Ni fertilizantes caros ni pesticidas: el truco con bicarbonato que mantiene tus plantas sanas y bonitas

Una de las grandes preocupaciones de muchas personas es conseguir que sus plantas siempre luzcan de la mejor manera posible y se encuentren en perfecto estado de salud. Es por ello por lo que se recurre con frecuencia a fertilizantes caros o pesticidas, pero el verdadero secreto radica en el uso de bicarbonato de sodio, un producto versátil que no solo se usa en la cocina o la limpieza del hogar.

Utilizar el bicarbonato en las plantas de interior puede mejorarlas y potenciar su crecimiento, aunque para ello habrá que aplicar el producto de la forma adecuada. Este tiene una serie de beneficios para las plantas gracias a sus propiedades antifúngicas, actuando como una barrera natural frente a hongos y plagas, muy frecuentes en los ambientes cerrados y húmedos que se dan donde se colocan este tipo de plantas.

El bicarbonato de sodio también ayuda a la hora de regular el pH del sustrato, evitando que se vuelva demasiado ácido, lo que podría llegar a perjudicar la absorción de nutrientes esenciales. Gracias a su uso se puede disfrutar de una serie de beneficios que aprecian los especialistas en jardinería, como son los siguientes:

• Previene la aparición de hongos: el uso de este producto ayuda a prevenir que aparezcan hongos como el oídio o el mildiu, que generan manchas blancas en tallos y hojas.
• Neutraliza olores y bacterias: ayuda a neutralizar olores y bacterias en la tierra, sobre todo en macetas con un riego frecuente o en las que no hay un buen drenaje.
• Reduce los insectos: los expertos en jardinería ayudan a reducir la presencia de insectos en las plantas, como los pulgones, que afectan a la savia y acaban por debilitar la planta.
• Mejora el aspecto de la planta: usar bicarbonato de sodio con moderación ayuda a mejorar la vitalidad general y el aspecto de la planta.

Cómo usar bicarbonato en las plantas

Para poder disfrutar de estos y otros beneficios, es necesario aplicar el bicarbonato de sodio de la manera adecuada, existiendo principalmente tres maneras diferentes de hacerlo de una forma segura y eficaz, que son las siguientes:

• Spray antifúngico: para preparar un spray antifúngico, se debe disolver una cucharadita de bicarbonato de sodio en un litro de agua, para luego añadir una gota de detergente neutro. A continuación, se pulveriza sobre las hojas afectadas, una vez por semana y preferiblemente en aquellas horas del día en las que no hay incidencia solar directa.
• Enjuague para macetas: se puede usar para lavar las macetas vacías antes de volver a plantar en ellas, logrando de esta forma deshacerse de posibles residuos dañinos para las plantas que puedan aparecer en ellas.
• Espolvorear sobre la tierra: con solo colocar una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio sobre el sustrato, alrededor del tallo, se consigue prevenir que aparezcan hongos en la base de la planta.

A pesar de que el bicarbonato de sodio es natural y seguro, su uso excesivo puede llegar a provocar alteraciones en el equilibrio del suelo o incluso provocar quemaduras leves en las hojas, por lo que las recomendaciones pasan por no aplicar más de una vez por semana, evitar el contacto directo con brotes o flores muy jóvenes y probar primero en una pequeña parte de la planta antes de aplicarla de forma general.

Otros remedios caseros para las plantas

Existen diferentes remedios caseros alternativos al bicarbonato de sodio que nos pueden ayudar a la hora de prevenir ataques y plagas en las plantas, así como para eliminarlas, entre los que podemos destacar los siguientes:

Alcohol de tabaco

El tabaco es un potente agente contras las plagas al ser insecticida, fungicida y acaricida, por lo que actúa contra ácaros, moscas, etcétera. Para usarlo hay que tomar 20 gramos de tabaco para liar o de colillas sin los filtros y añadirlos a una botella con un poco de alcohol. Dejar reposar la mezcla 24 horas y luego rellenar la botella con agua. Mezclar bien, filtrar y pulverizar las plantas de interior.

Alcohol de ajo

Otra opción interesante para prevenir problemas en las plantas es combinar alcohol y ajo en una botella, pues este último tiene propiedades insecticidas, repelentes, fungicidas, nematicidas y bactericidas. Hay que triturar un poco los ajos y rellenar la botella con medio litro de alcohol, para agregar los ajos triturados y dejar reposar.

Después de dejar que repose durante un día, para añadir otro medio litro de alcohol y filtrar la mezcla. De esta manera se podrá estar listo para poder aplicar sobre las plantas. Se trata de un insecticida ecológico que es perfecto como remedio casero para tu huerto casero.

Infusión de manzanilla

Otro remedio casero es la infusión de manzanilla, para lo que solo hay que utilizar 50 gramos de manzanilla y hacer una infusión en un litro de agua. Tras 24 horas, cuando esté fría, cuela la infusión y tendrás un líquido perfecto para rociar las plantas y protegerlas contra hongos y mildiu.

Jabón potásico

El jabón potásico es uno de los productos más completos para limpiar, prevenir y combatir plagas y enfermedades, contando con propiedades acaricidas e insecticidas. Tienes que diluirlo previamente en agua caliente antes de usarlo, aunque hoy en día hay muchos jabones potásicos listos para usar. Se recomienda seguir las instrucciones del fabricante para poder utilizarlo de una manera segura y eficaz.