89 cosas que me flipan de Andalucía (y que la convierten en el mejor lugar del mundo)

4. Los bares de carretera donde se desayuna manteca colorá y "un mitad" (café con leche) al lado de un viejo expositor de casetes giratorio desde donde te miran Lole y Manuel, Manolo Escobar, El Fary y La Niña de los Peines. Y tú les devuelves la mirada.

5. Joselito cantando La Campanera con toda la carilla de una golondrina.

6. Cuando Umbral le preguntó a la preciosísima y católica Carmen Sevilla, "escucha, Carmen, ¿por dónde se empieza a ser mujer?", y ella respondió, con mucha altanería: "Por las rodillas".

7. Cernuda, enamorado en secreto homoeróticamente, escribiendo esa joya llamada Si el hombre pudiera decir lo que ama.

8. Dellafuente, su enigma granaíno y su Pa mejor.

9. Cuando un Cristo malagueño llamado El Rico excarcela a un preso sin delitos de sangre, porque sí, el Miércoles Santo. Venga, pafuera. Y cuando mi amiga Mar graba un documental contando la historia del Lolo, uno de esos muchachos liberados por una cofradía... al que nunca le interesaron los milagros, sino las motos y el campo.

Chiquito.

10. Chiquito de la Calzada, que parió un diccionario surrealista mejor que el de la RAE: académico nuestro contracultural, tú que estás en los cielos. Como decía aquella canción: el surrealismo en el sur es realismo.

11. María Zambrano, que dijo "escribir es defender la soledad en la que vivo".

12. Manuel de Falla y El amor brujo: lo escuchas y dan ganas de ponerte místico o de enamorarte, que al final es un poco lo mismo.

13. Decir "te camelo" en lugar de "me gustas".

14. Las musas serán del mundo, pero el duende y el ángel son andaluces.

15. Mariana Pineda, granaína ejecutada de pro, liberal impenitente. ¿Ocupación? "Revolucionaria", dice Wikipedia. Ya quisiéramos que dijeran eso de nosotros.

16. Las flamencas viejas cantándole a Morante de la Puebla, torero nietzschiano, irregular y mágico, "la cara de mi Morante... más gitana no la hay".

17. El Torta, que fue el único hombre por el que Camarón se rasgó la camisa al escucharlo cantar, echándose unas bulerías y llorando solo, como en trance.

18. La anécdota en la sobremesa. Limar la gracia afilándola con los dientes, volviéndola exacta. La respuesta precisa y veloz. Nadie juega como un andaluz al ping-pong dialéctico.

19. El arte de la improvisación (una energía inigualable, un motor de búsqueda, un runrún que le come a uno el cerebro como un ratón enjaulado). El arte de saber a qué hora se sale de casa pero nunca a qué hora se vuelve. Como bien dijo Antonio Gamero, para un andaluz, "como fuera de casa, en ningún sitio".

20. Decir "fatiga" en su acepción de "vergüenza", decir "aliquindoi" como sinónimo de "estar atento", decir "pechá" en vez de "mucho", decir "parguela" en vez de "tonto".

21. La cultura de no tener ni pa' pipas, pero que siempre quepa uno más en la mesa. La cultura de la generosidad y la bienvenida y el agasajo. En Andalucía, de un trozo de pan salen diez y comen doce.

22. El simbolismo. Las imágenes. El misterio. La oralidad. Las leyendas. Los mitos. Andalucía inteligentísima, con el ojo girado hacia dentro, hacia el fondo de uno. De la carne para atrás y aún más allá del hueso.

23. Tote King cantando Como en casa.

24. Caballero Bonald hablando de que para él el verdadero andaluz "es el reconcentrado, el introvertido, el melancólico, ya sea Juan Ramón Jiménez, Antonio Machado o Luis Cernuda; el andaluz jaranero, alegre, dicharachero... son tópicos y lugares comunes". Eso habrá que verlo, pero me gusta. Me gusta el alma bípeda, el alma esquizofrénica andaluza, neurótica por igual en sus secretos que en sus algarabías.

25. El ritmo, los silencios, la cadencia, las musiquillas que se esconden en el hablar andaluz y que vienen del compás del jondo.

