Jornada Conexión de la Maker Faire Galicia en la Cidade das TIC.
Galicia, una tierra de oportunidad para la innovación tecnológica: "Estamos en un punto clave"
La Cidade das TIC de A Coruña celebró este miércoles la jornada Conexión de la Maker Faire con profesionales de diferentes sectores pero la innovación como punto en común
Más información: A Coruña acogerá el 8 de octubre la jornada 'Conexión Maker Faire Galicia'
Este miércoles la Cidade das TIC de A Coruña celebró una jornada de Maker Faire Galicia bajo el título Conexión, con el objetivo de conectar el talento, la tecnología y la innovación industrial de Galicia y desde el territorio gallego.
El encuentro, impulsado por la Maker Faire Galicia en colaboración con el Igape, Startup Galicia y el Clúster TIC Galicia, reunió a representantes de entidades públicas, clústeres, startups y universidades en torno a tres grandes temáticas: energía, salud y economía circular.
La directora general del Igape, Covadonga Toca, inauguró la sesión reivindicando "el talento gallego como motor de una economía innovadora, sostenible y abierta al mundo". Subrayó además que Galicia "es hoy un territorio con visión de futuro, en el que las ideas se transforman en proyectos gracias a la creatividad, la cooperación y el espíritu emprendedor".
Toca hizo hincapié en que Galicia cuenta con un ecosistema cada vez más vivo, en el que universidades, centros tecnológicos, clústeres, startups y empresas tradicionales colaboran entre sí, generando sinergias que multiplican el impacto de la innovación. En este camino, el Igape acompaña con programas que impulsan la modernización tecnológica de las pymes, acercan la investigación al tejido productivo y apoyan la puesta en marcha de nuevas ideas.
Tras la bienvenida, tuvo lugar una mesa moderada por María Parga, de Maker Faire Galicia, y con la participación de Carmen Pumariño, presidenta de Startup Galicia; Antonio Rodríguez del Corral, presidente del Clúster TIC Galicia e Isaac Rosón, del área de innovación del IGAPE, en la que la conversación giró en torno a la necesidad de digitalización y los desafíos de la inteligencia artificial y de la falta de relevo generacional.
Un espacio para co-crear desde la confianza
Desde la organización, Marcos Saavedra destacó que la Conexión Maker Faire Galicia nace precisamente de una idea lanzada por Covadonga Toca: salir de las jornadas de la Maker Faire y llevarlas a otros espacios, como la Ciudad de las TIC, con el objetivo de generar sinergias entre diferentes sectores y entidades público-privadas en un clima de confianza.
"La innovación no puede hacerse en islas. Necesitamos crear espacios donde las personas y las organizaciones se conozcan, compartan y co-creen", señaló.
Como destacó Carmen Pumariño, presidenta de Startup Galicia, es fundamental "mezclar industrias y conocimientos para aprovechar mejor los recursos y entrelazar colectivos", una idea que resume el espíritu del evento.
Biodiversidad de la industria gallega
A continuación, llegó el turno de la biodiversidad de la industria gallega. En este caso, la conversación estuvo moderada por Pablo Grandío, director de Quincemil y Treintayseis y contó con la participación de Carlota Cañamero, integrante del equipo del proyecto Siluro de la UVigo; Natalia Seoane, del equipo de la USC responsable de RePowerSiC; y Samuel López de Néboda Farms, una start-up centrada en sistemas de agricultura vertical y cultivo hidropónico sostenible.
Todos estos proyectos partieron de lugares distintos. En el caso de Cañamero, esta profesional de las telecomunicaciones tenía claro que quería llevar a cabo una iniciativa que respondiera a los Objetivos de Desarrollo Sostenible y que tuviera un impacto social.
"Acabei coa idea de facer un dron mariño que recoñece basura flotante en entornos como lagos ou mar e recollela. Ten parte de condución autónoma na que se detecta animais e vexetacion e asi a pode evitar", explicó. Así fue como nació el proyecto Siluro de la UVigo, una embarcación autónoma, reciclada y sostenible.
