142 ejemplares. Ese es el número de visones europeos que quedan, mientras se escriben estas líneas, en España. Así lo confirma el último censo de este animal realizado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en colaboración con todas las administraciones de los lugares donde hay presencia de esta especie y expertos investigadores del CIBIO–Portugal y del IREC-CSIC.

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Son pocos los lugares del mundo donde se pueden encontrar visones europeos. Como su propio nombre indica, esta especie es endémica del Viejo Continente. Sin embargo, ya solo quedan unos puñados de ejemplares en un reducto de países. Es el caso de Rusia, Estonia —aunque de forma muy limitada y reintroducida en la isla de Hiiuma—, Rumanía, Ucrania o Francia.

En el caso de España, el poco más de centenar de visones europeos se encuentra disperso en el norte del país. En concreto, entre La Rioja, Navarra, País Vascos y, en menor medida, Castilla y León y Aragón. 

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En caída libre

En su conjunto, tal y como aseguran desde el MITECO, se estima que el área de distribución de esta especie ha caído en, al menos, un 95% desde mediados del siglo XIX. Y la población española de visón europeo ha seguido ese mismo patrón.

Tal y como recuerdan desde WWF en un comunicado, en España el número de ejemplares "se redujo a la mitad en menos de 15 años". En el año 2000, explican desde la oenegé, había cerca de 1.000 visones europeos en nuestro país.

Entre 2012 y 2014, la cifra ya había descendido a los 500. Una década después, el número de ejemplares de esta especie ha caído por completo en picado. 

En estado crítico desde 2018

Las cifras demuestran la delicada situación en la que se lleva encontrando el visón europeo desde principios del siglo XXI. Y precisamente por eso, explican en un comunicado desde el MITECO, España creo en 2005 una Estrategia nacional de conservación.

"Dado lo delicado de su situación, en 2008 se aprobó un Programa de conservación ex situ", añaden. En la actualidad, "dicho programa está proporcionando unas 20-30 crías anualmente que se liberan en el medio para reforzar las poblaciones existentes, distribuidas sobre todo en la parte alta de cuenca fluvial del Ebro".

Cifras que para WWF están "lejos de los objetivos previstos hasta la fecha". Además, insisten, "no se dispone del número suficiente de animales aptos para ser liberados al medio". 

Sin embargo, ninguna de las medidas fueron suficientes. Primero, en 2011, este animal fue catalogado como especie en peligro crítico de extinción en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).  En 2018 el visón europeo entró en el Catálogo Español de Especies Amenazas con la categoría de en peligro crítico de extinción.

Desde WWF recuerdan que las medidas de 'rescate' del visón europeo en España "no se han llevado a cabo con la agilidad suficiente y los esfuerzos para su recuperación han sido desiguales en el tiempo y en el área de distribución" del animal. El motivo, aseguran desde la oenegé ecologista, no sería otro que "la falta de coordinación y de voluntad por parte de las comunidades autónomas".

Según la oenegé, existe un "riesgo real" de que esta especie "desaparezca en solo 5 años". De ahí que, como pide Juan Carlos del Olmo, secretario general de WWF España, sea necesario que se pongan "los recursos humanos y económicos suficientes". 

Además, Del Olmo insiste en que el MITECO debe liderar "la coordinación de su recuperación". Solo así, dice, "podremos salvar in extremis al visón europeo de la extinción". 

En jaque por una especie invasora

Como ya se explicó en ENCLAVE ODS, la principal amenaza para el visón europeo, más allá de la destrucción de su hábitat, es la proliferación de su primo-hermano: el visón americano. Una especie, además, que entra en Europa en la década de 1920 para suministrar las granjas de cría para fabricar abrigos y artículos de piel. 

En España, durante los años de cría intensiva, llegaron a convivir más de 300 granjas de visones americano. Hoy en día, apenas quedan 27 activas, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. De ellas, 24 se encuentran en Galicia, y las otras 2 en Ávila y Castellón.

La cría de visón americano ha acabado introduciendo a esta especie, ya considerada invasora, en los ecosistemas. Ya fuera a través de fugas o escapes accidentales o intencionales, estos animales se fueron abriendo camino donde antes había visones europeos en libertad. 

Precisamente por ello fue incluido, a través del Real Decreto 630/2013, en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras. En la actualidad, se estima que puede haber más de 30.000 ejemplares, distribuidos en alrededor de 12.530 km de ríos en todo el territorio español.