26. Cuando Quintero (con sus carcajadas largas y lentas que le rendían la cabeza hacia atrás de puro placer, ha, ha, ha) le preguntó a Antonio Gala: "Oiga, ¿qué es lo más inteligente que se puede hacer en la vida?", y Gala le respondió: "En principio, yo le diría: irse a una playa".

Pilar Albarracín.

27. Las performances de Pilar Albarracín. Cuando se metió en la cama con un toro, estilo postcoital, y se echó un cigarro (fue como follar con España). Cuando le sangraron los lunares del traje de flamenca. Cuando reinterpretó irónica y brillantemente a la mujer ibérica y estereotipada.

28. Luis Rosales, que sería falangista pero tenía amigos de izquierdas a los que encubría, y escribió "para toda la vida no basta un solo amor / tal vez el nuestro sea para toda la muerte".

29. El brasero de las señoras mayores para dejar morir el día. Ahí dentro ni el diablo te roza.

30. Alberti y sus exiliadas maneras de extrañar la patria shica.

31. Los primeros acordes de La niña de fuego, por Manolo Caracol.

32. "Estábamos en la UVI; nadie daba un duro por nosotros; yo os entrego ahora un Betis libre, limpio, en primera, de ustedes, viva el Betis". Lo-pe-ra. También el himno del Sevilla: "Y es por eso que hoy vengo a verte...".

33. Una familia malagueña retratada por Joel Meyerowitz.

Familia malagueña. Meyerowitz.

34. Victoria Kent, la primera abogada de España.

35. Cuando Carlos Herrera sube a Twitter una foto de una procesión de Semana Santa, un usuario le contesta "¿ya estamos paseando muñecos?", y él responde: "Paseando a tu puta madre".

36. Joaquín Sabina, que escribió la mejor canción de amor e insatisfacción en castellano, Y sin embargo.

37. María Jiménez, que vio la muerte en la UCI, regresó de sus garras y, cuando le quitaron el tubo de respiración asistida, lo primero que dijo fue: “Me tenéis hasta el coño”. María Jiménez cantando por Sabina. María Jiménez cantando Te estás pasando de la raya. María Jiménez cantando Háblame en la cama mientras se acariciaba los pechos. María Jiménez, toda, todo el rato.

38. Mi Cádiz, que a ratos da epifanías de Cuba. Comer chicharrones en Casa Manteca. Bañarse en La caleta. Sentir que el mundo está bien hecho.

La Caleta de Cádiz.

39. El Albaicín. Las vides trepadoras de Jerez de la Frontera como persianas rayando el sol en las tardes (y mi amigo Miguel, el camarero veterano de la plaza del Arenal que te responde a todo con "olé tú" y que rescató mi móvil momentáneamente perdido en una noche toledana). Las naranjas caídas de los árboles en el barrio de Santa Cruz, en Sevilla, pesadas, olorosas. Los baños del Carmen en Málaga.

40. Cuando voy a comer a casa de Curro y me echa arroz en el plato y me dice, como las abuelas andaluzas, "tú te come lo que tú tenga de gana".

41. Economía e imaginación del lenguaje al mismo tiempo. Vanguardia inmensa, libérrima: un don andaluz colosal para la creación viva de la palabra. Metáforas calientes como panes en el horno. Lo dijo Blas de Otero: "Mi gente dice cosas formidables / que hacen temblar a la gramática". Pues eso.

41. Las folclóricas inventándose su edad. Las folclóricas, orgullosas como gatas persas, rabiando en pasiones, con filias y fobias descaradas y siempre una coletilla histórica después de putear a la que fuera: "... pero es muy amiga mía".

42. José Pérez Ocaña paseando por Las Ramblas travestido con pamela, gafas de sol, falda y peineta, mientras sonaba de fondo Francisco Alegre.

Ocaña por Las Ramblas.