Conexión Maker Faire Galicia 2025
Por su parte, la innovación en el proyecto de Seoane, una tecnología con carburo de silicio y que se puede aplicar a la exploración espacial, partió precisamente de la pregunta. ¿Cómo podemos iluminar zonas del espacio que no se podían iluminar? Todo ello motivó un análisis hasta encontrar en el carburo de silicio una oportunidad.
El proceso en el caso de Néboda Farms fue diferente. López sitúa dos fases en la etapa de innovación, partiendo de un análisis de mercado para ver qué demanda hay en la agricultura vertical para posteriormente diseñar una tecnología propia que hiciera la producción más eficiente.
Aprendizajes y oportunidades
El desarrollo de todas estas iniciativas ha dejado varios aprendizajes por el camino. La mayor parte de ellos se centran en los motivos para innovar y cómo hacerlo, aunque también en oportunidades imprevistas.
"Decidimos apostar por un proceso máis sinxelo e a partir de aí ter un produto diferenciado", explicó López.
Por su parte, Cañamero destacó la oportunidad de tener una formación transversal, mientras que Seoane valoró el contacto de empresas europeas interesadas en su tecnología para otros usos: "Todo ello enriquece y abre opciones a futuro".
La experiencia también les ha hecho valorar qué se necesita para empezar proyectos innovadores de esta envergadura. Los tres han coincidido en señalar los recursos como una parte fundamental, tanto de tiempo como económicos, pero también humanos. "Lo más importante es el capital humano. Estamos formando a gente que no podemos retener. La gente joven es la que tiene el entusiasmo por investigar y es difícil que, cuando se van, vuelvan", subrayó Natalia Seoane.
El escenario gallego actual es, en este contexto, un lugar de oportunidades. "Hai bastante potencial no privado e no público", valoró Samuel López, añadiendo que, Una vez más, "o que falta é tempo para aplicalo aos proxectos innovadores".
Con él coincide Carlota Cañamero, que ve este momento como un "punto clave" para Galicia y el sector primario, "que é estratéxico porque nos alimenta e nos da saúde". Para ello, ve necesario "cambiar a mentalidade de ver a IA como unha amenaza e vela como unha ferramenta".
En el caso del proyecto de Natalia Seoane, el escenario es distinto, ya que aunque Galicia puede proveer de expertos en robótica, óptica, electrónica o informática, carece de las infraestructuras necesarias.
De todas formas, la Maker Faire se perfila como un lugar de oportunidades para la industria gallega. Los tres ponentes coincidieron en señalar esta iniciativa como un lugar de encuentro entre distintos sectores y profesionales que facilita, además, adquirir nuevos puntos de vista claves en materia de innovación.
El evento continuó con un coloquio en torno al libro Galicia, Distrito Industrial, con las intervenciones de Daniel Hermosilla (Rodiñas), Pilar Vila (Forensic & Security) y el autor Antón Bahamonde. La moderación correrá a cargo de Alexandre Bastos, en representación de Startup Galicia y AIMEN.
La jornada estuvo organizada por el equipo de la Maker Faire Galicia en colaboración con la Xunta de Galicia a través del IGAPE, Startup Galicia y el Clúster TIC Galicia, y supone una parada estratégica en su particular viaje para tejer redes de innovación por todo el territorio, antes de las grandes citas de octubre y noviembre.
Una de ellas tendrá lugar el día 31 de octubre. Se trata de la Jornada de la Industria de la Maker Faire Galicia que tendrá lugar en Santiago de Compostela.
Una mañana de conexión e ideas
La Conexión Maker contó también con la participación de Daniel Hermosilla (Rodiñas), Antón Baamonde (escritor y profesor de Filosofía), Pilar Vila (Forensic & Security) y Alexandre Bastos (AIMEN), entre otros.
El evento se cerró con un almuerzo de networking en el propio espacio de la Ciudad de las TIC, consolidando este formato como una plataforma para inspirarse, colaborar y construir una Galicia más innovadora y conectada.