Las Chorreras del Cabriel.
La piscina natural más bonita de Cuenca, según la IA: "Sus aguas turquesas parecen sacadas de un cuento"
El acceso se realiza a través de senderos señalizados, y desde hace unos años es necesario reservar previamente la visita.
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En la provincia de Cuenca, entre los términos municipales de Enguídanos y Víllora, se esconde uno de los rincones más espectaculares de Castilla-La Mancha: Las Chorreras del Cabriel.
Considerada por ChatGPT la piscina natural más bonita de Cuenca, este enclave combina saltos de agua, pozas de un intenso color turquesa y formaciones calcáreas únicas, creando un paisaje que parece sacado de un cuento.
Este paraíso natural forma parte del Monumento Natural de Las Chorreras del Cabriel, un espacio protegido de casi 200 hectáreas. El río Cabriel, uno de los más limpios de Europa, se encajona aquí entre cañones y rocas, dando lugar a pequeñas cascadas, remansos cristalinos y toboganes naturales que invitan a sumergirse en sus aguas o simplemente relajarse contemplando el entorno.
Un destino perfecto para el verano
En los meses de calor, Las Chorreras se convierten en un lugar de referencia para quienes buscan un baño diferente, en plena naturaleza y rodeados de tranquilidad. Aunque el agua suele estar fresca, la sensación de nadar entre rocas erosionadas y bajo el murmullo constante de las cascadas es una experiencia difícil de olvidar.
El acceso se realiza a través de senderos señalizados, y desde hace unos años, para proteger este frágil entorno, es necesario reservar previamente la visita en la web oficial del Monumento Natural. De esta forma, se controla el aforo y se evita el deterioro de este espacio único.
Un lugar con historia y geología
Más allá de ser una piscina natural impresionante, Las Chorreras del Cabriel son también un ejemplo fascinante de la acción del agua sobre la roca caliza, creando travertinos y tobas calcáreas que moldean las cascadas y las pozas. Este paisaje, formado durante miles de años, es uno de los mejores exponentes de este tipo de relieve en la península.
Además, la zona conserva restos de antiguos molinos y construcciones vinculadas al uso histórico del agua, que recuerdan cómo generaciones anteriores aprovecharon la fuerza del Cabriel.