Hospital clínico.

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Tres ataques verbales a médicos de urgencias en cinco días en el Clínico: “Dijeron que la agredirían al terminar su turno”

La última víctima fue insultada y amenazada por una paciente y su familiar. El SMM se concentra este martes para denunciar el incremento casos de violencia.

Más información: Detienen a un hombre por agredir a una enfermera mientras le colocaba una vía en el Hospital Regional de Málaga.

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Las agresiones a profesionales sanitarios no hacen más que aumentar. En los últimos cinco días, según el Sindicato Médico de Málaga, en el Hospital Universitario Virgen de la Victoria se han registrado tres agresiones verbales a profesionales del Servicio de Urgencias.

La última la vivió una doctora que fue amenazada e insultada por una paciente y su familiar en estas mismas Urgencias. Esta agresión se conoce después de saber que un hombre ha sido detenido por abofetear a una enfermera mientras le colocaba una vía en el Hospital Regional.

Así lo han dado a conocer desde el Sindicato Médico de Málaga, que se manifestará este martes a las puertas del centro hospitalario en repulsa a esta nueva agresión verbal a un profesional de la sanidad en Málaga.

Al parecer, la facultativa del servicio de urgencias del Hospital Universitario Virgen de la Victoria estaba trabajando cuando una paciente y su familiar profirieron insultos y amenazas de agresión física contra ella, incluso anunciando que la agredirían al finalizar su turno.

Esta situación, según indican desde el SMM, es “alarmante” porque en menos de cinco días se han producido tres agresiones verbales en el servicio de urgencias de este centro hospitalario.

Todo ello recuerda lo sucedido hace dos veranos, cuando se encadenaron varios episodios violentos, incluida una agresión física a una médica embarazada. Entonces, la dirección gerencia del hospital se comprometió a la elaboración de un protocolo de actuación mediante la creación de un grupo de trabajo específico.

Dos años después, dicho protocolo, según el SMM, “no se está cumpliendo, con la connivencia de la Dirección de Servicios Generales”.

Las entradas al servicio de urgencias siguen sin estar debidamente controladas y la zona de consultas y sala de trabajo permanecen expuestas, permitiendo el libre acceso de pacientes y acompañantes”, explican.

El personal de seguridad, además, “no actúa con diligencia ni siquiera ante agresiones verbales ocurridas en su presencia, sin intervenir ni realizar contención verbal mínima”, añaden.

En este sentido, hacen hincapié en que los profesionales de urgencias trabajan bajo una intensa presión asistencial, que se agrava durante los meses de verano por el aumento de la población flotante y la falta de cobertura de puestos funcionales debido a la escasez de contratos, según el sindicato.

Esta situación solo se agravará en un futuro inmediato porque los médicos no quieren venir a trabajar a unas urgencias desbordadas, sin apoyo y donde el miedo es parte del día a día”, remarcan.

Por ello, exigen “de forma urgente” que se instalen barreras físicas para que personas no autorizadas pasen al servicio de urgencias; que se controle el acceso al servicio de urgencias; y se revise el protocolo de agresiones.