Revés al Ayuntamiento de Málaga en su apuesta por externalizar la atención a personas sin hogar

La apuesta del Ayuntamiento de Málaga por implantar un nuevo modelo de atención a personas sin hogar pincha en hueso. Al menos inicialmente. Y ello después de que el concurso activado para la contratación de este servicio a una empresa externa, impulsado el pasado mes de octubre, haya quedado desierto.

Así consta en la resolución oficial emitida por el Consistorio, en la que se precisa que las tres ofertas presentadas han sido excluidas. La anulación de las propuestas presentadas hace que el Ayuntamiento haya declarado desierta la licitación, lo que supone un revés evidente en su estrategia.

El planteamiento municipal supone una modificación radical respecto al modelo que se ha venido aplicando desde hace años. El propio pliego destaca el deseo del equipo de gobierno de desarrollar “una nueva definición de las políticas encaminadas a la mejora de la calidad de vida y el bienestar de estas personas”.

Para ello, entienden como "fundamental" la modernización de los equipamientos destinados a estas personas, no tanto en los aspectos puramente materiales, sino en la propia concepción de los recursos habitacionales.

"Se trata de avanzar hacia una forma de prestación, basada en las necesidades del propio equipamiento e infraestructuras, para centrar la atención en las necesidades de las personas que ocupan las plazas, adaptando la visión y misión de las soluciones habitacionales que se proponen, tanto a nivel de tipología como de satisfacción de necesidades", se destaca.

Esta evolución abandona la idea de un único Centro de Acogida Municipal de gran capacidad, para poner en marcha equipamientos o recursos más específicos y de menor capacidad, que respondan a las diferentes tipologías y características. De ese modo, se indica, se permiten espacios más amables, centrados y personalizados.

Este contrato tiene por objeto la gestión integral y puesta en funcionamiento de una red de tres equipamientos o centros de alta tolerancia. Cada uno de ellos con una capacidad mínima de 35 plazas, cuya suma aumentaría la disponibilidad existente en las actuales infraestructuras. Todos ellos serán destinados a Personas en Situación de Calle que viven o se encuentran en tránsito en Málaga.

Su finalidad es frenar el deterioro de personas que se encuentran en una situación de extrema exclusión social y sin hogar, siendo su objetivo reducir el daño ocasionado por vivir en la calle, a través de la disposición y el ofrecimiento de una atención inmediata que les proporcione el alojamiento, la manutención, la pernoctación, higiene y ropero, así como información y orientación social. Las plazas serán de carácter mixto en habitaciones o módulos separados por géneros y ofrecerán un servicio las 24 horas del día durante los 365 días del año.

Para hacer frente a este reto, el Ayuntamiento había establecido un precio de licitación cercano a los 11,5 millones de euros (IVA incluido), por un período de cinco años. Ante este descalabro inicial, el área de Derechos Sociales sigue trabajando en redefinir el procedimiento manteniendo la propuesta municipal que contempla la implantación de un nuevo modelo.