La plaza de toros de Estella (Pamplona) tiene una capacidad para 4.500 personas.

La plaza de toros de Estella (Pamplona) tiene una capacidad para 4.500 personas. Diario de Navarra

Reportajes

La histórica plaza de toros de Estella, 'cagódromo' para perros donde triunfó José Tomás y el Juli

Desde las 9.30 a las 22.30 horas, durante casi todo el año, los canes podrán corretear por el coso centenario para hacer sus necesidades. 

10 abril, 2019 14:29

Los canes de los vecinos de Estella (Navarra) ya pueden corretear y hacer sus necesidades a lo largo y ancho de la plaza de toros de la ciudad. Este coso centenario, que acumula una gran tradición en el mundo del toro, estaba inutilizado durante 350 días al año. Y el alcalde, Koldo Leoz (Bildu), pensó que la mejor forma de sacarle rendimiento era que los estellicas pudieran pasear allí a sus mascotas.

Así que esta plaza de toros, inaugurada el 2 de septiembre de 1917 y con una capacidad para 4.500 personas, se ha convertido en lo que entre la ciudadanía se denomina como pipican.  O como prefiere llamarlo el alcalde, una zona de esparcimiento canino en Estella. 

Desde las 9.30 a las 22.30 horas de este lunes, el recinto abrió sus puertas para que los vecinos pudieron llevar a sus perros a dar vueltas al ruedo y se relacionasen con los de su especie. Además, en la plaza también se impartirán cursos de adiestramiento gratuitos para los dueños. 

La plaza de toros de Estella fue inaugurada el 2 de septiembre de 1917.

La plaza de toros de Estella fue inaugurada el 2 de septiembre de 1917.

Aunque el primer día, los vecinos que fueron a torear con sus mascotas se contaron con cuentagotas -según recogen los diarios locales-, Merche Castillo fue una de las primeras que se acercó con su caniche blanco, llamado Suki. Contenta con la iniciativa, mostró interés por ir a ver al lugar y sobre todo por los cursillos que se van a realizar los dueños. "Aunque mi perro es muy sociable, sí quiero que aprenda en ellos", comentó la vecina.  

Se trata de una decisión personal del alcalde Leoz, que veía como la plaza de utilizaba dos veces al año, unos 10 o 15 días en total, quedando el resto inutilizado. En las fiestas de agosto y en la capea del Club Taurino, a finales de junio eran las únicas fechas en las que se celebraban festejos. Además, el pasado año, los jóvenes decidieron que en las fiestas "txikis" también se prescindiera de los toros

El primer edil comentó su iniciativa con su equipo de Gobierno y con otras personas de tu entorno, y a nadie le parecía mal. "Era darle uso a un edificio público que está vacío 350 días al año. Aunque esta decisión del Ayuntamiento no impedirá que el coso centenario siga celebrando eventos taurinos, es decir, será de uso complementario, la noticia ha estado envuelta en polémica, sobre todo por parte de las reacciones que ha tenido el Club Taurino de Estella. 

En lo que ahora es un pipican, de estilo árabe o granadino compuesto por 80 palcos, se ha "jugado la vida José Tomás, El Juli, Jesulín de Ubrique y también ha toreado el más grande rejoneador de todos los tiempos: Pablo Hermoso de Mendoza", ha criticado Jorge Crespo, presidente del Club Taurino de Estella, en declaraciones a eldiario.es. "Es una falta de respeto hacia el mundo del toro. Los toreros se juegan la vida en la arena". 

"Cada cosa tiene su espacio y su sitio. Estella es una zona privilegiada, con muchos jardines y monte. La plaza no está preparada", argumenta Crespo, que también es dueño de dos perros. Para él, esta plaza centenaria, en la que se estrenaron el torero Francisco Posada y el novillero Francisco Peralda, "no es el lugar adecuado" tanto por su su seguridad como por su falta de preparación.  

El alcalde de Estella, Koldo Leoz.

El alcalde de Estella, Koldo Leoz.

A nadie se le ocurriría hacer esto en la plaza de Pamplona, donde se celebran los festejos taurinos más conocidos en el mundo. Es más, añade este taurino, al alcalde de la capital navarra, Joseba Asiron (también de EH Bildu), está presente en el tendido de sol en algunas tardes de corrida en San Fermín y también lo está en el día grande, el del 7 de julio. "Es indignante que la plaza se haya convertido en un lugar donde los perros se meen y se caguen", añade el presidente del club, en declaraciones a Navarra.com.

A pesar de la ya esperada reacción de los taurinos, el alcalde de Estella no descarta también dar otros usos a la plaza de toros, además de los taurinos y el del pipican. Aún así, la decisión de que este espacio ocupe otras actividades, no gusta al Club Taurino de Estella: "Podríamos abrir otra zona en el cementerio: casi no va nadie tampoco y los que están seguro que no se quejan", comenta con gracia. Aún así Jorge Crespo quieren pensar que esta iniciativa del alcalde esté basada en aprovechar la plaza al máximo, y no en la futura eliminación de estos festejos en la ciudad. 

Bildu ha demostrado ya en numerosas ocasiones su oposición al mundo taurino y sus intenciones de que desaparezca. Precisamente, por este municipio de 14.000 habitantes circulaba en las redes sociales este lunes un mensaje escrito por el alcalde, Koldo Leoz, en el que contestaba a una vecina que pedía el fin de los festejos taurinos en la localidad.

"Soy el primero que las suspendería, porque pienso igual que tú, es una tortura convertida, encima, en espectáculo. Lamentable. Pero no podemos entrar como un elefante en una cacharrería, ya que es lo que quieren. Sobre este tema, como en otros (por ejemplo, la religión), tendré que tragarme sapos y culebras hasta que el debate se abra en serio en la sociedad de Estella y una mayoría social pida su final. Que trabajaremos para que eso se dé lo antes posible, tienes mi palabra", le contestó a la vecina, el alcalde, Koldo Leoz.