener un simple tuit. 

Este último es el caso de Francisco Rodríguez Iglesias, Arévalo, al que no le tiembla el pulso ni siquiera a la hora de declararse cercano a las impopulares ideas de Vox, tal y como comentó a JALEOS en esta entrevista. Ha convertido su cuenta de Twitter en un refugio noventero donde todavía se escuchan sus chistes en aquellos míticos casetes y las presentadoras de la 1 salen ligeras de ropa y cargadas de lentejuelas.

A sus 71 años, el humorista no esconde que es un amante de los toros, que se siente "muy español" y que sigue aplicando el 'arte' de piropear a las mujeres sin que ellas se lo pidan. Moviéndose en un medio que, a priori, no está hecho para viejos, Arévalo nos da los buenos días y las buenas noches desde Twitter, como si fuese nuestro padre o nuestro abuelo, y nos informa de sus achaques y el resultado de sus últimas analíticas. 

Leer sus tuits, que parecen escritos en 1993 y no hay uno que se salve de las faltas de ortografía, nos chirría. Sin embargo, a la vez, es como una especie de droga que nos engancha. Un chiste, de esos que tanto le gustan, lanzado desde un lugar donde todos apelan a la libertad de expresión siempre que sea conforme a sus parámetros. ¿Su última polémica? La que tuvo a Jennifer Lopez como protagonista.

Jenni, me encantas

El revuelo fue tal que Arévalo salió a explicar que no estaba intentando ligar con la artista, justificándose:

Algo que ya le había pasado antes con Gloria Estefan:

Después, ya se dejó llevar por los memes que él mismo iba retuiteando y agradeciendo. Si no puedes con tu enemigo, únete a él:

"Eres un cochino"

Lo de Jennifer Lopez, si bien es cierto que era la primera vez que apuntaba al panorama internacional, no era ninguna novedad. Arévalo suele piropear también a las famosas de nuestro país, como Marlene Mourreau...

...o Malena Gracia:

Pero, ojo, que tampoco se corta con aquellas mujeres que no pertenecen al mundo de la farándula:

Este tipo de comentarios y reacciones le han valido más de una vez el calificativo de "baboso", pero también en esto ha encontrado a alguien que le defienda:

Aunque sería injusto decir que necesita escuderos, el cómico suele entrar al trapo y contestar a los insultos de los tuiteros, otra transgresión:

Varon Dandy

¿Quién podría acusar a Arévalo de machista? Desde luego nadie que haya visto su dedicación a las tareas propias del género femenino, que ejecuta con total normalidad:

Porque para Arévalo cualquier tiempo pasado fue mejor y no tiene ningún prejuicio con las nuevas generaciones:

Abuelo cebolleta

Pero si hay algo que realmente le guste al humorista valenciano es tirar del álbum de fotos que retrata aquellos años de lentejuelas, pajaritas y encuentros con las estrellas. Y, reconozcámoslo, las imágenes son un filón:

Precisamente fue una foto de estos mano a mano con personalidades la que provocó el desencuentro con su compañero de faena, Bertín Osborne, en 2017. En la imagen que compartió Arévalo aparecían ambos junto al rey emérito Juan Carlos, la infanta Elena y otras personas. El cabreo del presentador fue épico y le ordenó eliminarla. Ahora se está gestando su reconciliación definitiva. Pero os lanzamos el guante: Bertín o Arévalo, ¿con cuál os quedaríais? Nosotros lo tenemos claro.