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Los grandes males de los pisos turísticos en Málaga: "Pérdida de identidad, afección al derecho a la vivienda..."

Son algunas de las razones de “interés general” que adujo el Ayuntamiento para impulsar la prohibición de nuevas inscripciones en 43 barrios de la ciudad.

Más información: La Merced, Centro, La Trinidad, Martiricos… Los 43 barrios en los que Málaga prohíbe ya nuevas viviendas turísticas

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Lejos de la permisividad con la que el Ayuntamiento de Málaga miró durante largo tiempo el creciente fenómeno de la vivienda turística, el último año y medio ha estado marcado por la aprobación y puesta en marcha de no pocas medidas con las que contener su expansión.

La renovada voluntad del equipo de gobierno queda patente en los planes de intervención ya aprobados y en vigor. Sin embargo, la realidad es que los mismos no parecen tener efecto alguno sobre las cifras de alojamientos temporales registrados por la Junta de Andalucía.

Hasta este martes 15 de julio son 12.831 los pisos turísticos existentes en la capital de la Costa del Sol, si bien no todos ellos están operativos.

La hoja de ruta trazada por el Ejecutivo local ha buscado desde los primeros meses de 2024, tras la aprobación del decreto de la Junta de Andalucía, poner trabas a este tipo de negocios.

La última de las acciones, en vigor desde las primeras semanas de 2025, es la que prohíbe la apertura de nuevas viviendas turísticas en 43 barrios de la capital.

La elección de estas zonas, tras la elaboración de un profundo estudio, no es baladí, sino que se ha hecho coincidir con aquellas en las que la saturación de pisos turísticos es mayor, hasta el punto de suponer más del 8% de todo el parque residencial existente.

El análisis de la documentación de la modificación normativa ya aprobada definitivamente permite constatar hasta qué punto el discurso municipal en relación con este fenómeno ha variado de manera clara.

En el expediente, los redactores de la propuesta llegan a señalar los grandes males de estos negocios temporales de alojamiento.

De manera precisa, justifican la decisión de prohibir este uso en parte de la ciudad aduciendo "razones de interés general".

Y ello porque, a modo de conclusión, la masiva presencia de estas viviendas provocan "pérdida de la identidad de la ciudad, afección al derecho a la vivienda, problemas de convivencia en las comunidades de vecinos, despersonalización del servicio y precariedad laboral".

Todas estas afecciones, a ojos de los responsables municipales, "exigen su inmediata corrección por razones de imperiosa necesidad por cuanto está afectando, de manera urgente, al interés general de la ciudad y requieren la pronta actuación".

En este escenario y tomando como punto de partida el análisis previo, se concluye la existencia de "un deterioro de las condiciones de vida de las personas residentes" en los barrios ahora blindados "como consecuencia de soportar de forma más intensa la presencia de inmuebles destinados a esta forma de alojamiento".

Queda por delante la última de las acciones planteadas por la Gerencia de Urbanismo, que traerá consigo una nueva modificación del Plan General.

Regular todos los usos turísticos

En una respuesta oficial emitida desde la Casona del Parque a petición de Con Málaga, se reconoce que Urbanismo está trabajando en este ajuste, que tiene el objetivo de "regular en su total complejidad los usos turísticos".

Y ello incluye no sólo a las viviendas turísticas, sino también a los hoteles y a los apartamentos. "Será en el curso de esa modificación en la que se adoptarán cuantas medidas sean precisas y necesarias", se añade.

Hay que recordar que a finales del año pasado, el gerente de Urbanismo, José María Morente, ya apuntaba en esta dirección, señalando que está en la hoja de ruta municipal la regulación de proyectos hoteleros y de apartamentos de baja calidad.

Así lo ha dejado entrever este jueves el gerente de Urbanismo, José María Morente, en el marco de una ponencia ofrecida en el Salón Inmobiliario del Mediterráneo (Simed), que ha abierto sus puertas este jueves y estará operativo hasta el sábado 9 de noviembre.

Y ello porque la apuesta del Ejecutivo local es la de favorecer el impulso de proyectos de calidad y máxima categoría, con los que paliar el evidente déficit de plazas existente en la ciudad. "Hay que responder a la demanda de alto poder adquisitivo", dijo.