Semillas de amaranto de El Granero, Biogran.

Semillas de amaranto de El Granero, Biogran. Biogran Cedida

Historias Día de la Gastronomía Sostenible

Cuidar la alimentación y el medioambiente: así es Biogran, la marca que apuesta por la gastronomía sostenible

La compañía abrió sus puertas en 1982 con el objetivo de promover una dieta consciente, saludable y que cuide tanto a las personas como al planeta.

Más información: La sostenibilidad y la alimentación van de la mano: el cambio puede estar en la comida

Mariana Goya
Publicada
Actualizada

Promover prácticas que respeten tanto el medioambiente como los recursos de la gastronomía. Esta es, en resumidas palabras, la clave de la alimentación sostenible.

'bio', eco, bajo contenido en grasas o en azúcares... Cada vez son más las opciones disponibles en los supermercados para quienes buscan una alimentación saludable, pero realmente ¿cuál es la diferencia entre todas ellas?

Si hablamos de reducción de azúcar o grasa puede que lo tengamos más claro, pero ¿y la alimentación ecológica? ¿Y la 'bio'? ¿Son lo mismo? ¿Sabemos realmente lo que estamos comiendo y el impacto que puede tener en nuestro organismo este tipo de dietas? ¿Y en el medioambiente?

Estas son solo algunas de las cuestiones a las que debemos hacer frente cada vez que nos situamos delante del pasillo de dietética o alimentación ecológica de los supermercados.

Por eso hoy, Día de la Gastronomía Sostenible, desde ENCLAVE ODS, aprovechamos para resolver algunas de estas preguntas.

¿Ecológico o 'bio'?

En la alimentación convencional, es decir, aquello que no cuenta con un etiquetado especial y lo que podríamos definir como 'lo normal' (para entendernos), hablamos de un cultivo en el que se emplean fertilizantes químicos sintéticos y pesticidas.

En este caso, los organismos modificados genéticamente están permitidos, y el método de producción se centra en maximizar los resultados y realizar monocultivos frecuentes.

Diferente es el caso de la alimentación ecológica y 'bio' (que son bastante similares entre sí). Aquí no está permitido el uso de químicos y pesticidas, y tan solo emplean fertilizantes naturales como estiércol, compost o rotación de cultivos.

Tractor en los Tomillares, campos de cultivo de Biogran.

Tractor en los Tomillares, campos de cultivo de Biogran. Biogran Cedida

Los organismos modificados genéticamente tampoco están permitidos en estos tipos de alimentación. Y, además, respetan los ciclos naturales, la rotación de cultivos y la mejora de fertilidad del suelo.

Y es que, si bien es cierto que no hay ningún inconveniente en seguir una alimentación convencional, a largo plazo, indica la nutricionista Vanesa León, sí podría impactar en el bienestar. "Los pesticidas se acumulan en el organismo y se relacionan con problemas de salud a largo plazo", afirma.

En lo que respecta a términos nutricionales, la experta asegura que "no hay cambios" a gran escala. Aunque los estudios sí han demostrado que en micronutrientes y antioxidantes lo ecológico y los productos 'bio' destacan sobre el resto.

Porque, como dice León, "si dejas descansar a las plantas, coger sus nutrientes del suelo, sobre todo a nivel antioxidante, se encuentra mayor carga". El secreto está en dejar que los cultivos "sigan su ritmo".

Guía de alimentación 'bio'

Es entonces, bajo la premisa de "no hay nada más sostenible que la alimentación sostenible", que Biogran abrió sus puertas en 1982 con el objetivo de promover una dieta consciente, saludable y que cuide tanto a las personas como al planeta.

Más de 40 años después, la compañía ha logrado convertirse en líder absoluto de mercado, tanto en Francia como en España, contando con una representación del 67% en el sector. Porque, como dice Teresa Vela, directora de marketing de Biogran, pese a ser "un player pequeño", son la cabecilla.

El bienestar es su máxima. En El Granero, por ejemplo, una de las marcas perteneciente al grupo de Biogran, defienden que "lo natural es disfrutar" y es precisamente esa la línea la que han seguido para desarrollar sus productos.

Y es aquí donde surge la pregunta: si nos gusta sentirnos bien y seguimos —o por lo menos creemos seguir— una alimentación consciente, ¿por qué desayunamos todos los días lo mismo?

La nutricionista Vanesa León asegura que pese a que se trata de una práctica que no está recomendada, está muy extendida. Sin embargo, ella define el desayuno es "un momento único" para empezar a nutrir el cuerpo y aportarle la energía que necesita.

Además, indica,  "no todos los miembros de una familia deberían desayunar igual, los niños no necesitan lo mismo que los adultos. Y en verano y en invierno tampoco debería ser la misma; hay que hacer una adaptación a la temperatura y a los alimentos de temporada".

El desayuno ideal

Entonces, ¿qué deberíamos desayunar? Esta ha sido la cuestión que se ha puesto Biogran como objetivo con motivo del Día de la Gastronomía Sostenible y así nos lo han hecho saber a ENCLAVE ODS. 

Nos reciben en el penthouse del Hotel Thompson, situado en plena Plaza del Carmen de la capital madrileña. Allí nos espera un desayuno delicioso, variado y, sobre todo, sostenible, realizado por la chef Clara P. Villalón. Pero, como bien dice León, cada persona debe adaptar esta ingesta a su momento vital.

Desayuno de Biogran creado por Clara P. Villalon.

Desayuno de Biogran creado por Clara P. Villalon. Biogran Cedida

Para quienes tengan un rendimiento cognitivo mayor, León indica que es importante incorporar omega-3, así como aportar proteínas y aminoácidos. Destaca especialmente el papel del cacao, los cereales, el té y las semillas de lino para "ayudar a que tu cerebro funcione perfectamente".

Si el rendimiento físico es mayor, es momento de incrementar el aporte energético y proteico. En este caso, León aconseja las semillas de cáñamo, porque su contenido en aminoácidos y proteínas es más elevado.

Para controlar el peso, la nutricionista indica que hay que moderar la ingesta calórica a través de, por ejemplo, bebidas sin calorías. Alimentos altos en fibra o antiinflamatorios naturales pueden ser los mejores aliados.

En los niños, lo ideal es mantener un equilibrio entre la vida activa y cognitiva porque, en su caso, necesitan energía sostenida. Aquí, León recomienda un desayuno rico en calcio, vitamina D o A y hierro.

En las personas de más de 55 años, León hace hincapié en la moderación calórica: "Si tu cuerpo va cambiando, tu alimentación debería ir adecuándose a tus necesidades". Porque, insiste, "a partir de cierta edad hay que revisar la inflamación y la oxidación".

En ese caso, recomienda la vitamina D, E o C, el zinc, el magnesio o los antioxidantes naturales. Por eso, alimentos como la fruta, la soja, las semillas o el AOVE podrán ser buenos aliados.