El hombre de 73 años herido por una bala perdida en el tiroteo de calle Gaucín sigue ingresado en el hospital

El hombre de 73 años que resultó herido en el tiroteo de la calle Gaucín tras recibir el impacto de una bala perdida sigue ingresado en el Hospital Regional de Málaga, hasta donde fue trasladado en estado grave el pasado martes. En estos momentos, su pronóstico sigue reservado y al menos hasta ayer, el hombre se encontraba a la espera de una intervención.

Los otros tres hombres heridos, es decir, los dos obreros que también fueron alcanzados indirectamente por los disparos y el objetivo del 'pistolero', ya han sido dados de alta.

En concreto, han recibido el alta el hombre 37 años, herido en un miembro superior y que estaba en ese mismo centro sanitario, y los dos que fueron llevados al Hospital Virgen de la Victoria de Málaga, uno de 38 años alcanzado en muslo y abdomen y uno de 36 herido en un muslo.

Por su parte, la Policía Nacional continúa las investigaciones para esclarecer las circunstancias del suceso y tratar de detener al autor de los disparos, que huyó tras lo ocurrido. En la zona, se dice que este hombre vivía en una casa de okupa en la zona de los bloques León, en Vistafranca, con su familia. Sin embargo, desde que los hechos ocurrieron el pasado martes sobre las 18:00 horas en la calle Gaucín, en el distrito de Carretera de Cádiz de la capital malagueña, nada se sabe de él. Hay quien cree que puede haber marchado a Alicante, de donde era natural.

Todo sucedió por una discusión entre el alicantino y Jony, un vecino de Dos Hermanas, cuando el segundo había llevado a su hijo a pelarse a la peluquería El Andaluz. Mientras que el menor estaba dentro de la peluquería, su padre aguardaba en la puerta. Justo en ese punto, apareció el alicantino y ambos comenzaron a discutir, llegando el alicantino a sacar una pistola, similar a la que llevan los agentes de la Policía, y comenzó a efectuar disparos, sin miramiento alguno aunque ambos tenían a sus hijos en el lugar de los hechos.

El peluquero, testigo de los hechos, conocía a las dos partes y sostiene que el agresor nunca había sido problemático, al menos con él. Era cliente de su antiguo negocio de vez en cuando, "cada tres o cuatro meses". Si bien, ese día, al cruzar la calle, lo vio con mala cara, como si algo le ocurriera. No le saludó a lo lejos como solía hacer, aunque estaba inaugurando su nuevo local. Respecto a Jony, lo notó "algo nerviosillo".

Al parecer, las dos partes tenían rencillas previas que venían de mucho tiempo atrás entre sus familias. Los disparos llegaron a varios metros de distancia, causando tres heridos por balas perdidas que, según los vecinos de la zona, podrían haber sido muchos más si ocurre en la acera de enfrente, donde había mucho más trasiego de personas. Desde que ocurrió, en la zona de El Torcal no se habla de otra cosa y temen a que sucedan represalias en las próximas semanas.