Madrid, nueva capital de los restaurantes de lujo: del recién inaugurado Manero al clásico e infalible Horcher

Hubo un tiempo en el que Madrid era lo más. Aquella época del Bar Chicote en la que podías ver por la Gran Vía, o los aledaños, a Ava Gardner, Cary Grant, Elizabeth Taylor, Frank Sinatra e incluso Audrey Hepburn. Eran los años 50 y la capital española era set de rodaje de grandes producciones de Hollywood que hicieron que la ciudad se convirtiera en un plató lleno de estrellas, una ciudad repleta de glamour.

Hemos tenido que esperar unos cuantos años para que Madrid vuelva a ser esa ciudad en la que el star system con miembro como Richard Gere o Luis Miguel, como lo hicieron en su día Gardner o Sinatra, puedan ser nuestros vecinos de mesa en el restaurante de moda. Porque sí, Madrid se ha convertido en la nueva capital del lujo y un hervidero de nuevos restaurantes. Las copas ya no se toman en la Gran Vía, ahora es el Barrio de Salamanca el epicentro de esos brindis. O Salesas.

"Madrid está viviendo una transformación. En los últimos años, la ciudad ha sabido combinar su riqueza cultural, su gastronomía de alto nivel y su capacidad de atraer marcas internacionales. Madrid se ha convertido en un destino global donde el lujo no solo significa ostentación, sino también experiencia, sofisticación y excelencia", declara a Magas la empresaria china María Li Bao, con varios restaurantes en la capital.

Bao Li, el nuevo restaurante chino de lujo en Madrid: bienvenidos a la casa de María y Felipe

María Li Bao, la reina de los chinos elegantes de Madrid, en la Puerta del Sol. Sara Fernández

"La ciudad ahora ofrece una propuesta que está a la altura de las principales capitales mundiales como París o Nueva York. Restaurantes como Bao Li [su última apertura] buscan no solo ofrecer comida, sino trasladar a los comensales a un universo de sensaciones en el que cada detalle está cuidado al máximo. Es esta combinación entre lo local y lo global lo que convierte a Madrid en un punto de referencia para el lujo moderno". 

Carlos Bosch, fundador de Manero, defiende lo mismo: "Madrid reclama, por fin, la posición que merece como una gran capital y debemos sacar pecho por ello. Madrid tiene el nivel, claro que sí… igual que la gastronomía española está al nivel de las mejores del mundo y nuestro concepto está al nivel de los más cool. Antes teníamos que ir a Londres, a París o a Nueva York para ver lo que se cocía. Lo que ha hecho, por ejemplo, Cipriani con la cultura italiana exportándola al mundo de esa manera tan lifestyle y tan trendy debemos hacerlo nosotros con España, con Madrid. ¡Podemos y debemos! Es lo que yo trato de hacer con Manero".

En definitiva, los restaurantes, los bares de copas y los hoteles más exclusivos se concentran, cada vez, más en la capital demostrando que Madrid está de moda en todos los sentidos, ya lo dicen hasta los expertos. Rosewood Villa Magna, Bless Hotel, The Madrid Edition, Four Seasons, Mandarin Orienta Ritz… Pero, ¿dónde se cena de lujo en Madrid? ¿Cuáles son los restaurantes de moda más exclusivos? Toma nota y reserva.

The Library (Calle de Serrano, 2)

No es propiamente un restaurante, pero es el lugar en el que ver y ser visto, a dos pasos de la Puerta de Alcalá. Los alrededores de uno de los puntos más fotografiados de la ciudad se han convertido en punto de encuentro para la primera copa de la noche o la última… Pero si se quiere algo más exclusivo, el lugar es The Library. Un triple concepto que incluye un club privado, -que si existiera en los años 50, está claro que encontraríamos a Lola Flores o Ava Gardner-, una boutique y un bar gastronómico.

Con el Grupo Paraguas detrás, y con más de 3.500 referencias, es un auténtico homenaje al vino. Una de las bebidas que, sin duda, más refleja nuestra esencia. Hay pocos planes mejores que quedar a tomar un Palo Cortado, una manzanilla, un txakolí, un blanco de las Rías Baixas… Podríamos imaginarnos a Grace Kelly tomando un vino aquí, después de la misa a la que acudió más de una vez en Los Jerónimos.

Manero Marqués de Cubas (Calle del Marqués de Cubas, 14)

Manero-MarquésdeCubas

Muy cerca del Museo Thyssen, vecino de Rural de Rafa Zafra, encontramos otro de esos restaurantes para cenar de lujo. Estamos hablando de Manero Marqués de Cubas, el nuevo concepto del empresario alicantino Carlos Bosch que eleva la experiencia gastronómica a la enésima potencia. Al entrar parece que estamos en París. ¿O es que acaso Madrid tiene algo que envidiar a la capital francesa?

Este nuevo Manero es como un sofisticado cóctel que incluye champagne -hay club de esta bebida, de Dom Pérignon-, caviar -hay una barra que homenajea a las huevas del pez esturión- y algún destilado o amontillado, porque tiene bar y restaurante… Y como ingrediente sorpresa, karaoke. Todo esto es posible porque su local tiene más de 400 metros cuadrados.

