Paula Monreal, conocida en redes sociales como 'Paufeel', se prepara en su cocina.

Paula Monreal, conocida en redes sociales como 'Paufeel', se prepara en su cocina. Esteban Palazuelos

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Paula Monreal, la influencer detrás de 'Paufeel': "La Reina me preguntó si era más sana la croqueta o el torrezno"

Con más de dos millones de seguidores, es la creadora de contenido 'gastro' por excelencia. Sus recetas rápidas, fáciles y sanas llegan, incluso, hasta Zarzuela. 

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Paula Monreal, más conocida en redes sociales como @Paufeel, es igual de elegante en persona que lo que muestra a través de sus vídeos. Su figura cargada de presencia, pero a la vez con una sencillez sorprendente, se hace notar en cada rincón de su casa, pero, sobre todo, en la cocina. Es sin duda donde más tiempo pasa, pero es algo que no le importa en absoluto.

"Desde muy pequeña" ha mamado el gusto por "el buen comer". Uno de sus primeros recuerdos es ver a su abuela bolear las croquetas. Ella es su motor y su fuente de inspiración, aunque asegura que su madre también es una excelente cocinera. Aun así, Paula confiesa que sus primeros momentos entre los fogones empezaron "por necesidad"

Se crio en Villares del Saz, un pueblecito de Cuenca, pero con tan sólo nueve años, sus padres la mandaron, a ella y a sus hermanos, a estudiar a Madrid, ciudad donde nació. Su madre cargaba las maletas con "mogollón de tuppers" con la esperanza de que duraran toda la semana, pero, según recuerda, los miércoles ya estaba "todo barrido". Fue entonces cuando esa pequeña Paula se vio 'obligada' a empezar a hacerse sus propias comidas.  

Paula Monreal con su nuevo libro, 'Mis mejores recetas en freidora de aire'.

Paula Monreal con su nuevo libro, 'Mis mejores recetas en freidora de aire'. Esteban Palazuelos

Eso, sumado a su gran pasión por la cocina y a un diagnóstico de sensibilidad al gluten, hicieron que algo en ella "se despertara". Siempre tuvo "la espinita" de dedicarse al mundo de la comunicación, y con un máster en marketing y unas nociones básicas de redes sociales que tuvo que aprender para impulsar el que fue su primer negocio propio —uno de venta digital de ropa—, hicieron de Paula lo que es ahora: la influencer gastronómica española de referencia.

En cuatro años ha conseguido más de dos millones de seguidores en Instagram, casi 200.000 en YouTube y más de 500.000 en TikTok, donde sus vídeos acumulan hasta 13 millones de visualizaciones. Además, a sus 44 años, ha conseguido hacerse un hueco tanto en radio como en televisión y ya tiene publicados dos libros bajo su firma. Tal es su éxito, que hasta la reina Letizia la reconoce. ¿Su secreto? Las recetas fáciles, "con no más de cuatro ingredientes que puedes encontrar en tu despensa", sin gluten y, por supuesto, sanas. 

Un día con Paula

Se define como amante de sus perras, del deporte, de la naturaleza, sencilla y, sobre todo, "muy casera". "Soy de ponerme la zapatilla y el pantalón más cómodo que tenga", confiesa. Hoy va con vaqueros anchos y una elegante blusa blanca, aunque hace apenas unas horas estaba en 'modo chándal'. Porque en la vida de Paula, no todo es cocina

Se suele levantar temprano, y lo primero que hace es deporte. Suele salir a correr, algo de lo que también hace gala en sus redes sociales porque, para ella, es algo "súper importante". "El deporte va muy ligado a la alimentación, y también intento mostrar la relevancia que tiene mantenerse activo". 

Y Paula lo cumple en todos los sentidos. Sus piernas no van más rápido que su cabeza que, en mitad de la carrera, ya está pensando en próximas recetas y contenido para grabar. Intenta sacar inspiración de todos lados, tanto del paisaje que la rodea como de un restaurante o un post de Instagram. 

Paula corta romero de una de las macetas de su jardín.

Paula corta romero de una de las macetas de su jardín. Esteban Palazuelos

Cuando llega a casa, y casi sin haberse quitado las playeras, ya está montando su set de grabación. Un set que es, cuanto menos, curioso. "La gente me ve delante de la pantalla maquillada, muy bien organizada, pero lo que hay detrás de la cámara es todo lo contrario. Cojo mi trípode y me salgo a colocarlo al tendedero, porque desde esa ventana es donde entra la mejor luz. Vuelvo a entrar a la cocina, me enfoco con el mando, y voy saliendo y entrando cuando quiero cambiar de plano. Hago casi más kilómetros que corriendo", bromea. 

Paula graba a diario, igual que edita, y lo hace sin ayuda. Cuenta con un remanente de vídeos "de hasta 20 días" pero, aun así, toda remesa es poca. Necesita ese margen, ya no sólo por sus viajes de trabajo, o por sus compromisos en televisión y radio, sino porque el trabajo de creadora de contenido 'gastro' es a base de "mucha prueba y error". 

"Intento sacar ideas de platos también más desconocidos, de diferentes partes del mundo, y obviamente no todo sale bien a la primera. A veces toca repetir todo el proceso, pero es parte de esto", asegura la influencer. Por suerte, cuenta con ayuda para limpiar, "aunque no a diario". Así que mucho de su tiempo va dedicado, en efecto, a la limpieza. 

Paula Monreal en el salón de su casa.

