El rey de Marruecos, Mohammed VI, recibe la vacuna de la Covid-19 en el Palacio Real de Fez.

El rey de Marruecos, Mohammed VI, recibe la vacuna de la Covid-19 en el Palacio Real de Fez. Gtres

África

Mohamed VI volverá a Marruecos pese a estar enfermo para calmar las protestas por los precios

La subida de los precios de los alimentos y del combustible provoca la ira de los marroquíes, mientras el rey sigue en Francia por su enfermedad.

28 julio, 2022 03:06

La vuelta del rey Mohamed VI a Marruecos es necesaria para calmar el malestar social por la subida de los precios. El monarca continúa en Francia, según las fuentes consultadas por EL ESPAÑOL, mientras en el país crecen las críticas al primer ministro, Aziz Akhannouch, por la inflación y la escasez de agua que amenaza a zonas agrícolas.

Akhannouch es amigo íntimo de Mohamed VI y el segundo hombre más rico del país magrebí después del rey. La revista Forbes le calculó un patrimonio estimado en 2.000 millones de dólares. Además, de ejercer la política, es un gran empresario, propietario del gigantesco grupo petrolero Akwa, un conglomerado multimillonario.

El soberano lo escogió para dirigir el país dos días después de que su partido, la Agrupación Nacional de Independientes (RNI), ganase las elecciones de 2021. En las anteriores legislaturas, fue ministro de Agricultura y Pesca.

Mohamed VI buscaba reducir la influencia de los partidos nacionalistas e islamistas, y tener el beneplácito para llevar a cabo un proyecto de modernización del país. Sin embargo, ya se ve como un partido de naturaleza electoral para contrarrestar los obstáculos al Estado.

Los hashtags pidiendo la dimisión de Akhannouch y su gabinete se han hecho virales en las redes sociales durante las últimas semanas. Originalmente se compartió en francés, #degageakhannouch (#dimiteakhannouch), con más de 10.000 tuits y miles de retuits. Fuera de las redes, en su ciudad natal, Agadir, el 16 de julio los ciudadanos lo abuchearon en la ceremonia de clausura de un festival.

Los internautas protestan ante las subidas de los alimentos y de los productos, en particular del combustible. Incluso, se han publicado imágenes que representan al jefe del Gobierno con la imagen de vampiro.

En Marruecos la inflación sigue aumentando a un ritmo muy superior al 2% por tercer trimestre consecutivo, más del 6’3% en el segundo trimestre del año, según datos del Alto Comisionado para la Planificación (HCP). Mientras, la oposición critica la gestión de la subida de precios.

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Las protestas se intensificaron a partir del Eid al Adha, fiesta religiosa que se celebró el 10 de julio en la que cada familia compra un cordero para su sacrificio. Sin embargo, el valor de la res oscilaba entre los 80 y los 600 euros, sobrepasando el precio mínimo interprofesional que no alcanza los 300 euros.

En un primer momento, el RNI mantuvo que la campaña contra su secretario general y primer ministro estaba “orquestada para desprestigiar al partido y desestabilizar al gobierno”, y llamó a los militantes a reforzar la comunicación con los ciudadanos para responder a los ataques.

Lucha política

En todo caso, lo que parecía una protesta ciudadana se ha convertido también en una lucha política. Los clamores de dimisión están secundados por los islamistas del Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD), que perdieron las elecciones tras dos legislaturas en el poder; y de las formaciones de izquierdas.

El grupo de la Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP) en el Parlamento anunció el 25 de julio la citación del ministro de Comunicación, Mohamed Mehdi Bensaid, y del director de la Agencia Marroquí de Prensa (MAP), Khalil Hachimi Idrissi, después de que defendiera en un artículo al jefe del Gobierno ante la campaña en redes, señalando una conspiración por parte de la oposición.

Por eso, ese mismo día Akhannouch se reunió con los parlamentarios de su partido, para cerrar filas contra estos ataques. El gobierno marroquí argumentó que el aumento de los precios de los productos se debe al contexto mundial y no a las políticas internas de Marruecos. Además, confirmó que no se puede subvencionar el combustible con el presupuesto actual.

Esperan a Mohamed VI

El único que puede calmar las protestas ciudadanas y tomar medidas excepcionales es el rey Mohamed VI. Se encuentra en Francia, donde se restableció de la Covid-19 en el mes de junio, y para evitar las altas temperaturas que afectan negativamente a su salud, debido a la enfermedad crónica respiratoria que padece, heredada de su padre Hassan II.

La Covid le estropeó los planes de instalarse en el norte del país, en la residencia real de Rincón, durante el mes de julio. Allí estaba todo previsto antes de que diera positivo. Su propio médico, el profesor Lahcen Belyamani, lo anunció en un comunicado el 16 de junio.

Se restableció y pudo regresar para celebrar la fiesta del cordero. No obstante, regresó a Francia y no se espera que viaje a Marruecos para la fiesta del Trono, que se celebra el 31 de julio. Aunque pronunciará el habitual discurso, se ha aplazado la multitudinaria ceremonia de recepción en el Palacio Real de Tánger. Es el tercer año que no se festeja la subida al trono del monarca, con habituales desfiles militares y congregación de un gran número de ciudadanos en las calles.

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“Vista la continuación de las medidas preventivas impuestas por la evolución de la situación sanitaria debida a la pandemia de Covid-19, se ha decidido aplazar todas las actividades, festividades y ceremonias previstas con motivo del 23º Aniversario de la accesión de Su Majestad el Rey Mohamed VI”, anunció la semana pasada un comunicado del Ministerio de la Casa Real, Protocolo y Cancillería.

De hecho, el Gobierno decidió el miércoles prorrogar el estado de emergencia sanitaria en todo el país hasta el 30 de septiembre por la Covid-19.

Sin embargo, en Alhucemas preparan todo para que se instale en la playa en la que el rey veranea, muy cerca la Isla de Tierra, uno de los islotes españoles en el norte de África. “Alhucemas está en alerta, están limpiando y preparando todo. Eso quiere decir que hay una orden. En un par de días llegará personal del Ministerio de la Casa Real para supervisar todo”, aseguran a EL ESPAÑOL autoridades locales desde esa región en el norte del país.

De hecho, a finales del mes de agosto, se celebra una boda en Nador, a la que está invitado el rey por su estrecha relación con el boxeador Abu Azaitar, una de las personas más cercanas al monarca, que también le acompaña en su estancia en Europa.