Línea de producción de proyectiles de 155 mm en una planta de Rheinmetall Reuters
Rheinmetall revitaliza el sector militar del flanco este de la OTAN con nuevas fábricas de armas en Lituania y Rumanía
Estas plantas se suman a las ya anunciadas en Letonia y Bulgaria y reafirman el rol protagónico que la empresa pretende desempeñar en el rearme europeo.
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Alemania ha sido uno de los países de la OTAN que más en serio se ha tomado la política de rearme promovida por la Unión Europea, compromiso que ha llevado a la confección de uno de los mayores presupuestos de defensa de todo el continente. Frente a este contexto, no es de extrañar que sea una empresa germana la que impulse la reindustrialización militar del continente.
Rheinmetall ha dado un paso adelante para posicionarse como uno de los líderes del sector de la defensa en Europa. Esta decisión la ha llevado a ampliar sus lazos industriales más allá de sus socios tradicionales, con especial atención al flanco este de la Alianza Atlántica, el más interesado en reforzar su maquinaria militar dado su proximidad —y vulnerabilidad— a la amenaza rusa.
De esta manera, la firma alemana ha suscrito un acuerdo con Pirochim Victoria, filial de la estatal rumana Romarm, para constituir una empresa conjunta con el propósito de producir pólvora propulsora y propelentes modulares. El proyecto incluye la instalación de una fábrica, en el centro de Rumanía, que requerirá una inversión mayor a los 500 millones de euros.
La capacidad de producción anual estimada es de aproximadamente 300.000 cargas propulsoras modulares, lo que requiere unas 750 toneladas de polvo. Además, se producirán 200 toneladas de polvo propulsor para satisfacer la demanda local, según han informado esta semana desde Rheinmetall a través de un comunicado.
En las mismas instalaciones también se producirán precursores energéticos como la nitrocelulosa. Según los planes actuales, la producción de polvo propulsor y cargas propulsoras modulares comenzará en 2028. Así, el gigante germano planea superar el cuello de botella que la producción de pólvora supone para la industria militar europea. "La nueva planta de producción en Rumanía representa un paso más hacia nuestro objetivo de alcanzar una capacidad de producción anual de 20.000 toneladas de pólvora propulsora para 2030", ha explicado Armin Papperger, CEO de Rheinmetall.
Asimismo, la empresa alemana ha encabezado este miércoles la ceremonia de inicio de las obras para una nueva planta de producción de munición de artillería de 155 mm en Lituania, que abarcará una superficie de aproximadamente 340 hectáreas.
De acuerdo a lo comunicado por la compañía, la fábrica lituana contará con una forja de casquillos y una planta de llenado. Se prevé, además, una capacidad de producción de decenas de miles de proyectiles al año. En este caso, el desembolso requerido asciende a 300 millones de euros.
Inicio de la construcción de la nueva fábrica de munición de Rheinmetall en Lituania Rheinmetall
Según el cronograma confeccionado por Rheinmetall, la planta entrará en funcionamiento en 2026, mientras que la cualificación de la línea de producción se llevará a cabo hasta finales de ese año. Posteriormente, en función de la demanda, se iniciará un aumento gradual de la producción.
"La futura planta es un elemento clave para fortalecer las capacidades defensivas y la seguridad de Lituania y la región en general. Contribuirá a satisfacer nuestras propias necesidades y las de nuestros aliados", ha señalado la primera ministra lituana, Inga Ruginienė.
Durante la ceremonia de colocación de la primera piedra, el Gobierno lituano y la empresa alemana firmaron un nuevo memorando de entendimiento para establecer un Centro de Excelencia para la fabricación de componentes energéticos y vainas combustibles, así como una línea de montaje para la producción de cargas propulsoras modulares con una capacidad de producción de varios cientos de miles de módulos al año.
Los nuevos proyectos en Lituania y Rumanía se suman a los que Rheinmetall ya anunció, semanas atrás, en Letonia y Bulgaria. En estos países la compañía planea instalar una planta para el desarrollo de munición y una fábrica con capacidad de producir anualmente 100.000 proyectiles de artillería, respectivamente. Ambos proyectos implican también alianzas con la industria local.
"Cifras récord"
Rheinmetall ha informado este jueves de "cifras récord" durante los primeros nueve meses del año. La armamentística ha comunicado unas ganancias netas atribuidas de 368 millones de euros en los primeros nueve meses del año, un 50,2% más que los 245 millones de euros del mismo periodo del ejercicio anterior, mientras que su cartera de pedidos al cierre de septiembre rozó los 64.000 millones de euros tras incrementarse en casi un 23% en términos interanuales
Del mismo modo, la facturación de la compañía se situó en 7.515 millones de euros, un 19,89% más que los 6.268 millones de euros que ingresó entre enero y septiembre de 2024. La empresa ha achacado este crecimiento a "la situación de la política de seguridad y del aumento significativo de los presupuestos de defensa en numerosos países".
En este sentido, sus principales mercados continúan siendo Europa, Alemania y Ucrania, según han subrayado a través de un comunicado. Por su parte, Papperger ha resaltado que una de las prioridades de la compañía es seguir avanzando en su expansión en Europa.
"Ampliar la capacidad mediante inversiones en muchos países europeos, asociaciones y nuevas plantas sigue siendo una alta prioridad para nosotros. Actualmente, estamos construyendo 13 nuevas plantas en Europa y ampliando significativamente las existentes", ha detallado el CEO.