Javier Ruiz, en el centro de la imagen, rodeado por Joaquín y su familia.

Javier Ruiz, en el centro de la imagen, rodeado por Joaquín y su familia. Cedida

Reportajes

Así convirtió el director Javier Ruiz a Joaquín en una estrella de la televisión: "Genera contenido desde que se levanta"

La familia del exfutbolista está inmersa en un nuevo reallity show y el director comenta con EL ESPAÑOL el éxito de su nuevo programa en Antena 3. 

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Joaquín Sánchez sigue triunfando en televisión. Tras las grandes audiencias logradas en Antena 3 con formatos como Joaquín, el novato o Emparejados, la productora Proamagna le propuso al exjugador del Betis un nuevo programa: “¿Qué te parecería hacer un viaje en familia viaje recorriendo Estados Unidos en caravana?”.

El exfutbolista aceptó la propuesta de Atresmedia y de la productora para grabar el road trip El capitán en América, que estrenó Antena 3 el pasado 15 de enero a las 22:50 horas. Durante ocho capítulos, Joaquín Sánchez, Susana Saborido y sus hijas Salma y Daniela recorrerá una de las rutas más icónicas de Estados Unidos.

“Ha sido una experiencia brutal, algo que volvería hacer, sin duda. Era la primera vez que nos íbamos los cuatro juntos de viaje, tan lejos y tanto tiempo. Pero el viaje en caravana fue el enlace de todo. Hemos vivido unas situaciones muy duras, pero ha sido maravilloso”, reconoció Joaquín, que se puso, una vez más, en manos de Javier Ruiz, el director del formato y subdirector de la productora Proamagna, que ya le había dirigido en los anteriores programas emitidos en Atresmedia.

“Creo que este programa engancha al público. Más allá del viaje físico que hace la familia, es un formato que integra humor, convivencia y mucha verdad; por lo que el espectador se va a sentir identificado con esta familia y las cosas que les pasan cuando lo vean. Hemos conseguido hacer en España el reality familiar y auténtico que no se ha hecho nunca en el país. Nunca se ha visto en televisión a una familia con esa pureza y verdad como con la que se van a ver a ellos, y la generosidad que han mostrado a la hora de rodar”, comenta Ruiz.

Además, añade: “La familia de Joaquín tenía muy claro cuáles eran sus virtudes y las han explotado, no han mostrado nada que no fuera real. Y eso que en estos programas hay una preproducción y algún planning que ellos sí saben, aunque ha habido muchas sorpresas. Pero han sido tan fieles así mismos, que eso, para un director, es un regalo”.

El periodista le ha hecho un hueco en su agenda a EL ESPAÑOL para desvelarnos los secretos del éxito de todos los formatos en los que participa Joaquín, que ya está enfocado en la grabación de la segunda temporada de Emparejados, que se podrá ver próximamente en Antena 3. No obstante, Ruiz también hace balance de la gran amistad que le une al exfutbolista y otras figuras importantes de su carrera profesional.

Suma de pasiones

Javier Ruiz es un gran aficionado a los viajes, como ya le contó a EL ESPAÑOL cuando se estrenó Joaquín, el novato: “Soy un obseso de los viajes, soy periodista gracias a Tintín, que era mi ídolo de pequeño porque hacía reporterismo y viajar, y yo he intentado adaptar ese objetivo de la infancia a mi vida. Siempre que puedo estoy viajando, es mi obsesión, acabo de llegar de viaje y ya estoy pensando que voy a hacer en navidades, el verano que viene… Trabajo para poder permitirme el lujo de viajar. Me apasiona la tele, me encanta y tengo la suerte de trabajar en lo que me gusta, pero este trabajo lo que me permite es viajar y es a lo que dedico todo mi tiempo libre”.

Javier Ruiz en la ruta 66.

Javier Ruiz en la ruta 66.

Con El capitán en América ha conseguido juntar sus dos pasiones, la televisión y viajar, logrando un formato que, en los tres capítulos que ha emitido Antena 3, ha logrado conquistar a la audiencia logrando un 16,3% de cuota, 1.335.000 espectadores y 2,9 millones de espectadores únicos, lo que le convirtió en el mejor estreno en Antena 3 desde septiembre de 2023.

