Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo Montepríncipe, con sus alumnos.

Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo Montepríncipe, con sus alumnos. Esteban Palazuelos

Reportajes

Un día en el colegio con la coordinadora de bienestar, el 'invento' de Belarra: "Es igual que un orientador"

EL ESPAÑOL habla con Ana Enguita, del CEU San Pablo Montepríncipe, en su primer día como coordinadora de bienestar tras 14 años siendo orientadora.

10 septiembre, 2022 02:53
Carlos Lara Esteban Palazuelos

"Ayer tuvimos reuniones informativas con los padres para explicar todo el cambio que hay con la reforma de la Ley Educativa, que están un poco preocupados...". María José Bello directora del Colegio CEU San Pablo de Montepríncipe (Madrid), confirma a EL ESPAÑOL lo que ya se sospechaba: que hay desconocimiento y mucha inquietud ante esta vuelta al cole. "Es un tema que repercute en la formación de nuestros niños, que son lo más importante que tenemos en la vida", señala Bello.

En la cima del volcán ideológico se ha encontrado durante todo el verano la nueva figura impulsada por la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 Ione Belarra: el coordinador de bienestar. EL ESPAÑOL ha vivido la primera jornada escolar —que es también el primer día de este nuevo puesto— junto a una coordinadora de bienestar para intentar arrojar algo de luz sobre su pertinencia: ¿"comisarios políticos en los colegios", como alertó Ayuso, o solución al problema del 'bullying', como asegura Belarra?

Encontramos a Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo de Montepríncipe uno de los 100 mejores colegios privados de España según el ranking de EL ESPAÑOL— en un aula que funciona como metáfora de lo que es en realidad este nuevo puesto de coordinador de bienestar.

[La impotencia de un padre ante el 'bullying' que sufre su hijo en un instituto de Tarragona]

Como despacho para una sola persona es enorme —"aquí se hacían antes los exámenes", revela Enguita—. Hay cajas y sillas amontonadas y obreros acá y allá, que todavía está por montar el aire acondicionado. No se puede decir, desde luego, que no sea espacio donde pueda desarrollar bien su trabajo, al contrario, por más que esté por acabar. La improvisación del entorno se cuela en la meticulosidad con que trabaja Ana.

Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo Montepríncipe.

Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo Montepríncipe. Esteban Palazuelos

Tanto espacio y, sin embargo, Ana Enguita está en su esquinita, con su mesa de siempre, sus papeles de siempre, y casi que sus labores de siempre. Cambia el envoltorio, pero su trabajo viene a ser el mismo. Los últimos 14 años ha sido la orientadora de este centro. "Yo soy psicóloga, hice la especialidad de Infantil en la Complutense, y sí, es el primer año que tengo el nombre de coordinadora de bienestar, pero realmente es igual que una orientadora", cuenta Enguita.

¿En qué consiste?

La Ley Orgánica 8/2021, de 4 de junio, de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia inventa el puesto de "Coordinador o Coordinadora de bienestar y protección" en su artículo 35, dentro del capítulo IV: Del ámbito educativo.

En su primer punto, establece que "todos los centros educativos donde cursen estudios personas menores de edad", ya sean públicos, concertados o privados, deberán contar con esta persona en su plantilla. En su segundo punto, dice que "las administraciones educativas competentes determinarán los requisitos y funciones que debe desempeñar el coordinador" y si "estas funciones han de ser desempeñadas por personal ya existente en el centro escolar o por nuevo personal".

No se dan más detalles sobre la formación que debe tener esta persona, por lo que muchos sindicatos han protestado. "Es una figura improvisada y sin negociarse", se quejaban desde CSIF. "Además de coordinador de bienestar, tiene que ser el tutor de un curso completo", explicaba a este periódico el director de un colegio de Castilla-La Mancha, haciendo referencia a la solución a la que han llegado en algunos centros: endosarle el 'papelón' al profesor de Geografía o de Matemáticas, ante la falta de recursos para contratar nuevo personal. En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, la educación secundaria ha sufrido un recorte de más de mil profesores para este curso.

En el CEU San Pablo de Montepríncipe no han tenido este problema. El equipo de orientación del centro cuenta con cuatro psicólogas, cada una centrada en una etapa educativa. Ana Enguita es quien gestionará todo el equipo. Enguita analiza para EL ESPAÑOL las principales funciones cuyo desempeño deberá garantizar el coordinador de bienestar según la ley:

Promover planes de formación sobre prevención, detección precoz y protección. "Eso es lo que hemos hecho siempre", afirma Enguita. En el CEU cuentan con un plan específico de prevención: el Plan AVE, que explica lo que es el acoso escolar, la estrategia de prevención, identificación e intervención, y se presenta como guía de actuación para las familias.

