Mohamed VI y el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz.

Mohamed VI y el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz.

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Rabat desplegará misiles israelíes en El Estrecho en respuesta al refuerzo militar español en la zona

Marruecos estudia llevarlos a las zonas de Tánger y Nador para tener un mayor control marítimo de toda el área.

12 diciembre, 2021 06:50
Túnez

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Marruecos va a mostrar músculo militar en El Estrecho de Gibraltar en respuesta a lo que entiende es un mayor control del Ejército español en los cinco territorios del norte de África: las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, el peñón de Vélez de la Gomera, el peñón de Alhucemas y el archipiélago de las Islas Chafarinas.

Tras la llegada de un grupo de personas migrantes de origen subsahariano a las Chafarinas, el Ejército español realizó patrullas en la zona. Además, el Estado Mayor compartió fotografías en las redes sociales, lo que se interpretó en Rabat como una forma de confirmar su dominio.

Por su parte, el Ejército de Tierra licitó en junio un contrato para adquirir tres mástiles de antenas para los centros de comunicaciones de los peñones en El Estrecho.

Con la entrada de miles de ciudadanos desde Castillejos a Ceuta en mayo, España también reforzó militarmente esa frontera, con los permisos pertinentes.

En el lado marroquí, el delirio ha llegado incluso en forma de mensajes, difundidos por WhatsApp del estilo de: "Recibimos de fuentes muy privadas que agentes de inteligencia marroquí descubrieron laboratorios secretos en las islas Chafarinas, donde el Gobierno español está desarrollando tipos de gérmenes, microbios y virus con fines militares utilizados en la guerra biológica".

Expertos en Defensa consideran que, por su posición clave, toda el área de El Estrecho es vital para recopilar inteligencia. Así, Marruecos acelera un acuerdo con Israel para el control marítimo con los misiles Rafael, que irán destinados a las regiones de Tánger y Nador, para de esta manera poder dominar también el mar de Alborán.

La industria aeroespacial israelí recibió 22 millones de dólares este año como parte de un acuerdo militar con Marruecos, según publicó el diario Haaretz. Además de los drones israelíes, a Rabat le interesan misiles de quinta generación para el control por vía marítima y terrestre de toda la zona colindante con Ceuta y Melilla.

Hasta Andalucía

El Sea Breaker, el último misil antibuque de la compañía de defensa israelí Rafael Advanced Defensa Systems, estuvo en exhibición en la exposición de la industria de Defensa DSEI-2021, en septiembre en Londres. Es un sistema de misiles de ataque naval autónomo de largo alcance guiado con precisión que permite la intervención del operador en cualquier etapa. Con su seguimiento del terreno y su vuelo de bajo nivel, también puede hacer un ataque en tierra profunda.

"Al abordar los complejos desafíos de la guerra moderna, ofrece ataques precisos desde distancias de separación de hasta 300 kilómetros contra objetivos marítimos y terrestres de alto valor con una alta velocidad subsónica. Sea Breaker es una solución altamente efectiva en escenarios complejos de Anti-Acceso/Anti-Negación, incluso bajo condiciones severas de guerra electrónica y denegación de GNSS", precisa la empresa Rafael.

El Spike NLOS es otro misil de quinta generación desarrollado por Rafael que puede acertar blancos a 32 kilómetros de distancia. Sirve para la protección costera, tanto en tierra como en mar. La empresa especifica que "permite la identificación visual positiva del objetivo y el ataque de precisión a distancias extendidas y más allá de la línea de visión contra objetivos marinos y en tierra".

Los Spike utilizados por 33 naciones, se encuentran entre las soluciones antitanques más probadas en combate del mundo. Adecuado para plataformas terrestres, aéreas y navales.

Con estos misiles, en un mapa de simulación de operaciones al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, el margen de maniobra alcanza a buena parte del sur de la comunidad autónoma de Andalucía.

En todo caso, en España, el Ejército de Tierra y la Infantería de la Marina cuentan desde hace años con misiles Spike, los modelos Long Range (LR) y Extended Range (ER); y podría adquirir la variante mejorada LR2, según publicó el sitio especializado defensa.com.

Desde luego, El Estrecho, área estratégica de importancia global, es deseado por muchos países, y Marruecos quiere controlar, al estilo aduanas, quiénes transitan al norte del país. Por sus aguas circula el 10% del tránsito marítimo global, más de 100.000 embarcaciones al año. Además, hay que tener en cuenta que es una de las rutas preferidas del crimen organizado.

Este año, con el bloqueo de Canal de Suez, se convirtió en la única vía de suministros por mar de todos los países cuya única salida al Océano es el Mediterráneo. Para España es de suma importancia, porque es el canal de comunicación marítima de las Islas Canarias con la península y las Islas Baleares.

El control de esa área no solo se lo disputan España y Marruecos, entra en juego también Reino Unido a través de Gibraltar.

De hecho, en la ecuación de cooperación militar y de seguridad entre EEUU, Marruecos e Israel se ha colado Reino Unido, que presta ayuda al país magrebí, después de cerrar acuerdos de diferente índole en los dos últimos años. Según adelantan a EL ESPAÑOL, hay pendiente un acuerdo en materia de Defensa por el que Reino Unido cederá un submarino a Marruecos al renovar su material militar. Será el primero que reciba, e irá destinado al control de El Estrecho.

Firmeza de España

Por su parte, "la voluntad de España para proteger sus territorios extrapeninsulares situados en el norte de África no ha flaqueado nunca (…) España se ha mantenido firme en las dos ciudades y en los otros tres territorios, y ello a pesar de las vicisitudes pasadas", mantiene el profesor de Relaciones Internacionales Carlos Echeverría, director del Observatorio de Ceuta y Melilla, en las conclusiones del informe Las raíces históricas de Ceuta, Melilla y el resto de territorios españoles del norte de África.

Esto quedó en evidencia con el incidente de la Isla de Perejil en 2002, e igualmente en el mes de mayo cuando Marruecos relajó las fronteras y entraron entre 12.000 y 13.000 ciudadanos desde Castillejos a Ceuta, según datos de la Delegación del Gobierno. Varios ministros, y el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se presentaron en las ciudades autónomas.

Lo mismo ha ocurrido con la piscifactoría que Marruecos ha puesto en marcha a unos metros de las Chafarinas, "en aguas territoriales españolas sin los permisos necesarios para esa actividad", mantiene el ministro de Exteriores desde Madrid a EL ESPAÑOL. Además, el departamento de José Manuel Albares, que envió una "nota verbal" a la embajada marroquí en Madrid, incide en señalar que es "un territorio adscrito a Defensa".

Ahora queda escuchar al ministro español el 16 de diciembre, que comparecerá, para hablar de las relaciones con Marruecos. Sobre todo, lo relacionado con las aguas canarias, parte de las que Rabat considera suyas tras la aprobación de dos leyes de ampliación de la Zona Económica Exclusiva y la Plataforma Continental.

Después de esta polémica, uno de los laboratorios científicos de la facultad de Ciencias Jurídicas en Marrakech organizó dos jornadas de estudio para debatir sobre la demarcación de las fronteras marítimas en la cuenca mediterránea y la paz y la seguridad en la región.