Paula Monreal en el salón de su casa. Esteban Palazuelos

En todo el proceso invierte, calcula, "unas ocho horas". "Como una jornada laboral de cualquier trabajador. Y eso, mínimo", matiza. Aunque la gente se piense que el de influencer no es un trabajo, Paula rompe una lanza a favor de su profesión. "Hay días que estoy aún gestionando campañas o contestando correos y mensajes hasta las 11 de la noche. Intento evitarlo, pero muchas veces no sé cortar a tiempo". 

En un trabajo como el suyo, la fina línea que separa el ocio del trabajo no queda del todo clara. "Consumo redes sociales, aunque cada día menos porque, claro, yo me inspiro también en posts de otras personas, pero si pasas demasiado tiempo ahí metida acabas mezclando lo uno con lo otro".   

Por eso, por las tardes dedica su tiempo a otra cosa "más del mundo real". "Voy a dar un paseo, al supermercado, le dedico tiempo a mi familia…". Una familia a la que ya muchos conocen. Aunque se muestra celosa de su intimidad, queriendo mantener su vida privada al margen de su trabajo, Paula no duda en hacer de manera ocasional vídeos con su marido. "Tampoco quiero esconderme. Me gusta mostrarme natural, y tanto mi marido, como el resto de mi familia o mis perritas forman parte de mi vida. Creo que, en eso, soy muy generosa", sostiene. 

Una familia "muy matriarcado"

"En casa, yo me lo guiso, yo me lo como". Paula viene de una familia a la que describe como "muy de matriarcado".  "Yo tengo la imagen de, primero mi abuela, y luego mi madre, en la cocina. Al final, yo he seguido también esa estela, no solo a nivel profesional, sino a nivel familiar". 

Cuenta que, si dependiera de su marido, comerían "todos los días bocadillo de chorizo". Por eso, Paula ha decidido también asumir a nivel personal la tarea de cocinar para la familia. "De vez en cuando uso a mi marido como conejillo de indias", cuenta entre risas, "pero también cocino para él como una muestra de amor, si me pide algo en concreto, también se lo hago". 

Paula durante la entrevista, en la cocina de su casa.

Paula durante la entrevista, en la cocina de su casa. Esteban Palazuelos

Como Paula tiene sensibilidad a gluten, cocina por separado. "Lo suyo y lo mío". Y, preguntada por la polémica acerca de las influencers culinarias que abogan por un papel de la mujer 'tradicional' —conocidas mayormente como tradwifes—, su respuesta es tajante. "Cada una que haga lo que quiera, pero si a mi marido le apetecen macarrones y no sabe hacérselos, no creo que haya nada de malo en que yo se los haga", afirma. 

La clave, para ella, es "el equilibro". "Mi marido me pide que le cocine, y yo a lo mejor le pido que me acompañe a algún sitio o hace otras tareas de casa. Se trata de encontrar ese 50/50. Ahora mismo soy consciente de que está el mundo un poco loco, pero creo que no hay que buscar más allá de eso". 

Su anécdota con la Reina

Polémicas aparte, Paula prefiere desmarcarse y crear un contenido "blanco, neutro", que pueda consumir todo el mundo. Quizás ese sea precisamente el truco por el que, ahora mismo, sea la influencer gastronómica por excelencia. Su cara está ya en todas partes, tanto en librerías, como en la carátula de distintos programas de radio y televisión. 

Este salto a la fama ha hecho de la madrileña una persona muy conocida, con todo lo que eso conlleva. Sus vídeos, reproducidos hasta por 13 millones de personas, parece ser que han llegado, incluso, a Zarzuela. Paula cuenta, a modo de anécdota, una pequeña conversación que mantuvo con, nada más y nada menos, que la reina Letizia. 

"Fue muy gracioso, ocurrió cuando estábamos en los premios Planeta. Ella se sentó en nuestra mesa y, cuando nos presentaron, se me acercó y me preguntó qué era más sano, si la croqueta o el torrezno", revela. "Le contesté que los torreznos, sin duda, y me dijo que ella pensaba lo mismo. De hecho, doña Letizia debe de ser muy fan de los torreznos", cuenta. 

Unos premios y un programa

Por lo pronto, se encuentra agradecida y "con mucho trabajo". A pesar de todo, ya tiene nuevos proyectos en mente. Aún no hay nada fijado, pero espera que "todo salga bien" para que, de cara a este 2025, tengamos nuevas noticias de Paula Monreal. 

Junto a la empresa Madison, ha creado una agencia de marketing gastronómico, bajo el nombre de Madyummy, con el objetivo de "poner el alza" el mundo de la cocina en redes sociales. "Creo que está muy idealizado el contenido en redes sociales de lifestyle, moda y demás, pero siento que al 'gastro' no se le da tanta importancia", afirma.

Paula Monreal.

Paula Monreal. Esteban Palazuelos

"Es un sector muy potente, donde hay mucho margen de crecimiento y un potencial muy alto, pero es verdad que los influencers gastronómicos estamos todavía un poco perdidos. Estamos viendo para sacar cositas, para poner en alza el sector, unos premios… y también dar un servicio 360 a todas las empresas que realmente quieren apostar por contenido de este estilo", revela. 

Por último, confirma la existencia de otro proyecto "a muy corto plazo": la producción de su propio programa de televisión. "En su día me ofrecieron participar en un reality de cocina, pero combinaba también el exponerte demasiado… y no me interesaba. Me gusta tener el control, y estamos tratando la idea de grabar un programa haciendo mis recetas, porque al final es algo que funciona muy bien", finaliza.