Gloria Tornay, semanas antes, había estado comiendo con toda su familia. Había visto a su hijo mayor, que reside en Australia, y al pequeño. Acompañada por su marido, había disfrutado de un día primaveral en Estepona. Nadie, entonces, podía imaginar que aquella fuera la última reunión de los cuatro juntos. El sábado, su marido, Geoffrey Elton, de nacionalidad británica, a sus 55 años, acabó con su vida. Le asestó 10 puñaladas –como refleja la autopsia– mientras ella trataba de huir. Los agentes, al llegar, encontraron sangre por toda la casa y a los dos en la habitación en una escena “dantesca”, tal como describieron. Ella estaba muerta y él lo parecía. Había tratado de quitarse la vida, pero todavía mantenía las constantes vitales. Lo trasladaron de urgencia al hospital. Allí, consiguieron estabilizarlo. Después, la Policía lo detuvo como el presunto asesino de la que fuera mayordoma en las fiestas de su pueblo en 2007. 

El matrimonio llevaba 30 años de convivencia y, según sus vecinos, “nunca habían tenido problemas graves”. Se habían conocido por azar y habían formado una familia. Gloria, natural de Montejaque (Málaga), se había trasladado a Estepona “hace tiempo”, pero seguía acudiendo al pueblo. Allí, era muy querida. “Era una buena madre, luchadora y una gran trabajadora. Venía de una familia muy grande y muy querida aquí”, cuenta Diego Sánchez, alcalde de la localidad, a EL ESPAÑOL. Tenía ocho hermanos. Con la mala suerte de que dos de ellos se habían suicidado y su madre había muerto hace un año. 

A menudo, Gloria, de 58 años, acudía al pueblo. “Participaba en todo lo que podía en Montejaque. Fue mayordoma de la Virgen de la Concepción en 2007, cuando se organizaron unas fiestas magníficas y, casualmente, también estuvo en los últimos carnavales. Hace 10 días me la encontré en la calle. Quién me iba a decir a mí que era el último día que la veía”, lamenta el alcalde en conversación con este periódico. “Es una pena. Hay que acabar con esta lacra de la violencia de género”, sentencia. Desde el Ayuntamiento han decretado tres días de luto oficiales.  

La Policía, en la casa de Gloria, asesinada en Estepona (Málaga).

Hasta el pasado sábado, nadie podía creer que fuera a ocurrir algo así. Geoffrey Elton, su marido, tampoco era, en principio, una persona problemática. De nacionalidad británica, había vivido de una empresa de satélites y se había jubilado hace muy poco tiempo. Y, a menudo, junto a su mujer, acudía al pueblo. “Era una persona muy callada, no hablaba demasiado”, cuentan algunos de los vecinos de Montejaque. Pero, claro, lo que no creían es que fuera a acabar con la vida de ‘su’ Gloria. 

Lo hizo el sábado, un día después del 8M, por la noche, en un chalé de la calle Reino de España, en la urbanización Forest Hills, en Estepona. A las 23:30, los servicios de emergencias recibieron la primera llamada. Hablaba de una fuerte discusión dentro de la casa. Al llegar, sólo encontraron silencio y al hijo menor de la pareja, de 15 años, en la puerta. La echaron abajo y accedieron a la vivienda. A ella la encontraron en la cama del dormitorio, con heridas de arma blanca en la espalda y en el pecho. 

Él también estaba sobre el suelo desangrándose. Había intentado cortarse las las venas, pero seguía vivo. Lo llevaron al Hospital Costa del Sol. Horas después, recibió el alta y fue conducido a los calabozos de la comisaría de Estepona. Geoffrey había asestado hasta 10 puñaladas a su pareja. Es más, antes de hacerlo, había echado a su hijo de la casa. Este intentó volver, pero no pudo. Mientras, su padre estaba matando a su madre, a Gloria. 

Geoffrey usó dos cuchillos diferentes para matar a su mujer. La persiguió por toda la casa –había muestras de sangre por todas las habitaciones– y la asesinó, finalmente, en el dormitorio. Era la segunda víctima por violencia de género tras el 8 de marzo. La primera fue el mismo viernes, en Ciudad Lineal, en el Barrio de Canillejas (Madrid); y la segunda, el domingo, en Valga (Pontevedra). Estas dos últimas, asesinadas de la misma forma: sus maridos les pegaron un tiro y después se suicidaron. 

En total, las víctimas por violencia de género en 2019 ascienden a 12. Seis de ellas fallecieron en enero, en un mes negro. Tres más lo hicieron en febrero y otras tres engrosan la estadística de marzo. La lacra continúa. “Desolada tras conocer el crimen machista en Valga (Pontevedra). Inmensa rabia y dolor. Nuestra firmeza para combatir esta lacra”, tuiteaba Carmen Calvo, vicepresidenta del Gobierno de Pedro Sánchez. "Ojalá y sea la última", remata, el alcalde de Montejaque. 

Gloria Tornay Naranjo es la undécima mujer asesinada este año por su pareja o expareja. En España, en 2019, también han sido asesinadas María José Aboy Guimarey, 43 años; Estrella Domínguez, 63 años; Sheila Chazarro Moyano, 29 años;Daría Oliva Luna, 20 años; Rosa María Concepción Hernández, 60 años; Rosa Romero Rueda, 69 años;Rebeca Santamalia, de 47 años; Romina Celestede 28 años; Leonor Múñoz González, de 47 años; Rebeca Alexandra Cadete, de 26 años. La serie 'La vida de las víctimas' contabilizó 47 mujeres asesinadas en 2018 y 53 mujeres en 2017. 

Noticias relacionadas