Margarita Robles reajusta el CNI para adaptarlo a la nueva geopolítica tras la invasión de Ucrania

El escenario geoestratégico mundial ha experimentado en los últimos años una transformación completa que ha obligado a someterse a un proceso de adaptación a todos los actores geopolíticos. Estos cambios se han acelerado en los últimos tres años a raíz de la pandemia de la Covid-19 y la invasión de Ucrania por parte de Rusia. 

En un entorno mundial más volátil, que se modifica de manera vertiginosa, el Gobierno ha decidido impulsar una remodelación del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) propiciada por la ministra de Defensa, Margarita Robles. La finalidad de esta reorganización es la de adaptarse a todos los cambios que se están produciendo y hacer frente de manera sólida y fiable a las amenazas que debe afrontar cualquier estado del siglo XXI.

Los servicios secretos venían desarrollando desde hace ya tiempo un programa de transformación digital para contar con mejores capacidades a la hora de obtener información y analizarla. Los perfiles que entran al Centro, a la casa de los espías, se han diversificado para anticiparse a los nuevos retos y a los cambios también aplicados por los enemigos. 

Pero ahora, el último paso que da Defensa en esta dirección es el de reorganizar la estructura interna de los servicios de inteligencia. Así lo ha anunciado este lunes la ministra de Defensa, Margarita Robles, en una visita que ha realizado al CNI. 

Para ello, se cambia organización del centro creando los llamados "Centros de Misión". Se trata de "unidades específicas adaptadas a los objetivos establecidos por el Gobierno" en las directivas de inteligencia. El cometido final es optimizar el trabajo de los espías y mejorar los resultados obtenidos en los últimos años. “Vivimos en un país más seguro y en una sociedad más segura gracias al esfuerzo que se hace aquí”, ha dicho la ministra.

La reorganización

Los "Centros de Misión" son equipos de trabajo integrando distintas capacidades y por ámbitos concretos, según apuntan fuentes de Defensa. Durante una presentación en la sede de los servicios secretos, la secretaria de Estado directora del CNI, Esperanza Casteleiro, ha mostrado su confianza en que un mayor conocimiento sobre el
“encomiable” trabajo de su personal, cuya identidad e imagen debe permanecer
preservada, permita un mayor conocimiento de su labor a la sociedad.

“Los servicios de inteligencia son un elemento fundamental de una sociedad democrática. Contribuyen con su trabajo a la labor preventiva del Gobierno, a defender los intereses nacionales, a salvaguardar los derechos y libertades de los ciudadanos, así como su bienestar y su progreso”, ha explicado.

La directora del CNI ha destacado que el cambio y la evolución del escenario
geoestratégico mundial determinan los riesgos y amenazas "hacia los que debemos
volver nuestros ojos". Ha asegurado que "la principal obligación de un servicio de
inteligencia es conocer con el mayor grado de exactitud, las amenazas que debe
combatir para disminuir la vulnerabilidad ante ellas. Detectar los riesgos, anticipar sus efectos y contribuir a neutralizarlos para limitar el impacto. A ello dedicamos todos nuestros esfuerzos".

También acudió a la visita de la ministra el secretario general del CNI, Arturo Relanzón, quien detalló que el proceso de transformación digital del Centro está a punto de concluirse. Esta modificación ha permitido incorporar las nuevas tecnologías al trabajo diario del CNI.

"El mundo está cambiando de una forma muy rápida", dijo Relanzón. "No solo estamos viendo ahora la invasión de Ucrania por parte de Rusia, hemos pasado por una pandemia, dinámicas tremendamente fluidas y el centro se tiene que adaptar a ellas".

4 áreas

El CNI mantendrá su despliegue interior e internacional de forma permanente. Los principales ámbitos en los que trabajan ahora los agentes de inteligencia son la inmigración ilegal (las redes de tráfico de personas, concretamente), el ámbito del contraterrorismo, el de la contrainteligencia y el de la contraproliferación. En total, a esa tarea se dedican un total de 3.000 personas cuyo 76% proceden del mundo civil, un 18% de las Fuerzas Armadas y un 5% de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Durante la jornada, se ha celebrado también una exposición por parte de un responsable del Centro Criptológico Nacional, organismo adscrito al CNI responsable, entre otros cometidos, de combatir las ciberamenazas, de coordinar la acción de los diferentes organismos de la Administración que utilicen medios o procedimientos de cifra, garantizar la seguridad de las Tecnologías de la Información y formar al personal de la Administración especialista en este campo.