Las lluvias torrenciales azotan el suroeste de China: al menos 15 muertos en Chongqing

Las lluvias torrenciales que están azotando la ciudad china de Chongqing han dejado ya 15 muertos y cuatro desaparecidos, informa este miércoles la agencia estatal de noticias Xinhua. El presidente del país, Xi Jinping, ha pedido mayores esfuerzos para proteger al público del clima extremo.

Las autoridades locales ofrecieron una cifra obtenida con los datos recogidos desde este lunes a la mañana de este miércoles. Las lluvias torrenciales afectaron a la municipalidad montañosa de Chongqing, con una superficie similar a la de países como Emiratos Árabes Unidos o la República Checa. Los distritos afectados fueron Fengjie, Yueyang y Xiushan. 

En total, 11 ríos en la ciudad vieron su caudal aumentar hasta sobrepasar los límites de seguridad establecidos.

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Los últimos datos que dejan las lluvias dentro de Chongqing y la provincia vecina de Sichuan reflejan que más de 460.000 personas se han visto afectadas por las inundaciones, entre las cuales 85.000 residentes fueron evacuados a lugares seguros como medida de precaución.

Por ello, los organismos competentes emitieron este martes una alerta naranja por desastres geológicos desencadenados por la lluvia en la zona, además de lanzar el nivel de respuesta de emergencia más baja.

China cuenta con un sistema de advertencia climatológica de cuatro niveles codificado por colores para desastres geológicos, siendo el rojo el nivel más grave, seguido por el naranja, amarillo y azul.

Las lluvias suelen ser frecuentes en China durante los meses de junio a septiembre. Las inundaciones, que comenzaron a inicios de verano, han dejado decenas de fallecidos y más de un millón de damnificados en provincias como las de Henan, Sichuan, Jiangxi y Mongolia Interior.

En 2021, las fuertes precipitaciones causaron grandes daños en China: 300 muertos y desaparecidos. Ese mismo año, la ciudad de Henan, debido a los fuertes chubascos, sufrió el desbordamiento del río Amarillo que afectó a 13 millones de personas. El año pasado, los desastres naturales causaron un daño por valor de 10.000 millones de dólares.