La venta del edificio de 11 plantas para hotel u oficinas que podrá construirse en el litoral oeste de Málaga, junto a los bloques de 21 plantas que ya construyen Metrovacesa y Sierra Blanca, pincha en hueso. El Ayuntamiento de Málaga confirma la existencia de una sola empresa interesada en su adquisición.

Este es el dato oficial al cierre de la subasta pública activada por la Gerencia de Urbanismo a mediados del pasado mes de febrero. El concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, ha informado de que sólo hay una oferta formalmente presentada en el plazo establecido. Resta por concretar si la misma cumple con los requisitos exigidos y el uso pretendido para el aprovechamiento municipal en ese sector.

El resultado está por debajo de lo inicialmente esperado. El propio López, meses atrás, había informado de la existencia de varias firmas dispuestas a acudir al procedimiento. De hecho, esto motivó que se optase por abrir la mano y permitir que ese desarrollo urbanístico pudiese ser destinado a uso hotelero o de oficinas.

El pliego de condiciones fija un precio mínimo a abonar por el futuro adjudicatario de 9,14 millones de euros (sin IVA). Urbanismo dio el paso para esta enajenación después de que en septiembre de 2021 recibiera un escrito por parte de Grupo Nuovit manifestando su interés en la adquisición de esta parcela y solicitando el inicio del procedimiento público de enajenación.

El suelo objeto de venta tiene una superficie de 2.182,07 metros cuadrados, sobre el que se permite un techo edificable de 8.593,46 metros. Una de las particularidades es que el aprovechamiento cuenta con doble calificación urbanística. 

Por un lado, una parte zonificada con ordenanza de ordenación abierta, denominada parcela 1.2.B que tiene 1.074,74 metros de superficie y en la que puede realizarse una construcción de 8.593,46 metros de techo para uso terciario/hotelero. Y de otro, otra calificada como zona verde privada denominada parcela 1.2.D de 1.107,33 metros y que rodea a la anterior.

Tomando en consideración los detalles recogidos en el pliego de condiciones administrativas que rige este procedimiento, el elemento único y esencial en el estudio de las ofertas futuras es el valor económico. Es decir, que será la oferta más elevada la que se lleve el aprovechamiento municipal en este espacio.