Ana y Carlos la pareja que ha repartido en San Fernando 1 millón en el Euromillones: Otra vez lo habéis vuelto a hacer

Ana y Carlos la pareja que ha repartido en San Fernando 1 millón en el Euromillones: "Otra vez lo habéis vuelto a hacer" Cedida

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Ana y Carlos han vendido en Cádiz el boleto de 1 millón del Euromillones: "Todos tocan a nuestra perra porque da suerte"

Procedentes de Palma de Mallorca y de El Puerto de Santa María, la pareja ha repartido otros premios como la Bonoloto o un quinto premio navideño.

Más información: Ana Díaz y Carlos Expósito, la pareja de loteros que más dinero reparte en España: más de 6 millones en 2024

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Carlos Expósito (1989) y Ana Díaz (1992) reparten suerte con premios como este millón en el Euromillones, pero hasta hace no mucho (2023) vivían en Mallorca. Ella era camarera y él mecánico de helicópteros de servicios de contraincendios. Una pareja joven y sin hijos, pero con dos mascotas: una perra de aguas llamada Lola, y un gato llamado 'Cai' en honor a Cádiz, la tierra de Ana.

Antes de abrir la administración de loterías ya llevaban un tiempo barajando la idea y fue el nombre de sus mascotas el que le dio nombre a su sueño, llamándose 'La Lola de Cai'. Una administración que llevan rigiendo desde el 25 de septiembre de 2023, ubicada en la Calle Real de San Fernando (Cádiz), enfrente de la Parroquia de San Francisco. La suerte que están teniendo es tan grande que la gente bromea.

"La gente nos dice de broma que nos vamos a tener que mudar porque ya no nos van a entrar los carteles. Para ser San Fernando una ciudad de 90.000 habitantes tenemos bastante cola para comprar", explica Carlos en conversación con EL ESPAÑOL.

La Lola de Cai y los premios que han repartido.

La Lola de Cai y los premios que han repartido. Cedida

Premio especial cerca de Navidad

Se trata de un premio muy especial para la pareja, sobre todo por el momento en el que sucede, a un par de meses de Navidad. "Te puedes imaginar lo que supone, además la página web está funcionando bien y la gente nos preguntaba quién había ganado, pero no sabemos quién, lo que sí que sabemos es que fue por ventanilla gracias al escrutinio.

La conversación con Carlos se tuvo que aparcar por un breve momento: "Ha venido la delegación, nos han dado un cartelito, había que firmar, nos tenían que hacer una foto para la intranet". La pareja siempre recordará el código alfanumérico premiado con el millón de euros con mucho cariño, en este caso el boleto VLP57723.

Por lo que es posible que la persona afortunada sea conocida: "San Fernando es grande, pero nos conocemos todos, por la calle todo el mundo se conoce y la gente de la administración son familia, amigos, pero muchos son conocidos". Precisamente empezó a correr el boca a boca dentro del gremio y las felicitaciones no tardaron en llegar.

"Como Ana se mueve mucho para intercambiar lotería de Navidad con otras administraciones, tiene muchos conocidos y es bastante querida, le machacan en el WhatsApp, yo me di cuenta mirándolo en la intranet. Cinco minutos después la tenía que volver a llamar, estábamos sonriendo, con ganas de llorar y queriendo darnos un abrazo que esta mañana ya nos lo hemos dado.

La felicidad compartida

Y es que en un trabajo que depende de la felicidad ajena, no hay nada que haga más feliz a un lotero que repartir y compartir esa felicidad: "es un trabajo muy bonito, nos llama mucho la atención hacer muy feliz a alguien", expresa el mallorquín.

La suerte acompañó desde el principio a Carlos y Ana, pues a las 3 semanas de abrir la administración dieron 2.351.000 euros en la Bonoloto y a los tres meses el Gordo de Navidad de 2023 con un quinto premio muy vendido con 250 décimos. Eso en unas fechas tan especiales como la Navidad y en una ciudad humilde como San Fernando arregla el momento de muchas personas.

"Que te toquen 6.000 euros te arregla la cuesta de Navidad, de los Reyes y todo. Hay casos de personas que no tenían para comer o para pagar el alquiler en esas fechas y gracias al premio es que pudieron", expresa Carlos emocionado, pues al final son ese tipo de cosas dentro de su trabajo las que les hacen tan felices.

De este premio no tardaron nada en enterarse, porque en cuanto sale el escrutinio empieza a expandirse el rumor. "Todo el mundo lo sabía en la calle ya y nos dicen "otra vez lo habéis vuelto a hacer", se podría decir que nos han dado la máquina de dar premios", explica el mallorquín.

Fama, supersticiones y consejos

Y es que en los premios tan grandes la gente se suele enterar porque "se hace eco rápido, van a la máquina de fuera a comprobarlo, piden a un familiar que lo mire por internet...", pero es una cantidad que se debe cobrar por el banco, ese es el procedimiento.

Esa fama que se están ganando está trayendo consigo a muchos adeptos de la suerte, algunos muy supersticiosos. Tanto es así, que algunos de los clientes habituales de Carlos y Ana tienen a Lola como un símbolo del buen fario: "Todos quieren tocar a nuestra perra Lola porque da suerte, le pasan el boleto por las rastas y la gente en San Fernando la saluda por la calle".

Ana y Carlos sosteniendo el cartel felices.

Ana y Carlos sosteniendo el cartel felices. Cedida

Un consejo que Carlos le daría a alguien que se haga con más de un millón de euros de la noche a la mañana sería el siguiente: "Coger el boleto, guardarlo bien guardado, ir al banco a cobrarlo y luego pues aunque nosotros somos jóvenes, estamos de paso y hay que vivir un poco y disfrutar el viaje, muchas veces comentamos Ana y yo que soñar es gratis".

Y precisamente lo que Carlos sueña y haría es irse con Ana de viaje "sin billete de vuelta ni destino predeterminado" y que "a la vuelta sabiendo que tenemos una cantidad de dinero no volvernos locos. Si necesitas ayuda profesional contratarla, pero que el dinero sea una ayuda, no un problema. Pero somos gente que nos gusta trabajar, con esa tranquilidad se disfruta mucho, aunque Ana es una bestia y se le da muy bien esto".

Tradiciones y agradecimientos especiales

Un trabajo como este podría volver a cualquiera un ferviente supersticioso, pero no es el caso de Carlos y Ana, aunque una chispa de esa superstición se está encendiendo en ellos: "No lo somos, pero con cada premio ha ocurrido algo. Por ejemplo, esto es curioso, la noche de antes de dar el quinto premio en la Navidad de 2023 dábamos un paseo con Lola y pisé una mierda y me dijo Ana no te puedo creer".

Este trabajo trae consigo muchas anécdotas graciosas. "Ana me dijo que se estaban vendiendo muchos Euromillones, que llevaba toda la tarde y que le picaba la mano. Vamos a empezar a creérnoslo". Por otro lado, su trabajo se ve recompensado y agradecido como expresa Carlos: "Mucha gente del quinto premio y personas a las que tenemos cariño fuera de la administración nos han invitado a una cenita, son cosas que no son necesarias, ni las pedimos, pero claro que hace ilusión.

La Navidad trae muchas alegrías y con premios como los que dieron se formaron grandes fiestas: "Con el quinto premio, empezaron a llover periodistas y se quedaron a ver el sorteo. Fue un momento bonito, porque esa Navidad era la primera que Carlos pasaba fuera de casa, pero su familia fue allí y desde entonces, se ha convertido en una tradición. "La fecha del sorteo la pasamos juntos en San Fernando comiendo churritos mientras lo vemos", explica el balear.