El 'Solidarity Xmas Tree' llega a Madrid para llenar la ciudad de árboles solidarios.

El 'Solidarity Xmas Tree' llega a Madrid para llenar la ciudad de árboles solidarios. iStock

Historias

'Solidarity Xmas Tree' llega a Madrid: árboles de Navidad de lujo y solidarios

Bettina Farreras fundó este evento solidario para repensar la manera en que las marcas expresan su espíritu navideño. Este año, el evento se celebra por primera vez en Madrid.

22 noviembre, 2021 01:41

Todos los días tenemos miles de pensamientos. Unos 60.000, según explican los expertos, pero sólo algunos de ellos se unirán en forma de idea. De todas esas posibles ideas, unas pocas se llevarán a cabo por diferentes razones.

Un día de 2017, Bettina Farreras, una directiva del mundo de la publicidad que había trabajado durante décadas llevando el timón de Bassat Ogilvy, estaba hablando con una amiga por teléfono.

“En esta época mi experiencia era la que era, trabajando con marcas de lujo, pero quería hacer algo que tuviera un impacto social”, explica Farreras. “Esta amiga me contó que donde ella estaba, en Saint Moritz, había empresas que ponían regalos benéficos en los árboles de Navidad".

En ese preciso instante un pensamiento se materializó en algo más: "Tuve un impulso, una visión, y le dije que habría que llevar esta idea a algo con más identidad y con más fuerza", cuenta. Y especifica: "¿Por qué no proponer a diferentes marcas que crearan árboles navideños a partir de sus valores?".

El diseño del árbol de Salvatore Ferragamo

El diseño del árbol de Salvatore Ferragamo

Breve historia del árbol de Navidad

No existe una cronología exacta, pero probablemente los primeros árboles de Navidad surgieron en Alemania en el siglo XVII o antes, dice la tradición, cuando un panadero colgó dulces sobrantes en un pino de la plaza y permitió a los niños que los cogieran el día 25.

Llegaron a Inglaterra a principios del siglo XIX, donde el príncipe Alberto colocó el primero, según marca la historia, en el castillo de Windsor en 1841.

A España se cuenta que fue a finales del siglo XIX cuando llegó esta costumbre importada por una princesa viuda de origen ruso que había residido en Inglaterra. Se volvió a casar con un noble español y colocó el primer árbol en el palacio de Alcañices en la Navidad de 1870, precisamente en la calle Alcalá, cerca del actual edificio en el que se encuentra el hotel Four Seasons.

Lo cierto es que Farreras, tras dos décadas trabajando con marcas de lujo, le dio vueltas durante meses a cómo su proyecto podría tener verdadero impacto y alcance. En ese mismo 2017, Farreras fundó Solidarity Xmas Tree para repensar la manera en que las marcas expresan su espíritu navideño.

“Los primeros años siempre son los más difíciles”, explica. Pero se muestra optimista: “La acogida fue muy buena desde el principio”.

Un proyecto que se amplía

Durante cuatro años, llevó a cabo el proyecto a favor de dos fundaciones, Pequeño Deseo y Pasqual Maragall en Barcelona, en el Hotel Majestic del Paseo de Gracia, donde se exponían los árboles.

Ahora, en su quinto aniversario –y por primera vez–, el evento se celebra en Madrid. A partir del 22 de noviembre las marcas mostrarán sus árboles en sus respectivas tiendas. Hay, incluso, una ruta que puede realizarse y en la que se sortean premios.

Además, desde la mañana del 30 de noviembre, estos árboles engalanados se trasladarán al hotel Four Seasons, donde se celebrará una cena de gala y subasta a favor de dos fundaciones. Una de ellas, muy conocida: Banco de Alimentos. La otra, Asociación Norte Joven, “no tan mediática, pero con una labor impresionante por las oportunidades que dan a la formación de oficios”, explica la fundadora de esta iniciativa.

"Muchas marcas de lujo son solidarias, pero por su cultura empresarial no lo suelen contar", asegura Ferraras

El equipo del proyecto ha crecido durante el último lustro: cuenta ahora con un comité asesor de personas “muy implicadas e ilusionadas” y muy conocidas, como Nieves Álvarez, Beatriz Ordovás, Cristina Oria, Cristina Valls Taberner, Paula Quinteros, Andrea Soler Roig y Ana Seguí.

El equipo de trabajo está formado por Anabel Zamora como persona clave, junto a Meya Lauzirika, Susana Haro y Mónica Alcalá, que pone el foco especialmente en la coordinación y en la transparencia en todo el proceso con marcas y fundaciones.

