La viuda pasa el duelo junto a sus muñecas.

La viuda pasa el duelo junto a sus muñecas. Antena 3

Relaciones

Mari Carmen supera la pérdida de su marido con los bebés reborn: "Me llaman loca, pero soy feliz con mis 4 niñas"

La mujer encuentra consuelo tras la triste pérdida cuidando de estas muñecas, a las que considera sus hijas y que le han devuelto la ilusión por vivir.

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Mari Carmen pensó que nunca volvería a sonreír tras la muerte de su marido.Durante meses, el vacío y la tristeza llenaron su casa.

Sin embargo, hoy asegura haber encontrado una forma de recuperar la ilusión gracias a una afición que muchos no entienden: los bebés reborn, muñecos hiperrealistas que ella cuida como si fueran de verdad.

Todo comenzó con Lola, su primera muñeca, que llegó cuando su esposo aún vivía. "Cuando falleció me di cuenta de que necesitaba otra, ahora voy a por el chico", cuenta con una sonrisa.

Desde entonces, su familia ha crecido hasta llegar a "cuatro niñas" que, según explica en Y ahora Sonsoles, le han devuelto las ganas de vivir. "Me hacen mucha compañía, es lo mejor que he hecho en la vida".

Su día a día gira en torno a ellas. Las viste, las peina, les habla y hasta las acuesta a su lado. "Cuando llego a casa, lo primero que hago es saludarlas", explica orgullosa en el plató.

Además, Mari Carmen les confecciona su propia ropa. "Tienen más ropa que yo", bromea. Y es que para ella, coser para sus niñas es una doble terapia: calma su mente y la mantiene ocupada.

No todos comprenden su elección. "La gente me toma por loca, los primeros mis hijos, pero a mí me da igual", confiesa.

Y es que en la calle, las reacciones son variadas. Muchos se detienen a admirar lo realistas que son las muñecas, e incluso le piden fotografías, mientras otros la miran de reojo "como si estuviera loca".

Pero Mari Carmen asegura que las críticas no la afectan y que todo sea esa crítica, porque "bendita locura la mía, que soy muy feliz con mis cuatro niñas".

Aunque sus hijos bromean con ella y a veces le piden que deje las muñecas en casa cuando salen juntos, también la apoyan. De hecho, fueron ellos quienes le regalaron algunas de las nuevas bebés.

De esta manera, tras su triste pérdida Mari Carmen no se siente sola. Ha encontrado una nueva manera de llenar su vida de amor y compañía. "Vivo libre como los pájaros, totalmente", afirma.

Y aunque su casa ya esté llena, tiene claro que su familia aún no está completa. Con ilusión, confiesa su próximo plan: "Ahora me toca el niño. Se llamará Tiago".