Dani Fernández desata a su jauría y Siloé desnuda su verdad al conquistar el ecuador del Brisa Festival

El sol brillaba en lo más alto del cielo cuando las puertas de esta edición del Brisa Festival se abrieron por segunda vez este pasado viernes. Nadie quería perderse esta jornada. El cartel prometía y cumplió con Califato 3/4, Zahara, Dani Fernández y Siloé los más esperados.

La música arrancó en el Escenario Victoria de la mano de Meliflou y Alberttinny. En el escenario Málaga estuvieron Ignorantes y Polarnova. En el escenario Mini Solzimer y Moon Orchard.

Ya a las 20.00 horas llegó el turno de Califato 3/4 uno de los más esperado de la jornada. La banda de música andaluza desplegó todo su arsenal para ofrecer un espectáculo repleto de folclore y electrónica.

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Y como punto y final, los andaluces cantaron a todo pulmón en el Dique de Levante el Himno de Andalucía. Justo cuando Califato se despidió en el escenario Málaga comenzó la actuación de Detergente Líquido.

Con la puesta de sol de telón de fondo y el mar Mediterráneo en primera fila, a las 21.30 horas, puntual a su cita con Brisa Festival, llegó al escenario principal Zahara para darlo todo ante un público que no dudó en caer rendida a sus pies desde el momento en que puso un pie sobre las tablas malagueñas.

Dando un recorrido por su repertorio llegó a colarse en un baño público, donde guitarra en mano, protagonizó uno de los momentos más especiales y emotivos de su concierto. Interpretó su tema Con las ganas con toda Málaga de coro.

Y lo fuerte llegó cuando el reloj marcó 23.20 horas y le tocaba salir a Dani Fernández. Nadie quería perderse la jauría de uno de los grupos del momento que empezó a lo grande interpretando Joderme la vida.

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Estaba fuera de control y así lo demostró interpretando Clima Tropical, Dile a los demás y Si tus piernas, para segundos después hacer vibrar a toda Málaga con Suéltate el pelo.

"Siempre es un placer volver a Málaga", aseguraba el manchego tras recordar que hace unos años aterrizó en la ciudad con su banda para cantar en salas y ahora se sube a las tablas de un escenario malagueño, donde miles de personas se dejan la voz en cada una de sus canciones.

Durante su show no se olvidó de una de las personas más importantes de su vida: su hija Belice. A su pequeña bebé le dedica en cada concierto Solo tienes que avisar porque llegó para salvarle y él estará toda la vida "cediendo a todo lo que te haga disfrutar".

Con Todo Cambia y Plan fatal hubo saltos de alegría y lágrimas porque le escuchaba susurrar que esto no acaba mientras revelaba que ha sido un año de mierda, pero que tiene un plan que va a sonar fatal porque es un Sin vergüenza que baila en la estación de tren cada vez que interpreta su tema con Arde Bogotá.

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Así fue dejando sin voz poco a poco a todos los asistentes. Los niños de la ciudad se volvieron locos con el homenaje a Supersubmarina, gritaron al ver a Dani acercarse a su público con Bailando y enterneció a todo el mundo al subir a cuatro niños a cantar Me has invitado a bailar.

Las luces del escenario se apagaron, pero pocos fueron los que se movieron de su sitio. Siloé llegaba a las 1.25 horas. Los malagueños habían sido convocados a una noche histórica y solo necesitaban sus voces y sus manos.

Siloé arrancó su show repleto de verdad puntual y se rindieron ante tres chavales de Valladolid que dejaron claro que no iban a salir de ahí "ni aunque recen todos los santos, ni aunque venda y ardan mis campos" en su tema Reza por mí.

Y es que pese a que las fieras no tienen apetito, como cuentan en Que merezca la pena, prefieren seguir preguntándose en "¿Qué tal si mandamos a todos a tomar por culo?" con su Si me necesitas, llámame.

El final de su show llegó así. De la mano de Si me necesitas, llámame y Todos los besos porque el concierto se le fue de las manos con Fito, vocalista, terminando el concierto a pie de pista y dejando bien claro a todos los malagueños que si los necesitan, no solo tienen que llamarlos sino gritarlo muy alto.