
Estación 'fantasma' de Chamberí. Europa Press
Ayuso 'arreglará' la estación fantasma de Metro: se gastará hasta 203.000 € para frenar los daños por inundaciones
La Consejería de Transportes licita un contrato para las obras de restauración de la histórica estación de Chamberí, cerrada en 1966 y convertida después en museo.
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Basta con bajar unos escalones para 'viajar' al Madrid de mediados del siglo XX. La estación de Metro de Chamberí se inauguró en 1919 como parte de la primera línea del suburbano. La parada se quedó anclada en 1966 porque dejó de encajar en los planes de la compañía para aumentar la capacidad de pasajeros. Con el tiempo, se restauraron sus muros, las bóvedas y los carteles publicitarios de cerámica de la época y se convirtió en museo. Para "evitar las filtraciones y el consecuente deterioro" de la estación, el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso está licitando las obras para darle un 'lavado de cara' a este histórico rincón de la ciudad.
Así consta en la documentación del concurso que la Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras -departamento del que depende la empresa pública- anunció en abril. Los trabajos, en concreto, corregirán las "disfunciones patentes" en la superficie de los paramentos y bóvedas del vestíbulo, de los pasillos y de los andenes. Con ello, se mitigará el "deterioro sufrido" por el "efecto de las inundaciones y por el paso del tiempo".
"El agua afecta a algunos elementos, por lo que hay que hacer distintos trabajos en revestimientos, azulejos, molduras, alicatados… Debido a la poca capacidad de intervención en la estación para no modificar la configuración inicial, por ser de gran valor histórico y tratarse de un museo, es importante hacer este tipo de trabajos para mantener la estación de Chamberí en el mejor estado posible", detallan fuentes de Metro. Se trata de labores que se realizan "de forma periódica".

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La actuación cuenta con un presupuesto base de 203.355 euros. Esta cantidad es la máxima que podrá comprometer el Ejecutivo madrileño en esta ocasión. Los interesados tuvieron hasta el 6 de mayo para presentar sus ofertas. Una vez adjudicado el contrato, la firma contratada tendrá ocho meses para realizar las obras.
Este mismo jueves, el Partido Popular preguntará en el pleno mensual de Chamberí sobre las "distintas obras" que se van a llevar a cabo en la famosa estación fantasma. Cabe recordar que el espacio está abierto al público en forma de museo gratuito. Se puede visitar los viernes, los sábados y los domingos.
La estación fue diseñada por Antonio Palacios, el arquitecto más representativo de la época en Madrid y uno de los más influyentes de España. Para Chamberí, optó por una "solución muy funcional y simple", con unos "acabados sencillos", detalla el suburbano.
La razón del cierre de la parada de Chamberí fue el plan de ampliación de andenes de la Línea 1 para aumentar el número de vagones a seis unidades. La configuración de Chamberí -con una curva pronunciada y una fuerte rampa de salida-, así como su proximidad a las estaciones de Bilbao e Iglesia, hicieron "imposible" esa ampliación. "Por esta razón se mantuvo prácticamente intacta, como si el tiempo se hubiera detenido", se explica en un 'Madrid Metrópoli. El sueño de Antonio Palacios', un libro recién publicado por el Ayuntamiento y la Comunidad dedicado al legado del arquitecto gallego.