43. La elegancia andaluza, que consiste en hacerlo todo sin rigidez, pero con oficio.

44. Sara Baras, que fue la primera que se quitó el traje de cola y se puso unos pantalones para bailar una farruca.

45. Juan Ramón Jiménez cuando escribió "y yo me iré / y se quedarán los pájaros cantando". O "¡Yo sólo vivo dentro de la primavera! / Los que la veis desde fuera / qué sabéis de mi centro". Efectivamente: un hombre que era una estación cambiando, un hombre que habitó una casa construida con hojas que clareaban... un hombre que era un estado de ánimo en fuga. Juan Ramón Jiménez desafiando las leyes de la lengua, rebelde infatigable, pidiéndole a su "intelijencia" que le diese el nombre "esacto" de las cosas. "Que mi palabra sea / la cosa misma / creada por mi alma nuevamente". Juan Ramón Jiménez, el gran desobediente.

46. Los Planetas.

47. Grupo de Expertos Solynieve cuando cantó: "Y por la noche me meto en el sobre y me acuerdo cuando estaba yo en Graná. Qué a gusto estaba yo en Graná. Y sé que me espera toda la noche en vela pensando cuándo volveré a Graná...".

48. Cuando el mánager de dios, es decir, el Papa, le pidió a Niña Pastori que actuara para él (porque le fallaban las comunicaciones con el Altísimo y en las cuerdas vocales de la Niña él intuyó un trampolín...).

49. Las mezquitas nuestras. Las catedrales. Las ermitas. Las cúpulas, todas, abriéndose en flor.

50. Las chirigotas de Juan Carlos Aragón, vitriólico, lírico, feroz, temible.

51. Las pataditas tonteantes de Isabel Pantoja y María del Monte en la playa en aquella portada mítica del Semana. El jijí, jajá. El mamoneo, que es una cosa muy andaluza. El marear la perdiz.

52. Marinero de luces, el disco de la Pantoja compuesto por José Luis Perales a la muerte de Paquirri, con hits como Hoy quiero confesarme o Era mi vida él. Tonadilleras y toreros, historias de amores locos.

José María Manzanares, Carmina Ordóñez y Paquirri.

53. La alegría descarada de Carmina: "A mí plín, yo soy Ordóñez Dominguín". Y el nombre de sus tres amigos más queridos y gamberros: "Er Chuli", "Er Pay" y "Er Cabra". Agüita.

52. Los patios encalaos.

53. Hemingway quedándose prendado de Ronda, yendo con Antonio Ordóñez a ver en las Goyescas al Niño de la Palma.

54. Lola Flores cantando "si en el firmamento poder yo tuviera...". Pero lo tenía. Lola Flores cantando Hey, de Julio Iglesias, pero pronunciándolo "¡Jey!", como si te agarrara de las solapas. Lola Flores cantando dándose golpes en el pecho como una campana.

55. La Mala Rodríguez en Por la noche o 33.

56. Los geranios, las gitanillas, los rosales con mucha espina.

57. Rafaela Aparicio.

58. Yung Beef, La Zowi y Empezar de cero.

59. La exageración, que es una forma de poesía. Una forma de vivir en realidad aumentada, de vivir a la verdadera altura de la vida.

60. Llegar a la estación de tren con las gafas de sol y creerme Martirio. Llevar por la vida una bata de cola imaginaria. Darse teatro. Darse a una ceremonia.

61. Manuel Alcántara en sus tardes de boxeo, cuando rumiaba sus poemillas de niño malagueño de posguerra mientras a los tipos rudos les saltaban los dientes: "No se estaba ya en guerra aquel verano / mi padre me llevaba de la mano / yo estudiaba segundo de jazmines".

Joe Strummer en la Feria de Almería.

62. La foto de Joe Strummer con un sombrero cordobés en la Feria de Almería en 1986, con un Winston casi levitándole en la boca, adherido mágicamente al labio.

63. El quejío, que es cuando estar roto le da sentido a la vida.

64. Las maldiciones, que es cuando las palabras cobran cuerpo en el mundo.

65. Antonio Banderas cuando tenía el pelo largo y le caían las cadenas de oro por el pecho. Antonio Banderas y Pasión Vega cantando, arrobados, en un programa de Canal Sur, el bolero No sé por qué te quiero.

66. Llorar riendo. Reír llorando. Ser gente mú sentía, muy pendular. El horror está al lado de la belleza. La muerte colinda con la vida. La tragedia es el reverso de la fiesta.

