Un gato Felis silvestris lybica.

Un gato Felis silvestris lybica.

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Mascotario

Carlos Gutiérrez, veterinario, revela cuál fue el primer gato doméstico: "Surgió hace 4.000 años en el Antiguo Egipto"

La primera convivencia entre felinos y humanos se documenta hace 4.000 años con una especie que comenzó una unión muy estrecha con nosotros.

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"Los gatos nos acompañan desde hace más de 10.000 años", afirma el veterinario Carlos Gutiérrez en un vídeo de YouTube. Empezaron a relacionarse con los humanos en la Mesopotamia, dentro del Creciente Fértil.

La primera vez que se documentó una asociación directa entre gatos y personas fue en Chipre hace 9.500 años. "El gato montés joven fue enterrado en la tumba de un ser humano", cuenta.

Sin embargo, los felinos no siempre han sido domésticos. "La especie que comenzó una unión mucho más estrecha con los humanos se denomina Felis silvestris lybica". Esto ocurrió aproximadamente hace 4.000 años en el Antiguo Egipto.

"El Felis silvestris lybica ya podía considerarse muy parecido al gato que convive con nosotros actualmente", explica Carlos. Se trata del montés africano, que no se quedó en el pasado, sino que todavía vive entre nosotros en zonas con grandes extensiones de terreno.

Una misma especie

Como indica el experto, fue a partir de los restos fósiles datados en el Antiguo Egipto que se considera el inicio de una unión mucho más estrecha, donde convivían con las personas, incluso dentro de las casas.

"El gato común que vive hoy con nosotros surgió a partir de gatos silvestres que convivieron con los seres humanos". Originalmente, indica que se consideraban dos especies distintas: Felis catus (gato de casa) y Felis silvestris (gato montés).

Sin embargo, las investigaciones han demostrado que son realmente la misma especie. Por esta razón, el gato doméstico es ahora clasificado como una subespecie de los silvestres.

"El ser humano no ha generado una especie nueva al convivir con el gato, salvo en casos muy recientes de reproducción artificial para buscar características específicas en razas con pedigrí". Sin embargo, esto pasó con otros animales. Durante la convivencia con perros y lobos, se crearon dos especies distintas.

Una adaptación mutua

Fue la larga evolución de la convivencia que desarrolló la adaptación mutua del felino y el humano. Hace aproximadamente siete mil años, se documentaron varios enterramientos de gatos con personas en lugares lejanos como China.

En esa época los gatos seguían siendo bastante salvaje. Se les consideraba "comensales". Vivían cerca de los asentamientos humanos, aprovechando las condiciones favorables. El veterinario cuenta que se beneficiaban delas plagas que crecían en los cereales cultivados y empezaron a convivir con las personas dentro de las casas y en zonas cercanas a la urbe.

Los humanos, al beneficiarse del control de plagas, comenzaron a alimentar a los gatos y a tolerar mejor a aquellos que tenían un comportamiento más dócil. Con el paso de los años, su carácter fue evolucionando hacia el gato que conocemos actualmente.

Aun así, no se generó una especie nueva al convivir con el gato. Por esto, Gutiérrez no habla de "auténtica domesticación". Debido a esta estrecha relación genética, el gato doméstico se clasifica como una subespecie de los gatos silvestres.