Personal de la UME en los incendios

Personal de la UME en los incendios UME

Observatorio de la Defensa

La UME cumple veinte años auxiliando a los españoles en situaciones de grave riesgo, catástrofes y emergencias

Veinte años después, su compromiso permanece intacto: estar siempre preparada para acudir allí donde su ayuda sea imprescindible. Como dice su lema "Para servir".

Más información: Aire, Tierra y Armada, juntos en la guerra contra el fuego: la Unidad Militar de Emergencias recibe el apoyo de todas las FAS

Publicada

La Unidad Militar de Emergencias (UME) celebra hoy su vigésimo aniversario, dos décadas al servicio de quienes más lo necesitan. Fue en 2005 cuando el Consejo de Ministros aprobó su creación, marcando el inicio de una historia dedicada a proteger la seguridad y el bienestar de la ciudadanía.

Veinte años después, su compromiso permanece intacto: estar siempre preparada para acudir allí donde su ayuda sea imprescindible. Como dice su lema "Para servir".

Desde su creación, esta unidad de élite de las Fuerzas Armadas, ha respondido eficazmente cada vez que España u otros países han enfrentado situaciones de grave riesgo, catástrofes o emergencias que amenazaban vidas y hogares. Así, ha intervenido en 781 emergencias a lo largo de todo el territorio nacional y en misiones internacionales, la mayoría de ellas —559— en la extinción de incendios forestales, seguidas de actuaciones en inundaciones y rescates (77) y tormentas invernales (45).

Entre sus características destacan su alta preparación y flexibilidad para actuar en todo tipo de emergencias con una total autonomía logística. Además, su disponibilidad y el empleo en masa garantizan una rápida intervención y el sostenimiento del esfuerzo de forma continuada.

Algunas de sus actuaciones más destacadas se desarrollaron en el marco de la 'Operación Balmis', durante la pandemia (2020), realizando cerca de 6300 actividades relacionadas con el COVID-19, entre ellas, el traslado y custodia de las personas que habían fallecido y que no tenían a sus familias cerca. En el momento álgido de la crisis sanitaria, desde la UME decidieron no dejar solos a los fallecidos, los velaron y "trataron a cada uno de ellos como si fuera un compañero", tal y como señaló, entonces, la ministra de Defensa, Margarita Robles, en su emotivo mensaje en el depósito de cadáveres provisional instalado en el Palacio de Hielo de Madrid.

Para acometer todas las misiones relacionadas con la citada pandemia (entre ellas, traslado de pacientes afectados por coronavirus entre diferentes centros hospitalarios, el apoyo en el montaje de albergues para personas sin hogar y hospitales de campaña), la UME desplegó diariamente unos 1.150 militares desde todas sus unidades (Madrid, Sevilla, Islas Canarias, Valencia, Zaragoza y León), con la finalidad de abarcar el mayor número de poblaciones del territorio nacional.

Igualmente sobresalió la labor de la UME en la asistencia a la población durante la tormenta Filomena o en la erupción del volcán de La Palma en 2021. En esta última, los militares de la UME estuvieron presentes en la isla durante varios meses, integrándose en el dispositivo de respuesta y utilizando medios como autobombas, nodrizas, vehículos ligeros de reconocimiento (VELIRE) y drones.

También ha sido destacada su actuación en los rescates y tareas de reconstrucción tras el paso de la DANA por las provincias de Valencia, Albacete y Cuenca en 2024.

Una de esas misiones, la de Valencia, fue especialmente recordada por el actual jefe de la Unidad, el teniente general Francisco Javier Marcos Izquierdo, durante los actos conmemorativos del 20 aniversario, celebrados este sábado.

Marcos Izquierdo subrayó que el “dolor vivido”, el “esfuerzo realizado” y, sobre todo, “las miradas de agradecimiento, de confianza y de esperanza” de la población dejaron “una huella imborrable” en cada uno de los hombres y mujeres de la UME.

