De ruinoso cortijo de más de 150 años a hotel rural escondido en los Montes de Málaga

De un cortijo ruinoso a un hotel rural escondido en los Montes de Málaga. Esta es la extraordinaria transformación que pretende ejecutar en los próximos meses la empresa Valenciana de Promociones Urbanísticas 2000 S. L., con sede en Madrid, sobre una antigua edificación, cuyo origen se estima en el año 1872. Su objetivo, devolverlo a la vida, tras años de abandono, y hacer negocio. 

Aunque el final del camino queda aún lejos, la entidad ha abierto la senda. Y cuenta con un primer movimiento por parte del Ayuntamiento, que ha admitido a trámite el proyecto. La iniciativa cuenta con la particularidad de desarrollarse en un paraje natural extraordinario y sobre terrenos actualmente clasificados como no urbanizables de especial protección.

Esta circunstancia obliga a ser extremadamente cautelosos con cualquier operación que traiga consigo un uso de estas características. Para poder alcanzar la meta, ha de ser considerada como una actuación extraordinaria de Interés Público y Social, al objeto de avalar el desarrollo pretendido.

Más detalles del abandono de la edificación.

La superficie del espacio en el que se plantea el uso hotelero roza los 156.000 metros cuadrados, cumpliendo de este modo una de las exigencias normativas. La edificación se concentra en una superficie de 1.283,3 metros cuadrados, distribuidos en varios cuerpos constructivos de diversas alturas (B+1 y B+2) y tres patios que articulan el conjunto. 

La propiedad pretende desarrollar una edificación destinada a alojamiento rural, que ofrecerá, además de la estancia, actividades relacionadas con el turismo en el entorno natural en el que se localiza la edificación. 

De acuerdo con los detalles recogidos en el expediente urbanístico, la inversión de adaptación del viejo cortijo va a suponer una inversión cercana a los 1.275.901 euros. El plazo estimado para llevar adelante la operación de reconstrucción es de 22 meses desde el comienzo de las obras.

En el documento se subraya que el conjunto, que incluye cinco cuerpos de edificación, está "bastante deteriorado". Las imágenes tomadas e incluidas confirman el estado ruinoso y demolido de buena parte de ellas.

La firma madrileña pretende aprovechar el gran interés despertado en los últimos años por el turismo rural en la provincia de Málaga. De hecho, se apunta que la demanda de alojamiento de este tipo es superior a la oferta en la mayoría de los meses del año, "por lo que se estima que la ocupación de la vivienda será muy alta desde el inicio de la actividad".

Vista aérea del antiguo cortijo.

Estudio económico

Y ello generará un rendimiento económico considerable, tomando como base las estancias de los clientes y las actividades complementarias basadas en el conocimiento del medio natural y territorial (excursiones, actividades cinegéticas y agrícolas, rutas de bicicleta de montaña, etc.). A esto se suma la posibilidad de utilizar parte de los espacios libres planteados en el nuevo proyecto para la celebración de eventos. 

En este sentido, el informe recoge unos precios estimativos por el uso del cortijo, que se cifra en unos 400 euros al día para la vivienda principal y en 250 euros al día en cada uno de los dos módulos adicionales. 

Se estiman unos gastos de mantenimiento de 16.000 euros anuales y unos gastos de personal que arrancan en 24.000 euros anuales en el primer año, incrementándose en los años sucesivos de manera proporcional al aumento de la demanda. 

Valorando el conjunto de servicios que van a ser ofertados, el precio inicial y el porcentaje de ocupación del 50% en el primer año, se estiman aproximadamente 164.250 euros de ingresos el primer año. Desde ese momento, se estima un aumento de demanda e ingresos hasta alcanzar una ocupación del 80%. A esto se añade la estimación de una segunda fuente de ingresos mediante la acogida de eventos en determinadas épocas del año. 

De hecho, según el cuadro económico incluido, la empresa espera poder alcanzar los 220.000 euros de ingresos por el alojamiento y otras actividades al séptimo año. Será ese ejercicio en el que haya un resultado favorable por la explotación del complejo, con casi 105.500 euros de beneficios. Hay que tener en cuenta que la intención de la firma es la de afrontar de manera directa toda la inversión y gastos.