La Policía detiene al hacker que filtró de forma masiva datos sensibles de Pedro Sánchez varios ministros y la directora del CNI
Detenidos dos hackers menores de edad que filtraron datos personales de Sánchez, sus ministros y la directora del CNI
La investigación de la Audiencia Nacional ha finalizado con el arresto de dos menores de edad, los ciberdelincuentes que respondían al alias de N4t0x.
Más información: La Audiencia Nacional investiga bajo secreto una segunda filtración de datos personales de Pedro Sánchez
La Policía Nacional acaba de detener a dos hackers menores de edad como presuntos responsables de la filtración masiva de datos personales del Pedro Sánchez, los ministros José Manuel Albares y Margarita Robles, la directora del CNI, Esperanza Casteleiro, su mano derecha en los servicios de inteligencia y altos cargos de la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Según confirman a EL ESPAÑOL fuentes jurídicas, policiales y de los servicios de inteligencia, las diligencias que se abrieron hace 17 días en la Audiencia Nacional han finalizado con el arresto de estos dos jóvenes, que actuaron bajo el alias de N4t0x.
Según las fuentes consultadas, la investigación ha sido vertiginosa: los especialistas en ciberseguridad de la Policía Nacional querían neutralizar cuanto antes esta amenaza.
Uno de los menores detenidos es de Albacete y el otro de un municipio de Cataluña.
La fuga de datos que ahora ha llevado a la detención de los dos menores fue difundida por primera vez en el canal de Telegram llamado SpainData el jueves 18 de septiembre a las 19:24 horas, según ha podido comprobar este medio.
La acción la reivindicaba la cuenta hacker N4t0x con el siguiente comunicado: "Este mensaje no es para buscar sonido ni para salir en titulares. Es una advertencia clara: la corrupción y la falta de ayudas han llevado a esta filtración. El pueblo exige transparencia y justicia. Vuestras acciones tienen consecuencias".
La filtración se produjo en otro pequeño canal de Telegram este mismo fin de semana. Entre los datos que quedaron expuestos figuraban el DNI del presidente del Gobierno y sus familiares más directos.
Direcciones, teléfonos...
A su vez, los dos menores, bajo el citado alias, propagaron en su filtración el DNI, la fecha de nacimiento y el domicilio de la ministra de Defensa, Margarita Robles. También la dirección del ministro de Exteriores, además de su anterior dirección y su número de teléfono.
En la fuga de datos figuraba también la fecha de nacimiento y domicilio de la directora de los servicios de inteligencia. De su número dos, el subdirector del CNI, Luis García Terán, filtraron su teléfono móvil.
A su vez, la brecha de seguridad expuso información sobre políticos del PSOE, PP, Vox, Sumar, EH Bildu y Podemos.
La misma fuga ha afectado igualmente al director de la Policía Nacional, Francisco Pardo, el excomisario de la Comisaría General de Información, Eugenio Pereiro, recién nombrado número tres del Ministerio del Interior. Toda esa información sensible expuesta en las redes ha supuesto una brecha en el ámbito de la seguridad nacional.
El juez Antonio Piña, titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, fue el encargado de ordenar la investigación el pasado 22 de septiembre, al recibir el atestado policial del caso cuando estaba de guardia.
Tras el turno de reparto, las diligencias recalaron en el Juzgado de Instrucción nº1 de la Audiencia Nacional, cuyo titular es el juez Francisco de Jorge.
Este mismo juez es el que investiga otra fuga similar de datos del presidente del Gobierno, de la vicepresidenta María Jesús Montero y de los ministros Fernando Grande-Marlaska, Félix Bolaños y Luis Planas.
En esa ocasión, los datos los captaron Akkaspace y Pakito. Estos son los alias de dos de los tres hackers que están siendo investigados en ese procedimiento. Rápidamente los agentes actuaron y los arrestos se produjeron el 26 de septiembre.
En un primer momento, dada la cercanía con otros episodios protagonizados por hackers rusos, los investigadores buscaron en la ciberbanda Noname 057, el mayor grupo hacktivista al servicio de Vladímir Putin.
Pero esa vía de investigación fue descartada a los pocos días, tras hallar la verdadera identidad de los autores de la filtración. Estos, llegaron a amenazar a varios diarios digitales, incluido EL ESPAÑOL, por informar del hackeo.