La oficina de MDG Advisors, en Málaga.

La oficina de MDG Advisors, en Málaga. Cedida

Tecnología

De psicóloga a fichar programadores: la revolución laboral de la Málaga tecnológica

El 'boom' de empresas innovadoras en la Costa del Sol provoca una ola de transiciones profesionales desde sectores más tradicionales.

3 julio, 2023 05:00

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En su adolescencia, Carmen Peláez quería dedicarse a la estética o a la peluquería. Como siempre le había gustado enfocarse a mejorar la calidad de vida y el bienestar de la gente a su alrededor, terminó estudiando el grado de Psicología: "Al tercer o cuarto año vi las pocas plazas que hay en la sanidad pública para la salud mental y que, para ejercer por lo privado, el máster de habilitación era carísimo. Ahí me vi súper perdida", recuerda. Hoy coordina un equipo de reclutación de siete personas en la tecnológica Mindata.

"El último año de la carrera di una asignatura optativa de Recursos Humanos y me encantó. Le di el enfoque que quería: mejorar el clima laboral y las condiciones de las personas. Decidí apostar todo por ello", cuenta. Se matriculó en el Máster de Selección y Gestión del Talento de la Universidad de Málaga, donde estudió un módulo sobre selección de perfiles IT. No conocía nada del sector tecnológico en aquel momento: "Recuerdo la cara que se me quedó cuando escuché por primera vez un lenguaje de programación, ¡quién me iba a decir a mí que hoy en día acabaría tan familiarizado con eso!", bromea Peláez.

En la Málaga tecnológica hay una ola de transformaciones laborales como la suya: psicólogos como ella, pero también abogados, maestros, economistas, marketinianos, e incluso periodistas, se fijan en el pujante sector de la innovación para lograr empleo con unas condiciones laborales que no siempre encuentran en su vocación inicial; u oportunidades de negocio al más alto nivel que antes no existían desde su ciudad. Los propios protagonistas lo explican en conversaciones con EL ESPAÑOL de Málaga.

Carmen Peláez, en una imagen de archivo.

Carmen Peláez, en una imagen de archivo. Cedida

"Yo no tenía ni podía pensar era el sector tecnológico; pero empecé a trabajar en una startup y aprendí de verdad qué es programar. Vi con mis propios ojos qué es crear una plataforma o una página web, estuve día a día con el mundo tecnológico", prosigue Peláez: "Ahora, le recomiendo a todo el mundo que estudie Ingeniería Informática. Soy consciente del boom que hay, y que solo acaba de empezar".

Aunque haya personas que "les puede gustar más o menos", para ella no hay comparación con estas empresas "a nivel de remuneración, estabilidad y demás". "Claro que lo recomiendo. Hay que adaptarse y especializarse y, si este es el sector que está en auge... por qué no. Yo estoy a favor de recomendar a todo tipo de trabajos a este sector. Y más en Málaga, que es ahora mismo una de las ciudades más punteras en el ámbito tecnológico", plantea.

"Parece que hay dos Málagas, la tecnológica y la tradicional, y el puente entre ambas es aún muy pequeño"

Algo relativamente similar le ocurrió a Alfonso Ortiz de Miguel, abogado y cofundador de relocalización Welcome Málaga. Para él, el boom tecnológico en la ciudad supone "una oportunidad de negocio brutal" para "el que sepa moverse". En su caso, identificaron que había mucha gente que se mudaba a Málaga pero no encontraba un servicio local que les ayudase con las gestiones a la llegada: desde los papeleos legales hasta la búsqueda de residencia o colegio para los hijos.

Ahora, ellos se ocupan de esa labor. "Málaga va creciendo, hay una llegada de empresas brutal, y a todas ellas hay que darle servicios. Hace cinco años, por ejemplo, no existían abogados en Málaga que se dedicasen al sector tecnológico", resume Ortiz. No obstante, desde su perspectiva, aún "sigue habiendo muchísima distancia" entre las compañías tech y las más tradicionales.

El equipo de Welcome Málaga, con De Ortiz en pie.