La manera en que se da el 'bullying' en la actualidad está muy ligada a las redes sociales. El equipo de Enguita prepara materiales para que los tutores puedan trabajar esta problemática en el aula. "Lo que quieres es que el niño no solamente aprenda Lengua o Matemáticas, sino que sea buena persona, tolerante, que sepa relacionarse con los demás... Puedes tener un alumno con una adolescencia muy fuerte, pero trabajamos desde que son chiquititos con las familias para evitarlo. Si solo dependiera de los colegios, estamos perdidos", piensa Enguita.

Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo Montepríncipe, con sus alumnos.

Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo Montepríncipe, con sus alumnos. Esteban Palazuelos

Esta experta explica que hay varias formas de detectar rápidamente un caso de 'bullying': "A veces son los compañeros que vienen y te dicen: 'Oye, mira, Fulanito le está haciendo la vida imposible a Pepito'. O son los padres, o un profesor, incluso el cocinero, como me pasó un año, que me avisó de una niña que estaba triste y no quería comer". La opción menos probable, por desgracia, es que sea la propia víctima la que acude buscando ayuda. 

• Que estos planes estén dirigidos tanto al personal como al alumnado, y ofrecer formación a madres y padres. "En realidad, esto también se hacía antes a través de las famosas escuelas de padres. Nosotros lo organizamos mucho con el Ayuntamiento de Boadilla", cuenta Enguita sobre la formación a los padres.

Enguita y sus compañeras estuvieron recibiendo formación sobre estos asuntos durante el mes de julio y en octubre empezarán a transmitirles estos materiales e información al resto de profesores del colegio, que superan la centena. "Sobre todo enfocamos en los docentes nuevos, porque los que llevan aquí un tiempo ya lo conocen", matiza. Estas actividades las llevan a cabo fuera del horario escolar, cuando no hay alumnos.

• Coordinar los casos que requieran de intervención por parte de los servicios sociales competentes, e informar a las autoridades cuando sea necesario. "Nosotros hemos tenido algún caso de tener que llamar a servicios sociales. Recuerdo uno cuyo origen era un tema familiar. El acoso tiene que llegar a unos límites muy fuertes para que se meta la policía", explica.

• Promover medidas que aseguren el máximo bienestar para los niños. "Esto es un poco lo mismo...", ríe Enguita. "Siempre hemos querido que el niño se sienta bien en el cole, que sea un espacio agradable, donde aprendan, crezcan y se relacionen". 

Para ello, preparan dinámicas sociales. Ahora, al principio del curso, tienen una para que todos los alumnos se conozcan, especialmente los nuevos, que son más de 100 cada año. Además, hay semanas enfocadas en trabajar actitudes como el respeto, la empatía o la asertividad.

Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo Montepríncipe.

Ana Enguita, coordinadora de bienestar del CEU San Pablo Montepríncipe. Esteban Palazuelos

• Fomentar entre el personal del centro y el alumnado la utilización de métodos alternativos de resolución pacífica de conflictos. Este punto también saca una sonrisa de Enguita: "¿Qué son métodos alternativos?", se pregunta.

Si se diese el caso de una situación de acoso, el centro cuenta con un régimen sancionador "y los alumnos tienen que aprender que todo acto tiene una consecuencia, pero ¿métodos alternativos? Gracias a Dios, podemos hablar y llegar a hacernos entender".

Ana Enguita explica que los métodos de resolución de conflictos no han cambiado en los 14 años que lleva trabajando en el colegio. No así la situación social, las familias o la estabilidad. A raíz de la pandemia, por ejemplo, "se ha disparado el tema de enfermedades de salud mental y conducta alimentaria, con muchísimas autolesiones". 

Enguita no pierde de vista que "nosotros somos un centro privado de la zona noroeste de Madrid, no estamos en un barrio humilde y, aunque problemas tiene todo el mundo, aquí es todo muy amigable, no somos un cole de integración ni hay alumnos con discapacidad". Eso no quita para que tengan alumnos que pasan una situación complicada, y ellas son las que los apoyan y los enseñan a gestionarlo. Pero cambio en los métodos, ninguno.

• Promover, en aquellas situaciones que puedan implicar un tratamiento ilícito de datos de carácter personal de las personas menores de edad, la comunicación inmediata por parte del centro educativo a las Agencias de Protección de Datos. Nada más mencionar este punto de la ley, se aprecia en el rostro de Ana Enguita que se trata de un tema espinoso.

Las normas del CEU San Pablo especifican que el alumno no puede tener el móvil encendido durante la jornada lectiva. "Hay veces que un teléfono se ha requisado 15 días, y tienen que venir los padres a recogerlo", asevera.

No obstante, hay cosas que no se pueden controlar y los alumnos utilizan el teléfono móvil más allá de los límites del colegio. "Si hay algún problema fuera del cole con nuestros alumnos, nos entrevistamos con ellos para comprobar su implicación. Si es verdad, nos ponemos a trabajar pico y pala con las familias".

