El Ejecutivo de Pedro Sánchez juega contra el crono. Antes del 30 de abril debe de  enviar a Bruselas su plan definitivo de reformas, que es la llave que abrirá la puerta a la primera parte de los fondos de recuperación.

Pero además de contra el tiempo, el Gobierno ha de vérselas con un obstáculo que dificulta más la tarea: la falta de una mayoría parlamentaria clara para sacar adelante algunas de sus medidas. Es el caso, por ejemplo, de la subida de algunos carburantes como el diésel.

Dos semanas clave

También hay asuntos por resolver en materia laboral y de pensiones que el Gobierno debe de abordar con sindicatos y empresarios, y que van desde la reforma del mercado laboral a las prestaciones de jubilación. No se trata, como dijo la ministra Nadia Calviño, de simples "flecos pendientes".

Entramos, por tanto, en dos semanas claves para definir el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Hay que tener presente que Bruselas quiere concreción. No le basta un mero listado de intenciones, y está muy pendiente de ver respuestas a "debilidades estructurales" de nuestra economía, como apuntó la semana pasada 
el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, en el Wake Up Spain!

¿Cómo superar en diez días tantas trabas sin un acuerdo amplio? Que el plan de recuperación se cierre deprisa y corriendo puede suponer, en el peor de los casos, un rechazo en la Comisión Europea, que evaluará todas las reformas. Más aún esperará a que se vayan poniendo en marcha mientras decide la entrega del primer paquete de ayudas.

Examen a España

El Ejecutivo tiene una prueba difícil porque a España le van a poner nota, y ahora, más que nunca, no puede permitirse un suspenso. Hacerlo supondría quedarse a la cola en la entrega de las ayudas. Y un retraso pondría en riesgo la recuperación.

Confiamos en que se esté aún a tiempo de no perder el primer tren, pero ahora se ve con claridad que las reformas deberían haberse pactado mucho antes. En esto sucede como con los estudiantes: los buenos no esperan a los últimos días para preparar el examen, se aplican desde el principio.