También fue reseñable su intervención durante el apagón eléctrico general, del pasado 28 de abril, que paralizó el territorio peninsular durante más de diez horas y obligó a declarar por primera vez una emergencia de interés nacional en ocho comunidades —Andalucía, Extremadura, Murcia, La Rioja, Madrid, Castilla-La Mancha, Galicia y Comunidad Valenciana—.

Gran proyección internacional

En estos 20 años, la UME se ha consolidado como un referente mundial en la respuesta ante grandes catástrofes y como una eficaz herramienta exterior del Estado. Desde su creación, ha participado en 26 misiones internacionales, llevando la experiencia y la capacidad de respuesta de España a escenarios de emergencia en todo el mundo.

En 2011, la UME marcó un hito histórico al convertirse en el primer equipo militar del planeta en obtener la certificación de Naciones Unidas como equipo de Búsqueda y Rescate Urbano (USAR), un reconocimiento que avala su profesionalidad y preparación en intervenciones de alta complejidad.

En 2023, sus equipos se desplazaron a Turquía y Siria tras el devastador terremoto que asoló ambos territorios, colaborando en las operaciones de búsqueda y rescate urbano y llevando esperanza en medio de la tragedia.

Aún permanecen en la retina de muchos ciudadanos españoles aquellas imágenes que dieron la vuelta al mundo, cuando efectivos de la UME, consiguieron rescatar de entre los escombros de un edificio tras el devastador terremoto de Turquía a una madre, Leyla, y sus dos hijos, Elif y Muslim, en febrero de 2023. Un acto que supuso el primer rescate de supervivientes de un seísmo en la historia de la UME.

En septiembre de 2023, también participaron de forma activa en las tareas de rescate de las víctimas del terremoto que azotó el sur de Marruecos el día 8 de septiembre y causó casi 3.000 muertos.

Su compromiso con la cooperación internacional se refleja también en su integración en el Mecanismo Europeo de Protección Civil, a través del cual ha intervenido en los incendios forestales de países como Grecia, Turquía, Chile y Portugal.

Precisamente en este último, en septiembre de 2024, la UME llevó a cabo el mayor despliegue internacional de su historia: 364 militares y 116 vehículos se trasladaron a la región central del país para combatir los devastadores incendios que asolaban la zona.

Esta operación supuso un antes y un después para la unidad, al incluir por primera vez el establecimiento de un puesto de mando táctico en el extranjero para coordinar la asistencia sobre el terreno.

Mirando al futuro

El compromiso por mejorar la capacidad de respuesta de las Fuerzas Armadas ante situaciones complejas, mediante el uso de alta tecnología, constituye una de las bases fundamentales para la creación de la Unidad de Drones de la Unidad Militar de Emergencias (UDRUME), actualmente en proceso de consolidación.

Esta unidad será un referente dentro de la UME en el empleo de sistemas no tripulados —aéreos, terrestres y acuáticos—, lo que permitirá una evaluación más precisa de catástrofes y emergencias, y facilitará intervenciones más rápidas y eficaces.

La nueva unidad de drones –UDRUME– que con base en León.

La nueva unidad de drones –UDRUME– que con base en León. UME

Asimismo, se encuentra en desarrollo la Oficina de Programa del Proyecto Atlantis, concebida como un Sistema de Apoyo al Mando dotado de herramientas que optimicen la gestión del riesgo y respalden el proceso de toma de decisiones, ofreciendo soluciones estratégicas ante situaciones de emergencia.

Con ‘Atlantis’, la UME busca situarse a la vanguardia tecnológica en la mejora de sus capacidades operativas al servicio de la ciudadanía, gracias a la integración de la supercomputación y las tecnologías más avanzadas en la gestión de emergencias, con el objetivo de optimizar la planificación, la respuesta y la formación de su personal.

El programa incluye el desarrollo de un gemelo digital que permitirá recrear escenarios hiperrealistas —desde accidentes nucleares hasta situaciones de conducción extrema— para entrenar a los efectivos con un grado de precisión sin precedentes.

Además, promoverá la creación de sinergias y el impulso de estudios que contribuyan a establecer criterios técnicos más sólidos para la toma de decisiones en situaciones críticas.