Legionarios saludan a un pequeño ingresado en el Materno en Málaga.
Emotiva visita de los legionarios y la Congregación de Mena al Hospital Materno Infantil de Málaga por Semana Santa
Han dado palabras de ánimo a todos los pacientes y han hecho un recorrido especial por la planta de Oncología.
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Una mañana cargada de emoción y esperanza se ha vivido este lunes en el Hospital Materno Infantil de Málaga. Como parte de una tradición ya consolidada durante la Semana Santa, pacientes pediátricos y sus familias han recibido la entrañable visita de miembros de la Legión Española y de la Congregación de Mena, acompañados por autoridades sanitarias y profesionales del hospital.
Este acto, que cumple ya siete ediciones, se ha convertido en un esperado encuentro que brinda consuelo y alegría a quienes no pueden vivir la Semana Santa desde las calles.
La jornada ha comenzado con la recepción institucional, en la que han participado el director gerente del Hospital Regional Universitario de Málaga, José Antonio Ortega, junto al delegado de Salud y Consumo, Carlos Bautista, y varios miembros del servicio de pediatría. También han estado presentes el Hermano Mayor de la Congregación de Mena, Antonio de la Morera, y el general de la Legión Española, José Agustín Carreras Postigo, entre otras personalidades.
Un legionario da la mano a un niño ingresado.
Durante la visita, los legionarios de la Brigada Rey Alfonso XIII han recorrido la planta de oncología infantil, compartiendo mensajes de ánimo con los pequeños pacientes y saludando afectuosamente a sus familiares. Posteriormente, han continuado su recorrido por la primera planta, donde el ambiente se ha llenado de sonrisas, fotografías y emotivos gestos de cercanía.
“Para nuestros profesionales y pacientes, esta visita anual es un verdadero honor. La presencia de la Legión y la Congregación de Mena trae momentos de ilusión y fe a quienes, por motivos de salud, no pueden estar fuera disfrutando de la Semana Santa. Siempre estaremos agradecidos”, ha señalado José Antonio Ortega.
Además, como parte de esta iniciativa, algunos niños que estuvieron ingresados en años anteriores y que hoy se encuentran recuperados han sido invitados, junto con sus familias, a presenciar un solemne cambio de guardia al Cristo de la Buena Muerte en la Iglesia de Santo Domingo. También se ha extendido la invitación a profesionales del hospital, reforzando así los lazos de unión y gratitud entre ambas instituciones.
Una tradición que, más allá del acto simbólico, deja una huella profunda en quienes la viven desde el corazón del hospital.
