Oro azul: la fruta española baja en calorías que potencia la memoria y produce colágeno en el rostro

Si algo tienen claro las españolas es que el paso del tiempo es inevitable y con él, nuestro cuerpo va experimentando una serie de cambios tanto en el interior como en el exterior. Y es que, a medida que envejecemos, nuestra piel pierda elasticidad, aparecen arrugas y algunas de las funciones del organismo se ralentizan. 

Sin embargo, a pesar de que el envejecimiento es un proceso natural que todos debemos de pasar, existen algunos trucos para hacer que este nos afecte lo menos posible. Una alimentación adecuada y la adopción de buenos hábitos pueden jugar un papel crucial en su prevención y la mitigación de los signos de la edad. 

Lejos de lo que muchos podrían pensar, la clave de la juventud eterna no reside únicamente en los caros tratamientos de belleza, sino que nuestra dieta puede ser nuestro mejor aliado. De esta manera, consumir alimentos ricos en antioxidantes, vitaminas y minerales, como el tomate azul, ayuda a combatir los radicales libres, responsables del envejecimiento celular. 

El tomate azul, una fruta infravalorada

Los tomates azules, también llamados tomates morados, son frutas que han sido criados para producir altos niveles de antocianinas, una clase de pigmentos responsables de los colores azul y morado de muchas frutas, incluidos los arándanos, las moras y las aronias.

Se cultivan principalmente en España, aprovechando su clima mediterráneo que favorece el crecimiento de esta y otras muchas variedades de tomate. En este contexto, regiones como Murcia y Almería se han coronado como las principales productoras de este superalimento. 

Oro amarillo: el antioxidante natural repleto de colágeno que mejora la flora intestinal y retrasa el envejecimiento

Se trata de una fruta que ha sido desarrollada mediante técnicas de mejoramiento genético con el objetivo de obtener un fruto con altos niveles de antocianinas, los pigmentos responsables de este característico color azul que tanto nos llama la atención y que tienen grandes beneficios.

Las antocianinas son potentes antioxidantes que nos protegen de muchas enfermedades y del envejecimiento prematuro. A este grupo de pigmentos se les atribuyen propiedades antiinflamatorias, anticancerígenas y antioxidantes.

Los beneficios del tomate azul

Este tomate de color poco habitual no solo destaca por su diferente tonalidad, sino que también cuenta con impresionantes propiedades nutricionales. En primer lugar, encontramos los antioxidantes, y es que, como bien veníamos diciendo, el tomate azul es extremadamente rico en antocianinas. 

Esta sustancia, que no se encuentra en los tomates convencionales, ayuda a proteger las células del daño oxidativo y pueden reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Además, al igual que el resto de frutas de este estilo, son una excelente fuente de vitamina C, esencial para la producción de colágeno, encargada de mantener la piel firme y elástica. 

Por otro lado, aunque los tomates tradicionales son conocidos por su contenido en licopeno, el tomate azul también contiene este antioxidante, aunque en menor cantidad. Se trata de un compuesto que destaca por sus propiedades antiinflamatorias y su capacidad para proteger la piel contra el daño solar. 

En último lugar, aunque no por ello menos importante, contiene vitamina A, un nutriente esencial para la salud ocular y la regeneración celular. Gracias a su alto contenido en antocianinas y vitaminas, esta fruta ayuda a reducir las arrugas y mejora la elasticidad de la piel. 

Como bien comentábamos, contiene vitamina C, vital para la producción de colágeno. En este sentido, mejora la textura de la piel y, un consumo regular, puede resultar en un rostro más terso y con una mejor textura. Además de ayudar a la absorción del hierro o reparar y mantener el cartílago, los huesos y los dientes.

Aunque contiene menos licopeno que los tomates rojos, no deja de ser una fuente de este antioxidante, lo que se traduce en una capa adicional contra los daños provocados por la exposición al sol. 

Los tomates azules aportan una buena cantidad de fibra dietética, tal y como informan desde Frutas Eloy. La fibra es fundamental para mantener un sistema digestivo saludable, ayudando a regular el tránsito intestinal y prevenir problemas como el estreñimiento. Además, puede contribuir a la regulación de los niveles de azúcar y a la gestión del peso.

Desde la misma web citada también nos ayudan a encontrar el mejor tomate azul, con el fin de disfrutar su máximo sabor y beneficios. "Un tomate azul maduro tendrá un color profundo y uniforme, y se sentirá firme al tacto con un ligero ceder. Si el tomate aún muestra signos de color verde, es mejor dejarlo madurar unos días más", indican.