Los principales problemas llegan con redes sociales como Instagram, o "la que no ha sido sensata y ha mandado una foto poco apropiada y eso rula", dice Enguita. Para evitarlo, la Guardia Civil les da charlas a partir de 5º de Primaria.

 Fomentar que en el centro educativo se lleva a cabo una alimentación saludable y nutritiva. "Cuando leí este punto dije: '¡Ostras, ahí va!'", confiesa Enguita. "Sí que es verdad que promovemos la alimentación saludable, les decimos que no traigan bollería industrial para el almuerzo, mejor un bocata de los de toda la vida".

Una iniciativa que han estado desempeñando a este respecto los últimos años es, en Infantil, dar la consigna de que no lleven nada de comer para celebrar los cumpleaños. "O, si traen, que sean brochetas de frutas, que están muy bien", matiza. 

En el comedor del colegio "siempre hay verduras o ensaladas", pero es el equipo médico y de nutrición de la universidad el que ayuda a hacer los menús a los cocineros. La influencia de la coordinadora de bienestar en este sentido no va más allá de pedirle a los padres, en las reuniones de inicio de curso, que los alumnos lleven alimentos saludables para el recreo.

 Fomentar la diversidad. Enguita dice que en su colegio no distinguen a nadie por cuestiones sexuales o raciales. En temas de sexualidad, imparten desde hace un año talleres de educación afectivo-sexual, "pero ahí también hay una parte muy importante que es la familia porque nadie quiere que a su hijo lo eduque otra persona en determinados ámbitos".

Por ello, los padres que no estuviesen de acuerdo con el contenido de los talleres pudieron comunicar su deseo de que el niño o la niña no asistiese. "Hubo un par de familias. En realidad, son solo dos sesiones al año y tampoco entramos en temas delicados ni comprometidos, somos un colegio católico", explica Enguita.

Belarra contra Ayuso

El 9 de junio de 2020 Unidas Podemos presentaba el anteproyecto de Ley de Protección Integral a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia. Casi un año después, en mayo de 2021, el Congreso de los Diputados aprobaba la ley orgánica, que se publicó en el BOE el 5 de junio de ese mismo año.

Sin embargo, no fue hasta noviembre de 2021 que quedó marcada la hoja de ruta respecto a la figura del coordinador de bienestar. El curso 21-22 estuvo marcado por los 750 protocolos anti suicidios puestos en marcha en Educación Secundaria y, como ha indicado Ana Enguita, los problemas de salud mental van en aumento.

Ione Belarra presentaba la iniciativa a bombo y platillo como solución al asunto. Isabel Díaz Ayuso, en cambio, la calificó de "comisarios políticos en cada colegio para acabar con la libertad de profesores y alumnos" y acusó al Gobierno de crear "instituciones en paralelo a la legalidad". No obstante, el Partido Popular había votado en el Congreso a favor de la Ley de la Infancia, que se saldó con 297 votos favorables, 52 contrarios —los de Vox— y ninguna abstención.

En este contexto, la polémica estaba servida. Para Ana Enguita, "hay cosas que, por sentido común, son lógicas. Es como la figura de un director, que es evidente que tiene que haberlo". Es decir, no se puede estar en contra de una serie de cuestiones como la prevención del 'bullying' o educar en el respeto a la diversidad. 

Sin embargo, la ley no ha venido acompañada de medidas concretas para atajar el problema de raíz. Para impulsar una medida tan necesaria haría falta dotar a los centros de recursos y la colaboración activa de las autonomías. No todos los colegios cuentan con las infraestructuras y las dinámicas del CEU San Pablo Montepríncipe, donde hay hasta cuatro psicólogas y, aún así, Enguita prevé una carga de trabajo mayor este curso.

"En realidad, yo soy la orientadora de Primaria. Pero ahora también tengo que estar en los problemas de conflictos en 1º y 2º de la ESO, que son el pan nuestro de cada día. Yo soy el nexo cuando venga el inspector, por ejemplo, y también tendré que entrevistarme con alumnos que no son de Primaria", lamenta Enguita, aunque de buen humor. Otros años daba horas de clase, pero este ya no podrá hacerlo por la carga de trabajo extra que le supone el nuevo cargo. 

Ana Enguita se ha encontrado con un nuevo despacho en su vuelta al cole, mucho más amplio, y con más funciones repartidas en las mismas horas de trabajo: las que su jornada completa permite. También ha pasado de dirigir el departamento de orientación a ser la coordinadora de bienestar. Sin embargo, su primer día ha consistido en lo mismo que los 13 cursos anteriores: organizar.

Papeles de Ana Enguita en su primer día organizando el departamento.

Papeles de Ana Enguita en su primer día organizando el departamento. Esteban Palazuelos

En breve comenzarán las entrevistas con los alumnos nuevos; también con los padres que ya han llamado para pedir cita. Mientras los políticos discuten sobre cosas nuevas que suenan a antiguo, ella está a lo de siempre: ayudar a que esos 1.370 niños y niñas estén lo mejor posible.