Pregunta: ¿Cómo surgió la idea del formato?

Respuesta: Llevamos trabajando con Joaquín desde el año 2021. Y lo largo de todos estos años, hemos tenido la oportunidad de compartir muchos momentos junto a su familia. A todo el equipo siempre nos ha sorprendido la relación que tiene Joaquín con su mujer, Susana, y con sus hijas, Salma y Daniela. Esa relación tan especial, basada en el cariño y con un sentido del humor tan extraordinario, hacía que llevásemos mucho tiempo dándole vueltas a la idea de hacer un reality con toda la familia.

Pero teníamos que encontrar el momento oportuno. Lo que sí que teníamos claro es que queríamos sacarles de su hábitat natural, su zona de confort, y por eso pensamos que organizar un viaje internacional en familia podía ser la fórmula perfecta. Y, si te soy sincero, pensamos concretamente en la Costa Oeste por algo muy sencillo, yo hice ese viaje hace unos años y me enamoré por completo, ofrecía todo lo que queríamos para este reality: contrastes muy llamativos entre ciudades conocidísimas e impresionantes parques naturales, una ruta asumible por carretera… y en un idioma diferente al español. Era todo lo que buscábamos.

Rueda de prensa de presentación de El Capitán en América.

Rueda de prensa de presentación de El Capitán en América. Cedida

P: ¿Cuál es su labor exacta como director del programa?

R: En cualquier formato de televisión lo importante no es el director, sino el equipo que está detrás. Y en Proamagna tengo la suerte de trabajar junto a los mejores. El capitán en América se ha hecho realidad gracias al trabajo de más de 35 profesionales y su labor es la importante, no la mía.

Mi trabajo como director es muy difícil de resumir, porque intervengo en muchas partes del proceso, desde la creación del formato hasta la emisión. En la preproducción he sido el responsable de organizar la ruta del viaje y de plantear las situaciones junto al equipo de guion y redacción; en la grabación, mi principal función ha sido dirigir a la familia; y en la postproducción, reviso la selección del contenido que hacen mis compañeros, así como la edición final y los diferentes detalles de la realización.

Pero, insisto, el éxito es gracias al equipo. Yo solo tenía que conseguir que todos los elementos de contenido, producción y realización encajasen y que todo el equipo trabajase con un mismo objetivo: hacer el mejor programa de entretenimiento posible.

El equipo, con Ruiz al frente de la foto, en Yosemite

El equipo, con Ruiz al frente de la foto, en Yosemite

P: ¿Cómo ha sido convivir con la familia Sánchez Saborido?

R: Pues ha sido lo mejor de todo el reality. De verdad, convivir con los Sánchez Saborido es un chute de buenrrollismo y diversión. Con ellos es imposible aburrirse ni un solo minuto. Son generadores de contenido desde que se levantan hasta que se acuestan. Nunca dejan de sorprenderte con sus conversaciones, sus bromas, sus peleas y sus ocurrencias. Ojalá pueda viajar junto a ellos muchos años. Son entretenimiento en estado puro.

P: ¿Qué fue lo más complicado de la grabación?

R: La logística. Coordinar a un equipo de rodaje de más de 20 personas a lo largo de un recorrido de más de 3.000 km. Y hacerlo sin que la familia fuese muy consciente de todo lo que tenían detrás. Hemos intentando que ellos experimenten y vivan el viaje de la forma más real posible, sin que la técnica les frenase y consiguiendo que se olvidasen de las cámaras. Y, la verdad, es que hemos tenido la ayuda de un equipo de realización y producción que han hecho un trabajo brillante y han conseguido lo imposible.

P: ¿Cómo es la preparación previa a un programa así?

R: Muy compleja. Sobre todo, por la cantidad de permisos que necesitas en un país como Estados Unidos para grabar todo lo que queríamos. Hemos pasado horas y horas estudiando cada kilómetro de la ruta. Hemos hablado con cientos de personas para que todo saliese a la perfección: compañeros de producción de Estados Unidos, agencias de viajes, agencias inmobiliarias, hoteles, ayuntamientos, parques nacionales, negocios, vecinos, guardas forestales… y hasta con los sheriff de algunas localidades que hemos visitado. Ha sido un trabajo minucioso que comenzó 6 meses antes de salir a rodar.

