
Traugott G. Graser dirigiendo al Coro Vocalisse (A Coruña) en el concierto del X aniversario de la formación en el Forum Metropolitano.
Pasión por el góspel en A Coruña: pequeñas familias con amor por la música y animados repertorios
La Rock School de A Coruña o el Conservatorio Superior de Música cuentan con clases y coros donde adentrarse en esta disciplina musical que cada año levanta pasiones en la ciudad con un espectáculo navideño en el Palacio de la Ópera que suele agotar entradas
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A Coruña es una ciudad musical, no solo por los festivales y numerosos conciertos que acoge, sobre todo en verano, sino que en esta ciudad en la que predomina el lema "andar de parranda e durmir de pé" hay géneros musicales más alternativos que no son los predominantes entre el público pero que se están haciendo su propio espacio.
Este es el caso del góspel, una disciplina musical que en el imaginario común está interpretada por grandes grupos de cantantes con túnicas a juego que desarrollan animadas actuaciones con enérgicos temas. En A Coruña es posible formar parte de coros góspel de la mano de Rock School y el Conservatorio Superior de Música.
Quienes se animan a probar acaban siendo parte de pequeñas familias de personas que no se conocerían entre sí si no fuera porque comparten esta afición y muchos alegan que incluso les sirve como "terapia" en la que se sienten apoyados, además de superar miedos como ser cantante solista.
Quien es conocedor de los beneficios del góspel y los retos que supone es el profesor de piano, voz y coro góspel desde hace una década en la Rock School de A Coruña, Daniel García. El profesional reconoce que las clases que imparte, la experiencia coral, "es algo desconocido para el público en general pero es una experiencia muy bonita, enriquecedora y muy buena para todo el mundo".
Asegura que lleva toda una vida en coros, a los que define como "grupos en los que acabas desarrollando amistad con gente que en condiciones normales no conocerías pero que la casualidad ha unido por las ganas de cantar y la pasión por la música".
"En el góspel esto se amplifica por lo que tiene de apasionante ese fervor "religioso" y la gente que viene a cantar muchas veces no lo es pero sí que vienen buscando esa familia, ese desahogo, ese grupo donde expresarse y hacer algo bonito todos juntos", afirma.
En sus clases hay gente de todas las edades y clases sociales: "les tiene que apetecer venir a probar al coro y que les guste cantar", advierte, a la vez que considera beneficioso de su coro que cuentan con una profesora de baile que complementa la parte de canto que él imparte. "Instruímos sobre otra pequeña parte escénica en la que enseñamos movimientos básicos para el escenario", detalla.
El reto de cantar e inglés y el miedo escénico de los solistas

Coro de la Rock School de A Coruña.
El profesor asegura que a mucha gente lo primero que le cuesta es que casi todo lo que se canta es en inglés, pero apunta que al margen de eso lo que gusta gusta y forma parte del espíritu de góspel son los coros donde la gente se hace uno, dos o tres solos a lo largo de la actuación.
"Me gusta que toda la gente del coro se anime a hacer su solo, su frase, su aportación individual al grupo aunque eso suele dar vértigo y vergüenza y a la gente le cuesta lanzarse, pero como todo el mundo pasa por eso todo el mundo se arropa, tiene un punto grande de terapia, es bonito provocar eso", subraya.
Los espectáculos suelen abrirlos con el mítico tema Oh Happy Day, que puede considerarse de largo el tema más versionado de la historia. También hacen versiones de Amazing Grace, un tema más tranquilo y sobre todo su repertorio son canciones muy enérgicas, como I will follow him de The Sister Act.
También interpretan otros temas de gospel más tradicional, que según el profesor de Rock School "son lo que era el góspel en el origen, cuando alguien dice una frase, todos le contestan y se hace una especie de discurso entre el solista y el coro".
En las clases de góspel han llegado a formar un coro de 15 personas pero no se pone límites: "nos encantaría crecer mucho y sería estupendo cuantos más mejor, lo bonito de los coros es que todo el mundo suma y aporta, a todos nos interesa que todos lo hagamos bien", desea.
Detalla que hay gente de todo tipo: desde menores de edad de 14,15, 16 o 17 años a jubilados, por lo que confirma que "la edad no es un impedimento".
A su vez, las túnicas son un elemento muy reconocible del estilo góspel que en su coro se utilizan en varias partes de las actuaciones y deja claro para futuros alumnos que "no es nada difícil de cantar ni moverse y la mayoría de los movimientos son libres".
García tiene sobrada experiencia en este mundillo porque lleva trabajando desde hace casi 15 años en la Sinfónica de Galicia y dirige desde hace ese mismo tiempo el coro joven de la Sinfónica, gracias a lo que ha desarrollado mucha experiencia tanto dirigiendo como cantando.
Coro jazz góspel pop como asignatura optativa
Traugot Grasser es un alemán profesor de trombón jazz en el Conservatorio Superior de A Coruña, donde lleva 17 cursos, 12 de ellos en el coro como asignatura optativa. Es director de coro en A Coruña desde hace casi 20 años y propuso él mismo la optativa del coro góspel.
"Cada año tengo un coro diferente en relación con los alumnos interesados y lo hacen durante un semestre o un curso, depende de los créditos que necesiten. Cada curso empieza de cero, es situación distinta a un coro que existe durante años donde el trabajo es continuo", especifica.
Se muestra satisfecho de poder trabajar con músicos formados, con gente que sabe leer partituras y destaca que "evidentemente no somos coro góspel por excelencia, sino que somos jazz, pop y góspel e intento cubrir con arreglos corales esos tres géneros de música".
Arreglos de All of me unidos a Oh Happy Day son el tipo de temas de su repertorio y de los géneros musicales que abarca su coro, determina que el único género que es música coral es el propio góspel donde de por sí hay coros que se alternan con solistas.
"Intentamos que los estudiantes canten breves solos o solos improvisados, empiezo cada curso con un coro nuevo", afirma, lo que le obliga en cada nuevo curso a estudiar las voces de las que dispone para componer el repertorio, que pueden dividirse en: sopranos, contraltos, tenores o bajos.
Considera que "lo que da un poco de respeto es lo de cantar solo" pero confirma que "muchos superan la vergüenza de no tener detrás el apoyo del grupo". "El góspel permite a quienes lo practican formar parte de un grupo y la interacción social y es una música sencilla aunque evidentemente tiene arreglos, pero entra bien al oído y es expresiva, permite sentir lo que uno canta", aclara.
Un detalle curioso y a la vez desconocido que destaca es que "la música pop que se escucha hoy en día en todas partes tiene parte de sus orígenes en la música góspel".
A este respecto, considera este profesional que en los últimos 25 años ha habido un aumento notable de coros que se especializan en góspel, consolidando progresivamente el auge de este género musical en Galicia.