Momento de tensión en el Pleno del Ayuntamiento de Málaga. Una sesión que transcurría con absoluta normalidad se ha encendido en el momento en el que, en el marco del debate de una moción de Vox, el portavoz del PSOE, Daniel Pérez, ha anunciado que su grupo no participará en ninguna de las iniciativas de esa formación, acusándolo de "alentar a personas de extrema derecha a acercarse a la sede del PSOE, a proferir insultos racistas y atentar contra los dirigentes del PSOE". 

"En política no todo vale, los discursos de odio que calan en la sociedad son muy peligrosos", ha añadido, al tiempo que ha insistido en la idea: "No vamos a permitir el blanqueamiento de un partido de extrema derecha que lo único que hace es sembrar el odio en nuestro país".

Ante estas afirmaciones, el portavoz de Vox, Antonio Alcaraz, ha contestado: "Demuestra el tipo de partido que es, de extrema mentira, de extrema corrupción y de extrema delincuencia". Una última aseveración que ha retirado, pidiendo disculpas, después de que el alcalde, Francisco de la Torre, le diese la posibilidad de retirar esas afirmaciones.

Cuando parecía superado el encontronazo entre grupos, la portavoz de Con Málaga, Antonia Morillas, ha tomado la palabra para calificar de "intolerable" que se siente en el Pleno un grupo político que hace declaraciones como las realizadas por Alcaraz. "Tiene que haber una condena de todos los grupos frente al fascismo, porque lo que se sienta aquí es fascismo", ha añadido, ante lo que Alcaraz ha reaccionado asegurando que no iba a permitir "esas palabras". Finalmente, la sesión ha continuado.