El equipo de El Capitán en América.

El equipo de El Capitán en América. Cedida

P: ¿Fue difícil conseguir permisos de grabación? ¿Cómo fue el proceso?

R: Muy difícil. El papeleo para grabar cualquier cosa en Estados Unidos es muy laborioso. Pero, por difícil que fuese, nunca nos hemos dado por rendido. Y creo que hemos llegado a conseguir todo los que nos propusimos: desde volar en el Gran Cañón, hasta convivir con una familia de auténticos navajos en una Reserva Federal; pasando por casar a Joaquín y Susana en Las Vegas, navegar por la bahía de San Francisco; jugar al beisbol con un equipo profesional, recorrer parte de la ruta 66 con un club de Harley-Davidson; que Daniela aprendiese clases de conducción o dormir en un terrorífico motel de carretera.

Recuerdo, por ejemplo, que en el equipo queríamos que la familia acudiese a un auténtico rodeo americano. Fue algo tremendamente complejo, por los permisos que se necesitaban y, sobre todo, porque no era la época de rodeos. ¡Pues lo conseguimos! Movilizamos a todo un pueblo para poder hacer un rodeo en pleno mes de julio.

P: ¿Quién se portó ‘mejor’ y quién se portó ‘peor’ en el viaje? ¿Quién estaba más pendiente de la grabación, quién iba más a su bola, quién se cansaba de tantas cámaras…?

R: Los cuatro se portaron de una forma extraordinaria. Es que no te puedo poner un “pero”. Susana, a pesar de su conjuntivitis vírica, no renunció a grabar en ningún momento. Lo mismo con Joaquín, que a partir del capítulo 5 terminó contagiándose y lo pasó también realmente mal.

Han sido tan profesionales y tan generosos que no podría decirte que ninguno se haya portado mal. Eso sí, estoy seguro de que cuando les sonaba el despertador a las 5 de la mañana se tenían que acordar de mí, y no para bien… (risas).

Ruiz con Susana.

Ruiz con Susana. Cedida

P: ¿Podría decir que Joaquín y usted son amigos, además de compañeros de trabajo?

R: Joaquín tiene unos amigos maravillosos. Lo que sí que te puedo decir es que hemos pasado tantas horas grabando juntos que, creo, nos conocemos bastante bien. Hemos tenido la oportunidad de compartir muchos aspectos de nuestras vidas y de hablar de muchas intimidades.

A veces, con solo una mirada ya nos entendemos. Y de lo que estoy más seguro es que si algún día llamo a Joaquín para pedirle ayuda con algo, se va a dejar la piel para ayudarme. Así que sí, eso es un amigo. ¡Solo espero que él también sepa que, si me necesita, nunca le voy a fallar!

P: ¿Qué diferencias hay entre la grabación de El Novato y El capitán en América?

R: La verdad es que no tiene absolutamente nada que ver. El Novato se grababa en un solo día y era un programa que estaba todo mucho más medido: Joaquín tenía que aprender una profesión de la mano de alguien conocido. Esto ha sido un reality puro y duro. Por supuesto que teníamos una estructura en la cabeza y que el equipo se marcó un objetivo para cada capítulo, pero la clave era dejar que la familia fluyese y retratar lo que ocurría en cada momento. Hemos intentado intervenir lo menos posible y que la familia viviese el viaje más inolvidable de sus vidas.

P: ¿Qué tiene Joaquín que engancha al público?

R: Todo el mundo destaca el sentido del humor de Joaquín. Y es verdad que esa es una de las claves, que tiene una sonrisa en la cara desde que se levanta hasta que se acuesta. Pero, por encima de eso, yo destacaría de Joaquín que es “buena persona”, y creo que eso también lo aprecia el público. Joaquín es una persona que siempre te apetece tener cerca.