El equipo de Welcome Málaga, con De Ortiz en pie. Cedida

"Tú vas a un foro de la Málaga tecnológica, y no te encuentras a tanta gente que conozca la Málaga de toda la vida. En cambio, vas por un barrio a tomarte una cerveza, y no te encuentras a nadie de la Málaga tecnológica. Parece que hay dos Málagas, y el puente entre ambas es aún muy pequeño", reflexiona.

Para él, las conexiones entre esas dos Málagas sería beneficiosa también para el ecosistema tecnológico, por ejemplo, para la financiación de sus empresas emergentes: "Mucha gente de Málaga tiene capacidad económica para ser inversores de startups y demás; pero no saben ni dónde tienen que acudir y, si se enteran algo, es a través de los bancos. No existe aquí en Málaga esa conexión, y es una pena. Se están perdiendo oportunidades, ¡en Málaga también hay gente con mucho dinero!".

"El impulso de Málaga es imparable y afecta de forma inexorable a todos los sectores"

"Los que den la espalda a la realidad que es hoy Málaga van a quedar un poco fuera", asegura Miriem Diouri, socia fundadora de MDG Advisors. La suya es una asesoría fiscal y contable con un 95% de clientes de inversión internacional, provenientes de más de 20 países distintos; muchos de ellos tecnológicos, pero también fondos de inversión o inmobiliarias. "El impulso de Málaga es imparable y afecta de forma inexorable a todos los sectores", resume.

El despacho de MDG Advisors comenzó en 2010 únicamente con un cliente, malagueño y proveniente de un sector tradicional y malagueño. Desde entonces, explica Diouri, se han visto "un poco arrastrados en la vorágine" del desarrollo de la ciudad. "No sé si nosotros hemos encontrado un nicho de mercado o el nicho nos encontró a nosotros", expresa.

El equipo de MDG Advisors, con Diouri en el centro de la imagen.

El equipo de MDG Advisors, con Diouri en el centro de la imagen. Cedida

"Teníamos experiencia previa con firmas internacionales, pero el desarrollo propio de la ciudad nos hizo volcarnos con esa necesidad que tenía que ser cubierta: servicios de asesoría fiscal y contable de la más alta calidad a multinacionales que llegaban a Málaga, pero aquí no dejan de ser pymes", señala la empresaria. Trabajan desde calle Císter con equipos contables de Filipinas o de Nueva York, una personalidad global que "hace 15 años sería inviable" porque "no se necesitaba". "Aunque fuésemos los mejores del mundo, nuestro despacho no tendría demanda en una ciudad como Plasencia", ejemplifica.

Hace 10 años, les resultaba "casi imposible" encontrar perfiles profesionales que hablaran inglés. Hace siete u ocho años, vieron claro que sus servicios se diferenciaban por eso vocación internacional. En los últimos tres años, vieron una aceleración debido al interés de las tecnológicas. Hoy, animan a todos los sectores a reenfocarse porque "la transformación de Málaga afecta a todos" e incluso a replicar el poder de atracción que se ha dado en lo tecnológico a otros sectores, como el financiero.

"Tener la opción de desarrollar tu carrera profesional al más alto nivel en tu ciudad es una gran oportunidad. Ante no se podía hacer"

"Es un ecosistema vivo y con mucha salud que, por supuesto, hay que cuidar; pero que tiene un potencial estupendo. Para los estudiantes malagueños, para los que somos de aquí, tener la opción de en tu ciudad desarrollar tu carrera profesional al más alto nivel es una gran oportunidad. Son trabajos que antes no se podían hacer porque no existían aquí", reflexiona. Las empresas que han llegado "necesitan tener una red de servicios que antes no existía", lo que supone "una transformación integral" de Málaga.

"Me parece un privilegio poder desarrollar un trabajo de alta cualificación desde mi propia ciudad. Hace unos años, cuando éramos más jóvenes, pensábamos que este tipo de trabajo solo lo podríamos tener en Madrid o una gran capital", concluye Diouri: "Y, si sabemos mantenerlo, nuestros hijos van a tener incluso más oportunidades".