Enrique Santiago arrincona a Podemos ante el "gran liderazgo" de Díaz en la izquierda

Santiago, que comparte carné comunista con Díaz, ha llamado a "construir una unidad que sea amable, con métodos de funcionamiento colectivos", y que "pueda hacer que la gente se identifique con los mensajes", sin que "cada quien trabaje de forma diferenciada" y lejos de "individualismos".

Ahora bien, pese a su tono conciliador y optimista, el recién estrenado líder de IU ha hecho un llamamiento a "proteger mucho" el "gran liderazgo" de la líder de Sumar. "Lo dicen las encuestas, lo dice la calle...", ha apostillado sobre el rol de Díaz. "Ha demostrado que sí se pueden cambiar las cosas, mejorar la vida de los trabajadores, subir el Salario Mínimo... Un trabajo que tiene unos efectos concretos, que da seguridad a la gente (...). Eso da liderazgo", ha señalado.

Esta semana, precisamente, comienza la recta final de la negociación para lograr una candidatura unitaria para las próximas generales. El próximo 9 de junio vencerá el plazo marcado por la ley para que ambas fuerzas registren un acuerdo para acudir al alimón a las elecciones. La ministra de Trabajo se mostró, hace varios días, optimista. El pasado viernes trasladó un "mensaje de confianza": "Habrá acuerdo".

Ahora bien, de alcanzar un pacto, se prevé una intensa pugna por los nombres que conformarán (y los que no) las listas electorales (y su orden y proporción). El reloj corre.

"Yo creo que aquí todo el mundo sabe que lo importante es el acuerdo general y que las individualidades no pueden ser nunca problemas", ha asegurado el también líder del Partido Comunista de España (PCE), que ha recomendado evitar las filtraciones a los medios de comunicación durante la negociación.

A su juicio, el "ruido" ha penalizado a la izquierda. Ha puesto como ejemplo el resultado de las formaciones de izquierda en los comicios autonómicos en Navarra y Asturias, donde, según su análisis, el espacio político al que aspira aunar Sumar no solo no ha retrocedido, sino que incluso "ha avanzado".

Pese a las discrepancias entre los grupos políticos —y las delicadas relaciones entre Díaz y las ministras Ione Belarra e Irene Montero—, Santiago se ha mostrado optimista. Ha asegurado que existe una "dinámica de amplísimo acuerdo" para conformar "un proyecto donde la ciudadanía se identifique".

"Siempre puede quedar, a lo mejor, alguna fuerza política que le cueste más o menos incorporarse... Ojalá no pase eso, pero yo, francamente, creo que lo esencial ya lo hemos conseguido", ha manifestado en TVE. "La sociedad lo va a premiar", ha pronosticado, antes de señalar que la "amplia voluntad de acuerdo" permitirá "salir a ganar esas elecciones generales" y "combatir la abstención", que, precisamente, perjudicó a Podemos en los comicios municipales y autonómicos.

Pese al buen tono desplegado en la entrevista, la hemeroteca reciente da fe de ciertas tiranteces entre Santiago y Podemos. En julio del pasado año, la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, le cesó como su número dos en el ministerio que encabeza, el de Derechos Sociales y Agenda 2030. El dirigente comunista aseguró que no se esperaba su destitución. Fue sustituido como secretario de Estado por Lilith Vestrynge, actual secretaria de Organización de Podemos.

Tras la dimisión de Alberto Garzón —oficializada este domingo—, Santiago le sustituirá como coordinador federal de Izquierda Unida. Cuando Sumar fue presentado el pasado febrero —como una plataforma, antes de convertirse en un partido— y Yolanda Díaz explicitó su intención de presentarse a las elecciones generales, Enrique Santiago abroncó a los líderes de Podemos en Madrid por no acudir a aquel acto.