Además, creo que es alguien que es muy consciente de quién es, con sus virtudes y con sus defectos, y no pretende aparentar otra cosa delante de las cámaras. Tiene una naturalidad y una personalidad arrolladora, y eso cada vez es más difícil de encontrar delante de las cámaras. Engancha eso, su naturalidad, su cercanía. Ha sido uno de los deportistas de élite más importantes de España, pero los espectadores lo sienten como si fuera alguien de su propia familia.

Joaquín y Susana con sus hijas.

Joaquín y Susana con sus hijas. Cedida

P: ¿Le ve presentando un programa de deportes o moderando una tertulia deportiva o a él le gusta más el entretenimiento?

R: Joaquín puede hacer en televisión todo lo que se proponga. Si algo he aprendido tras dirigirle en Joaquín, el novato, Emparejados y ahora en El Capitán en América es que Joaquín es una caja de sorpresas constante. Todavía le quedan muchas facetas por mostrar y estoy seguro de que va a seguir conquistando a la audiencia con cada formato que presente.

P: Tu ascenso en la productora Proamagna ha sido impresionante… ¿Cómo lo valora?

R: Proamagna es mi casa. Es la productora en la que he podido desarrollarme profesionalmente. Comencé a trabajar con solo 26 años y espero jubilarme aquí. Me gusta los programas que hacemos, cómo los hacemos y con las personas que los hacemos. ¡Y encima desde mi tierra, Andalucía!

P: ¿Qué significa Pablo Carrasco en tu carrera?

R: A Pablo Carrasco le debo todo. Pablo no ha dejado de confiar en mí desde que comenzamos a trabajar juntos en el año 2013 (hace 12 años ya). A su lado he aprendido casi todo lo que sé de televisión. Me ha dado la oportunidad de crecer y de formar parte de programas de televisión de muchísimo éxito y creo que jamás podré agradecerle lo suficiente su confianza. Para mí es mucho más que el CEO de Proamagna, es mi familia.

Ruiz con Pablo Carrasco.

Ruiz con Pablo Carrasco.

P: ¿Sigue siendo fan de Tintín y de los viajes?

R: ¡Un fan de Tintín nunca puede dejar de serlo! Estas mismas navidades me han regalado una camiseta con su rostro. Si lo pienso bien, creo que Tintín es uno de los grandes culpables de que estudiase periodismo. Y respecto a los viajes… siempre bromeo y digo que trabajo para poder permitirme viajar. Y es verdad. Nada en el mundo me hace más feliz que viajar junto a mi familia y mi novio, José. Creo que ya tenemos organizados los próximos cinco viajes. ¡Y no te exagero! Viajar, conocer otras culturas, otros paisajes, interactuar con personas lo más diferentes posibles… es el mejor regalo que te puedes hacer a ti mismo.

P: ¿Qué otros proyectos tiene en mente? ¿Tiene miedo a que te asocien siempre con los programas de Joaquín?

R: Ahora mismo tenemos decenas de proyectos en mente en Proamagna. Nadie se puede imaginar la de formatos que se quedan en un cajón antes de que uno vea la luz.

Tener un cargo de responsabilidad en una productora supone estar constantemente con los cinco sentidos en alerta para dar con la clave del próximo programa. Todos los formatos que hemos producido en Proamagna son propios, ninguno son licencias compradas de otros países. Y de eso estamos muy orgullosos. Hemos producido más de 15 formatos para las grandes cadenas nacionales y autonómicas del país, y todos ellos han salido de nuestras cabecitas. ¡Eso es una pasada! Siempre decimos que somos especialistas en pensar el formato perfecto para cada presentador y para cada cena. Nos encanta hacer “un guante a medida”. Y eso andamos ahora, en la creación de los que, ojalá, sean los próximos éxitos de los diferentes operadores de España.

Y no, no tengo miedo a que me asocien a los programas de Joaquín. ¡Cómo voy a tener miedo a que me asocien a programas de éxitos! Gracias a Joaquín he podido experimentar lo que es hacer un 29’5% de audiencia en televisión. ¡Y no creo que vuelva a vivir algo así! He tenido la suerte de dirigir y trabajar junto a otros muchos profesionales y al final, lo importante no es que te asocien a una cara, sino a un tipo de programa. Y yo me siento muy orgulloso del sello de calidad que tienen todos los formatos de los que he formado parte en Proamagna.