Imagen de una máquina pantalladora trabajando en la construcción del Metro de Málaga en la calle Santa Elena.

Imagen de una máquina pantalladora trabajando en la construcción del Metro de Málaga en la calle Santa Elena.

Málaga ciudad

Así trabajan los gigantes de acero que construyen el Metro de Málaga al Civil: ya 'devoran' el terreno en Santa Elena

A la espera de que la Junta de Andalucía adjudique el tercer y último tramo del suburbano al Civil, los trabajos en Eugenio Gross y Santa Marta se incrementan.

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Por más que la dimensión del Metro de Málaga sea extraordinaria, tanto en coste económico como en kilómetros de trazado, su construcción requiere de un proceso meticuloso. De hecho, se materializa paso a paso, bocado a bocado.

Porque justo esto es lo que hacen los gigantes de acero que se encargan de dar forma a la parte esencial del túnel por el que tiempo después circularán los trenes del suburbano malagueño.

Las máquinas pantalladoras, como son conocidas en el sector, han empezado a devorar ya terreno en la parte final de la calle Santa Elena, justo en la frontera misma con Eugenio Gross.

Cumpliendo con los plazos manejados por la Agencia de Obra Pública de Andalucía, responsable del proyecto en su globalidad, el dispositivo inició este jueves el trabajo de ejecución de los muros pantalla en este punto exacto del segundo de los tramos del ramal al Hospital Civil.

Vídeo de una de las máquinas pantalladoras del Metro de Málaga.

El equipo se ve completado con otro que interviene en Eugenio Gross, pieza principal de este segundo tajo en el recorrido hacia la zona norte.

La dimensión de estas máquinas queda demostrada al atender a su peso. 89 toneladas, a las que sumar las 18 toneladas de la cuchara de excavación que se emplea para profundizar en el terreno.

Aunque el arranque oficial de las operaciones en el tajo Hilera-Eugenio Gross tuvo lugar en los primeros días del pasado mes de julio, hubo que esperar a noviembre para que tuviese lugar el corte total al tráfico de Eugenio Gross.

Una medida que podría extenderse en el tiempo unos tres años, si bien el compromiso regional es el de ir recuperando espacio de aceras y asfalto conforme avance la obra.

Método de construcción

El método que se emplea para la ejecución material de la infraestructura es el denominado cut & cover. Es el mismo que se viene empleando desde mediados de 2006, cuando se pusieron en marcha los primeros trabajos del ferrocarril urbano en las proximidades del Martín Carpena.

Una vez realizadas las pantallas se dará paso a la cubrición del túnel mediante una losa de hormigón y a la excavación entre pantallas en el interior del recinto.

Este segundo tramo en obras, tras el avance en Hilera, fue adjudicado meses atrás a la unión de empresas integrada por FCC, Eiffage y Canteras de Almargen por 38,4 millones de euros (sin IVA). El plazo previsto para la fase de infraestructura es de 36 meses.

Con este calendario en la mano y poniendo en marcha el contador en el mes de julio, esta fase de la operación, que incluye los citados muros pantalla, la excavación del paso soterrado, la construcción de la única estación prevista en el mismo, la superestructura y la reposición en superficie debería estar finalizada a mediados de 2028.

¿Implica esto que quedará listo para poner en servicio en caso de necesidad? No. Porque la terminación del tramo, como ocurre con el de Hilera, queda condicionado a otros contratos que afectan a los tres tramos en los que se dividen los 1,8 kilómetros del recorrido hasta el Civil. Servicios que están pendientes de adjudicar o de licitar.

Actualmente son dos de los tres subtramos los que están en construcción. Resta por activar la tercera de las piezas: Eugenio Gross-Blas de Lezo.

La Consejería de Fomento sigue pendiente de que se adjudique las obras, que tienen un precio inicial de 61,6 millones de euros (IVA incluido), y que se disputan 16 empresas o alianzas empresariales.

Se estima que la extensión del ferrocarril urbano hasta el Nuevo Hospital, que se va a ejecutar junto al Civil, aporte alrededor de 3,5 millones de usuarios adicionales al año a la red de Metro.