Kate Bullen publicó su nuevo tatuaje en Twitter

Kate Bullen publicó su nuevo tatuaje en Twitter

La Jungla / Social

Se tatúa “vegana” en la cara y los 'haters' se le echan encima

En la Jungla. Esta chica, harta de que le preguntasen a cada rato, ha decidido tatuarse la palabra "vegana" en la frente para no tener que dar explicaciones. 

30 enero, 2018 20:33

La verdad es que los veganos tienen que aguantar carros y carretas por el mero hecho de haber escogido un modo de vida diferente al de la mayoría del mundo. Los chistes de veganos son un clásico, como también lo son los linchamientos a los que se ven sometidos en las redes sociales.

Kate Bullen, una joven británica, ha decidido tomar una drástica decisión para que no le pregunten “cada cinco minutos” sobre su condición de vegana: se lo ha tatuado en la frente y lo ha compartido en su cuenta de Twitter.

Mientras algunos que vieron la fotografía la animaron en su hazaña, otros se le lanzaron rápidamente a la yugular, preguntándole por qué “mierda” se había hecho ese tatuaje o aventurándose incluso a decirle que se verá “fantástico” cuando cumpla 70 años.

Huebo quien, además, hizo hincapié en que lo tendrá complicado para encontrar un trabajo, algo que la joven descartó porque “he trabajado por mi cuenta desde los 18 años y además sería fácil cubrirlo con maquillaje y un flequillo”, comentó a Lad Bible.

Orgullo vegano

Bullen decidió tomarse con ironía las críticas e incluso retuitear algunas de ellas. Su motivación no es otra que mostrarle a todos lo apasionada que era del veganismo, un estilo de vida que asumió “hace unos años por la empatía hacia los animales”.

Explica también en el mismo medio que “todavía estoy aprendiendo” y aclara en su Twitter que las tintas empleadas en el tatuaje también son veganas. El propio tatuador salió en su defensa en las redes sociales, agregando que “respeto que luche por lo que cree y que esté orgullosa de mostrarlo”.

Con todo, a pesar de que la joven en ningún momento ha dicho que se trate de una broma, no podemos cerrar la puerta a que su tatuaje sea realmente temporal y se trate de una reivindicación con fecha de caducidad.