María de Lluc, nutricionista.
El sencillo truco de la dietista María de Lluc para que el pan engorde menos: "Son menos calorías"
Ser conscientes de cómo cortamos o elegimos nuestro pan puede marcar la diferencia en la cantidad de calorías que consumimos.
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El consumo de pan en España ha experimentado un descenso en los últimos años. A pesar de su importancia en la dieta mediterránea, especialmente como acompañamiento, la realidad es que cada vez más españoles deciden apartar o limitar este carbohidrato en sus comidas.
Los motivos son varios. No solo su sabor y calidad están en declive, sino que cada vez más expertos desaconsejan su consumo, algo que sigue siendo una incógnita, puesto que el pan es uno de los ingredientes más populares en las dietas saludables.
¿El motivo? El pan por sí mismo, en realidad, no engorda. Resulta fundamental prestar atención al tipo y, sobre todo, a las porciones. Por ello, expertos como la nutricionista María de Lluc, recomiendan cortarlo en rebanadas finas.
La importancia del grosor del pan
El pan es una fuente de hidratos de carbono, los cuales son necesarios para un correcto funcionamiento del organismo, al aportar energía y contribuir a la regulación del metabolismo.
Sin embargo, estos carbohidratos son uno de los macronutrientes que más evitan las personas que buscan perder peso, ya que suelen contar con muchas calorías que, si se consumen más de las que se queman, habrá un exceso que se acumulará en el cuerpo en forma de grasa.
Además de seleccionar cuidadosamente el tipo de pan, esta acumulación es tan sencilla de evitar como consumir moderadamente el alimento y prestar atención a pequeños detalles como el grosor de las rebanadas.
Aunque a simple vista pueda parecer un detalle irrelevante, el grosor de las rebanadas de pan que consumimos puede tener un impacto significativo en la cantidad total de calorías que ingerimos, explica la nutricionista María de Lluc en sus redes sociales.
Una rebanada de pan más gruesa concentra más miga, más peso y, por tanto, más calorías. Cuando cortamos el alimento sin pensar demasiado, es común que al ver una rebanada gruesa como "una sola unidad", no reparemos en que estamos consumiendo el doble o el triple de lo que ingeriríamos si optáramos por rebanadas más finas.
Aquí es donde entra en juego la conciencia sobre el corte. Si elegimos rebanadas más finas, no solo estamos reduciendo la cantidad de pan por porción, sino que también estamos dándole a nuestro cerebro la sensación de estar comiendo más.
@mariadellucmr Guarda bien este truco si eres aquella persona que le encanta comer mucho y necesita truquitos / estrategias para seguir comiendo y no engordar 😜 eres team rebanada fina o más gruesa??? #truco #pan #lidl ♬ sonido original - mariadellucmr
En lugar de una o dos rebanadas gruesas, podemos tomar tres finas y sentir que estamos comiendo más cantidad, aunque en realidad estamos reduciendo el total de calorías, explica la experta.
Además, la nutricionista explica que este es un truco que podemos aplicar directamente en los supermercados, en la máquina que corta directamente el pan.
En cualquiera de los casos, resulta fundamental el tipo que elegimos. Los panes de una mayor calidad son aquellos que se encuentran elaborados a base de harinas de grano entero o integrales, las cuales conservan las vitaminas, la fibra y los minerales del cereal
Asimismo, también engordan más los panes ultraprocesados, como son los biscotes, palitos, picos o los panes pensados para hamburguesas, que poseen más azúcares, aditivos y grasas.
