El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en una imagen de archivo.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en una imagen de archivo. Efe

España piensan ya en términos electorales

Rajoy fija como objetivo Valencia y Cataluña para la cuesta de septiembre

El PP celebrará la escuela de verano del PP en territorio catalán días después de la Diada.

6 agosto, 2017 03:45

Tras el parón veraniego, el Partido Popular engrasará toda la maquinaria de cara a recuperar el poder perdido en las elecciones autonómicas y municipales de 2019. Sus objetivos fundamentales son dos: reconquistar la Comunidad Valenciana y asentarse en Cataluña para frenar las ansias independentistas de los que mantienen que habrá referéndum el 1 de octubre.

Mariano Rajoy y su equipo de dirección han organizado un encuentro interparlamentario para los días 1 y 2 de septiembre en la playa de la Patacona, en la localidad valenciana de Alboraia. En la cita, donde habrá representantes electos del PP de toda España, está previsto que intervenga el presidente del Gobierno. Antes, abrirá oficialmente el curso político el 26 de agosto en su tierra, Galicia, como ya es tradición.

Valencia se ha convertido en un feudo clave para los conservadores desde que en 2015 perdieron el Gobierno autonómico y la Alcaldía de Valencia. La relación entre la dirección nacional e Isabel Bonig, la actual presidenta del partido en la región, ha atravesado altibajos. En abril, la dirección regional del partido apoyó una declaración del Parlamento autonómico -que dirige el socialista Ximo Puig- contra "la marginación" de la Comunidad Valenciana en los Presupuestos de 2017. El gesto desató la ira en Génova.

Otro de los momento más tensos entre Bonig y la dirección nacional de su partido se produjo en primavera. Ante la imposibilidad de cerrar un acuerdo para celebrar el congreso del PP en la provincia de Valencia, Madrid optó por crear una gestora con el diputado nacional Rubén Moreno al frente. Desde entonces, las aguas han vuelto a su cauce, pero una de las grandes obsesiones de Génova es encontrar un perfil "potente" que encaje en el "hueco" que dejó precisamente la exalcaldesa Rita Barberá.

En la dirección nacional son conscientes de que hay comunidades, como la valenciana, donde reconquistar la capital supone también apuntalar el gobierno autonómico. En esa quiniela de nombres que todavía bailan destacan dos: el eurodiputado Esteban González Pons y la diputada autonómica María José Catalá.

Santamaría, de vacaciones en Cataluña

Sin perder de vista otras plazas a reconquistar, como Aragón y su capital (Zaragoza), Rajoy ha dado la orden a los suyos de asentarse en Cataluña de cara a hacer un frente común ante el 1 de octubre. Además de los viajes semanales de la vicepresidenta del Gobierno, que ha elegido Cataluña hasta para pasar las vacaciones en familia, el equipo más cercano al presidente -tanto del Gobierno como del partido- incluirá en sus agendas frecuentes desplazamientos hasta la región costera el mes previo al 1-0.

El evento más multitudinario se celebrará el fin de semana posterior a la Diada, el día en el que los independentistas quieren 'calentar' el ambiente de cara a la jornada del referéndum. El PP celebrará el 15 y 16 de septiembre su escuela de verano que centrará su debate en el desafío soberanista.

Robar votos a Cs

Los conservadores son conscientes de que una parte de la militancia de Cataluña se queja de que el PP y el presidente del Gobierno no han estado lo suficiente en la región y quieren combatir ese sentimiento. Además, en el partido quieren ganar la partida a Ciudadanos. El partido de Albert Rivera ha conseguido canalizar el voto indignado del catalán que se siente español en detrimento del PP, que se ha convertido en un partido insignificante en la región.

Con el desafío independentista más vivo que nunca, Moncloa y Génova diseñan una estrategia para matar dos pájaros de un tiro. Por un lado, se han propuesto neutralizar los planes de Carles Puigdemont y sus colaboradores y evitar por todos los medios que el 1 de octubre coloquen urnas para votar su referéndum. Por otro lado, si la estrategia de frenar a los independentistas les sale como esperan, confían en que ese éxito se traduzca en más votos en las elecciones catalanas que creen que se celebrará el primer trimestre de 2018.