67. Juan y Medio, el novio de Andalucía, y la autoridad, la dignidad y el pundonor que le da en sus conversaciones a los ancianos solitarios.

67. Lorca en Bodas de sangre. El querer apretao, apretao: "¡Qué vidrios se me clavan en la lengua! Porque yo quise olvidar y puse un muro de piedra entre tu casa y la mía. Es verdad, ¿no lo recuerdas? Y cuando te vi de lejos, me eché en los ojos arena. Pero montaba a caballo y el caballo iba a tu puerta".

68. Decir "te como la cara" en vez de "qué buen aspecto tienes hoy".

69. Decir "los pueblos y la Humanidad" y no "España y la humanidad" al cantar el himno de Andalucía.

70. Triana. El barrio y el grupo fundacional del rock andaluz. Tu frialdad.

71. La biografía de Belmonte por Chaves Nogales, dos sevillanos como un piano.

72. Cuando pararon el juicio de El Cigala para pedirle que no llamase "cariño" o "corazón mío" a la fiscal y a la abogada de la defensa. Cuando El Cigala se persigna antes de un concierto metiendo los dedos en su cubata de ron naranja, como quien se autobautiza. El disco de El Cigala con Bebo Valdés al piano.

73. Cuando los adolescentes andaluces nos creíamos los muchachos de 7 vírgenes y cantábamos la de Haze: "¿E o no? De campaneo por el barrio". En el banquito de la plaza, en un móvil como una piedra, siempre sonaban Andy y Lucas y Kiko y Shara.

Fotograma de 7 vírgenes.

74. A faltar a clase o a hacer pellas se le llama "piarda", que suena como un balonazo zumbón en la oreja.

75. Machado con sus días azules y su sol de la infancia.

76. Los Delinqüentes y la filosofía garrapatera: vivir con poco, no ambicionar, pasear la guitarra, escribirle poemas a las moscas y a los claveles. Migue Benítez, el ángel caído que nos enseñó a apretar los dientes.

77. Bécquer y su leyenda El rayo de luna.

78. Javier Egea y su Noche canalla.

79. Elvira Lindo, la gaditana madre del madrileño Manolito Gafotas.

80. El minigolf de Torremolinos. El Torremolinos kitsch. Los bajos de Torremolinos. Torremolinos como un túnel del tiempo. Torremolinos marica y libre. Torremolinos con tangas, brillantinas y espetos.

81. El Omega de Lagartija Nick y Enrique Morente. "Hay que hacer cosas para molestar, molestar es muy necesario, porque si no, somos molestados solamente, y eso no puede ser".

82. Saber que "illo" es un saludo, pero "illo, illo, illo" es "se está liando".

83. Cuando le preguntaron a Paco de Lucía: "¿Qué es más importante a la hora de tocar la guitarra, la derecha o la izquierda?", y él contestó, con mucha intención: "La izquierda es la que hace música, es creativa. La izquierda es inteligente. La derecha es la que ejecuta". Esa apreciación le valió una paliza por ocho matones ultraderechistas.

La Duquesa de Alba y Lola Flores.

84. Zahara. Biznaga. Vera Fauna. La Plazuela. El Virtual. El Foyone. Alejandro Simón Partal. Sara Mesa. Cristina Morales. Zatu cantando "el sur es lo que tiene, tía, que vamos lento, y que somos mú pesaos pa' que no nos lleve el viento".

85. La Duquesa de Alba bailando descalza el día de su boda, es decir, la idea de perder siempre los modales en pos de la alegría. Maestros del desparrame, divertidos y ruidosos, magos de la excentricidad.

86. Dormir la siesta en verano en cualquier parte, buscando una sombrita. Bañarse en el mar en tetas.

87. El palique. El palicón. Sillas en las puertas de las casas de los pueblos para practicar durante horas ese deporte de alto nivel.

88. La vieja friendo huevos de Velázquez. El Guernica de Picasso.

89. La felicidad de ser un niño andaluz desayunando en el colegio un mollete de pan con aceite de oliva (y azúcar o sal) por el Día de Andalucía.