Su directora explica cómo, a su parecer, "muchas marcas de lujo son solidarias de diferentes modos, pero por su cultura empresarial no lo suelen contar". Y lo explica: "Desde luego está su contribución al mantenimiento de artesanía y el número de puestos de trabajo que ofrecen, pero también suelen apoyar esfuerzos solidarios o tienen sus propias fundaciones”.

Una subasta de árboles solidarios

La cena madrileña del 30 de noviembre, dirigida por Nieves Álvarez, finalizará con una subasta de estos árboles únicos organizada por Christie’s. El momento más emotivo será el final de la cena, explica Ferraras, "cuando se suman tickets, fila cero y recaudación de la subasta de los 14 árboles y se sortea entre los benefactores un árbol colectivo, en el que participan muchas marcas".

Las empresas del lujo involucradas, dependiendo de si realizan el encargo internamente o le piden a un artista o diseñador que cree este árbol, hacen llegar al equipo de Xmas Tree sus diseños. Según cuenta Farreras, “cuando recibimos la propuesta de la marca, el dibujo, ese momento de ver la creatividad es increíble, me apasiona ver todas esas posibilidades”. Y admite que hay árboles de todo tipo, “modernos, clásicos, más imaginativos o más elegantes, hay muchas opciones”.

Árbol diseñado para Loewe en 2021

Árbol diseñado para Loewe en 2021

Ella recuerda cómo le impactó un árbol que se expuso en Barcelona en la primera edición. “Estaba dentro de una jaula dorada, hecho todo con plumas negras y luces, una propuesta muy atrevida, pero funcionaba muy bien, era impresionante”, dice.

Farreras subraya la diversidad que tiene que ver con las estéticas depuradas de las marcas, muchas veces basada en las ideas de auténticos genios de la creatividad cuyas ideas revolucionarias dieron origen a estas exitosas marcas hoy: “El año pasado Cartier hizo una reinterpretación de la marca con rojo granate, con flores liofilizadas, era alucinante”.

También recuerda cómo, en otra ocasión, Loewe fabricó un árbol usando cojines. O cómo Cucinelli fue capaz de traer la esencia de Brunello desde el pueblo en el que nacieron. Y cómo la creación de Louboutin se quedó todo el año en el salón de quien la adquirió o cómo Ralph Laurent impactó con un clásico árbol enorme.

Un filántropo y coleccionista de arte contemporáneo –creador de hecho de una fundación vinculada al arte, a las personas y a la naturaleza–, que adquirió el año pasado un árbol, amigo y cliente de Loewe, explica a EL ESPAÑOL cómo estará presente este año de nuevo.

Porque, dice, “quedarse un árbol único es como adquirir una pieza de arte, con la gran satisfacción de que puedes disfrutarla toda la vida y, además, saber que has contribuido con una causa humanitaria y solidaria”.

Quedarse un árbol único es como adquirir una pieza de arte

Lorenzo Castillo es el autor del árbol para la marca Salvatore Ferragamo. Él mismo explica cómo la inspiración vino de la propia historia de la familia y la marca en la Toscana. "Escogí un color rojo intenso y brillante, como el de la laca china antigua, para el árbol, porque es el color de la marca y también el de la dinastía Ming de las pantallas imperiales que llegaban a Florencia a través de la ruta de la seda" de Marco Polo", cuenta.

Castillo también ha querido “dar brillo y resplandor al árbol de laca roja, y uno de mis símbolos nobiliarios favoritos, el Lirio Florentino, o flor de lis, que simboliza la ciudad de Florencia". Como decorador y diseñador de telas, ha querido utilizar texturas de lujo de diferentes telas.

Habituado al diseño de muebles, Castillo aquí ha tenido “la oportunidad de crear también la jardinera para el árbol, mezclando los mismos materiales, como diferentes telas y latón dorado, siguiendo un estilo neoclásico italiano después de las influencias culturales romanas”, dice.

La fundadora de esta iniciativa navideña explica que "es una barbaridad el impacto que podemos tener gracias a la generosidad de las personas que colaboran". En estos momentos de tanta necesidad, cuenta, cualquier cantidad para cualquier fundación hace falta, "pero aquí estamos dando mucha ayuda".

Banco de Alimentos alimenta a una familia de cuatro miembros durante un mes con 150 euros. En paralelo, para Norte Joven ya han surgido propuestas de colaboración con empresas y marcas que quieren ayudar desde la base. Además de que "lo recaudado, al 50% entre ambas oenegés, es espectacular".

En su casa e intimidad, la ideóloga de los árboles solidarios es “una fan del olor a eucalipto, mezclado siempre con abeto". De un color u otro, siempre hay árbol en su casa por Navidad. Aunque, reconoce, "no tiene nada que ver con las maravillas que vamos a ver en Solidarity Xmas Tree".