Montaje.

Montaje.

Salud y Bienestar

Maca Wellness, nutricionista: "Remojar las lentejas antes de cocinarlas mejora la digestión y reduce el malestar intestinal"

Las lentejas, como otras legumbres, contienen ciertos compuestos de difícil digestión que pueden provocar hinchazón, gases y molestias estomacales.

Más información: Julia Farré, nutricionista: "La gente cree que el líquido de los garbanzos es malo, pero da textura a muchos platos"

Publicada

El consumo de legumbres está en auge. Aunque llevan siglos siendo un pilar de nuestra dieta, formando parte de platos emblemáticos como la fabada asturiana, el cocido madrileño o las lentejas con chorizo, en los últimos años han cobrado especial relevancia. Un fenómeno que está estrechamente relacionado con su increíble perfil nutricional y la cantidad de beneficios que pueden ofrecer en tan solo una ración. 

Las lentejas, concretamente, son una de esas legumbres que han estado presentes en la dieta de los seres humanos desde hace miles de años atrás. En la actualidad, estos pequeños alimentos ofrecen no solo un sabor increíble a multitud de platos, sino por ser un perfil ideal para incluir en una dieta sana y especialmente recomendado para combatir la obesidad y el sobrepeso en los metabolismos lentos. 

Sin embargo, aunque su consumo es altamente beneficioso, su preparación no lo es tanto, y en el proceso pueden surgir dudas como... ¿Las lentejas se ponen en remojo o no es necesario? Los expertos, como Maca Wellness, no solo aseguran que esta práctica es segura, sino que duplica los beneficios de las lentejas.

Los beneficios de remojar las lentejas

La preparación de las legumbres es un proceso muy sencillo; sin embargo, existen algunas técnicas que nos pueden ayudar a que queden perfectas y, además, aporten el doble de los beneficios. La principal es dejarlas a remojo, ya que esto puede mejorar su digestión, aumentar la absorción de nutrientes y optimizar su textura.

Especialmente en España, con el ritmo frenético de vida que llevamos y, además, el desconocimiento, es muy habitual cocinar las legumbres directamente del bote. Sin saberlo, no solo estamos perdiendo parte de la calidad de este alimento, sino que estamos beneficiando a efectos adversos como malestar intestinal o gases.

Según la nutricionista Maca Bustamante (@Macawellness), existen tres razones fundamentales por las que siempre deberíamos remojas las lentejas. "La primera de ellas, y quizás la más importante, es que mejora la digestión y reduce el malestar intestinal", explica.

Las lentejas, como muchas otras legumbres, contienen ciertos compuestos de difícil digestión, como los oligosacáridos, que pueden provocar hinchazón, gases y molestias estomacales. Durante el remojo, estos compuestos se disuelven en el agua, reduciendo así su concentración en el propio alimento.

Al descartar el agua del remojo y cocinar las lentejas en agua limpia, se elimina una buena parte de estos azúcares fermentables, lo que facilita su digestión y permite que el organismo las asimile con mayor facilidad. Para las personas con sensibilidad digestiva o con tendencia a la inflamación abdominal, esta práctica puede marcar una gran diferencia.

Otro aspecto fundamental del remojo es la reducción de los antinutrientes presentes en las lentejas. Los antinutrientes son sustancias naturales que interfieren en la absorción de ciertos minerales esenciales, como el hierro, el zinc y el calcio. Entre los más conocidos en las legumbres se encuentran el ácido fítico y los taninos.

@macawellness déjalas remojando mínimo 6 horas y luego cambia el agua para cocinarlas! 🙌🏼 #lentejas #tipsdecocina ♬ In the Mood - Glenn Miller

Estos compuestos pueden unirse a los minerales y dificultar su absorción en el intestino, lo que puede disminuir el valor nutricional del alimento. El remojo ayuda a reducir significativamente la presencia de estas sustancias, lo que mejora la biodisponibilidad de los minerales y permite que el cuerpo los absorba de manera más eficiente.

Este proceso es especialmente beneficioso para personas con deficiencias minerales o para quienes dependen de una alimentación basada en plantas, donde cada nutriente cuenta para mantener una dieta equilibrada.

Además de sus beneficios digestivos y nutricionales, la experta explica que remojar las lentejas antes de cocinarlas también "mejora la textura y acelera el proceso de cocción". Al absorber agua durante el remojo, las lentejas se ablandan, lo que reduce el tiempo necesario para cocinarlas.

Esto no solo ahorra energía y tiempo en la cocina, sino que también permite obtener una textura más uniforme y agradable en los platos. Las lentejas cocidas sin remojo pueden quedar más duras o desiguales en su cocción, mientras que aquellas que han pasado por un período de remojo suelen cocinarse de manera más homogénea, logrando una consistencia tierna sin deshacerse en exceso.

Según indica la nutricionista, es recomendable dejar las lentejas en remojo durante un mínimo de seis horas. Lo ideal es colocarlas en un recipiente con abundante agua, ya que aumentan de tamaño a medida que absorben líquido. Una vez finalizado el remojo, es importante desechar el agua y enjuagarlas bien antes de cocinarlas en agua limpia.