En su carta encontramos cremas, conservas, quesos, chacinas, platos de cuchara, pescados… El mejor producto, el mejor servicio, y la mejor decoración. Este bistró francés -así podría definirse- con esencia española tiene un interiorismo firmado por Lázaro Rosa-Violán, que ha decorado algunos de los restaurantes más bonitos del mundo. Sin duda, podríamos imaginarnos a Audrey Hepburn cenando aquí.

Bao Li (Calle de Jovellanos, 5)

Restaurante Bao Li.

Enfrente del Teatro de la Zarzuela, muy cerca del extinto Edelweiss -ya no es lo que era- encontramos el templo de la gastronomía cantonesa. Uno de los mejores restaurantes de lujo para viajar a Asia con el tenedor. Detrás están los hermanos Bao, María y Felipe, que llevan tiempo en la capital con restaurantes que ofrecen experiencias de este tipo.

China Crown, en el Barrio de Salamanca, es el mejor ejemplo. Hablamos de experiencias porque sus delicados platos y sus sabrosos sabores no dejan indiferente a nadie. Su sofisticado hilo de seda de pato laqueado es uno de esos platos que representan el lujo en la gastronomía. Su Xiao Long Bao de txangurro, su crujiente de bogavante, mango, maracuyá y caviar o su Wellington de ibérico char-siu es otro de esos ejemplos.

Está claro que los platos hacen que comamos o cenamos de lujo, pero es el servicio lo que hace que esta experiencia sea excepcional. Bao Li podría estar al nivel de los mejores restaurantes de París o Londres. Nos podríamos imaginar aquí a Elizabeth Taylor disfrutando de un almuerzo o una cena.

Desde 1911 (Calle del Vivero, 3)

Restaurante Desde 1911.

Si hubiera existido Desde 1911 en los años 50, habría sido lugar de reunión de directores de cine. Seguramente aquí se habrían firmado grandes contratos. El concepto más exclusivo de Pescaderías Coruñesas se ha convertido en uno de los mejores restaurantes de lujo de la capital. El lujo -valga la redundancia- comienza con el producto. Porque ya se sabe que el mejor pescado llega antes a Madrid, y si detrás están las Coruñesas, razón de más.

Los socialités del siglo XXI se dan cita aquí semana sí y semana también. La carta cambia cada día, en función de la pesca, y el resultado de la misma surge tras una interesante reunión del equipo. Así que sí, cada día la experiencia es única. Existen diferentes menús en los que el comensal elige tres, cuatro cinco o seis en función de la elección.

El pescado, por supuesto, es el plato principal. Para finalizar, quesos y postres. Todo maridado con una carta de vinos que, podríamos decir, es de las mejores de Madrid. Las bodegas más importantes de nuestro país están aquí representadas. ¿Cómo no va a querer Richard Gere vivir en Madrid?

Brach Restaurant (Gran Vía, 20)

Brach Madrid.

Acaba de abrir sus puertas el último hotel de lujo de Madrid: Brach. Y sí, en plena Gran Vía, volvemos al corazón de las mejores noches de los años 50. Brach aterriza desde París y lo hace con un hotel de cinco estrellas con restaurante a pie de calle, para que podamos cenar sin molestar a los huéspedes.

En un entorno firmado por Philippe Starck. Es uno de los últimos restaurantes de lujo que acaba de abrir en la ciudad… Que se convierta en el lugar de moda, es cuestión de tiempo. La carta está firmada por el chef Adam Bentalha, y en ella encontraremos platos con sabor mediterráneo y un toque oriental. Aunque sí, también hay guiños a la gastronomía española.

Alcachofas con foie gras y gel de granada picante, zviti de pimientos confitados y aceite ahumado, pulpo con berenjena ahumada y salsa de sobrasada, risotto a la trufa, bacalao confitado con alcachofas de Jerusalén y avellanas de Piamonte son algunos de los platos.

Horcher (Calle de Alfonso XII, 6)

Restaurante Horcher.

De aquellos años 50, en los que Jean Cocteau, Ernst Hemingway o Sofía Loren venían a la capital e iban a cenar, nos queda Horcher. El restaurante de lujo que a pesar de los años, nunca pasa de moda. Ya van 80. Lo más granado del mundo del arte venía a cenar aquí -hay que incluir a Salvador Dalí-, pero también la aristocracia y la burguesía.

Horcher, enfrente del Retiro, sigue siendo punto de encuentro y esto es gracias a la labor de Elizabeth Horcher. Hay quien dice que el restaurante ya no es lo que era, pero queda la esencia… Y es fácil imaginarse a la Loren disfrutando de una perdiz asada con uvas en hoja de parra en uno de sus salones privados. Los mejores platos podrían ser su stroganoff de corzo, la perdiz a la prensa, su consomé Dos Víctor, el bisque de bogavante…

Todo acompañado por una fuente de patatas soufflés y por supuesto su icónico bamkuchen con salsa de chocolate y crema chantilly de postre. El restaurante de los años dorados de Madrid… y el local al que volver para celebrar que la capital vuelve a vivirlos.