Adiós a los fraudes en la compra de coches: esto es lo que debes revisar en los de segunda mano para evitar fraudes
Adiós a los fraudes en la compra de coches: esto es lo que debes revisar en los de segunda mano para evitar fraudes
Comprar un coche de segunda mano sin revisar bien papeles y mecánica puede acabar en estafa, avería o sanción.
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La compraventa de vehículos de segunda mano sigue siendo una de las opciones preferidas por los conductores en España. Sin embargo, también es uno de los terrenos más propensos al fraude. Desde manipulaciones en el kilometraje hasta vehículos con cargas legales ocultas, las estafas pueden ser difíciles de detectar si no se lleva a cabo una revisión minuciosa antes de cerrar la operación.
Expertos del sector automovilístico y organismos como la DGT recomiendan extremar las precauciones y no fiarse únicamente del estado aparente del vehículo. El aspecto estético puede ser engañoso si no se acompaña de una inspección técnica detallada y una verificación documental rigurosa.
Antes de firmar cualquier contrato, conviene comprobar el estado real del motor, la caja de cambios y el sistema de frenos. Aunque muchos compradores no tienen conocimientos mecánicos, es fundamental acudir con un profesional o pedir una revisión en un taller de confianza.
El desgaste excesivo, los ruidos anómalos o las fugas de aceite pueden ser señales de problemas graves. También es importante prestar atención a los sistemas eléctricos, que pueden fallar con el paso del tiempo y ser costosos de reparar. Los testigos encendidos en el cuadro de mandos deben ser una alerta inmediata.
Uno de los fraudes más comunes en el mercado de segunda mano es la alteración del cuentakilómetros. Reducir los kilómetros recorridos para hacer más atractiva la venta del vehículo es ilegal, pero sigue ocurriendo con frecuencia. Por ello, es fundamental comprobar si el kilometraje registrado es coherente con el uso del coche y con los informes de mantenimiento disponibles.
La documentación, clave para evitar disgustos
Más allá de la parte mecánica, la seguridad jurídica del comprador depende de revisar toda la documentación. Es imprescindible comprobar que el vehículo no tiene cargas administrativas, como embargos, multas sin pagar o impuestos pendientes.
También conviene confirmar que el titular del coche coincide con el vendedor y que todos los datos coinciden con los que figuran en la ficha técnica y el permiso de circulación. Asimismo, se recomienda consultar el historial del vehículo en la web de la DGT mediante el número de matrícula o bastidor, lo que permite conocer posibles accidentes, cambios de titularidad o bajas anteriores.
