Hinojosa de San Vicente. Foto: CMMedia

Hinojosa de San Vicente. Foto: CMMedia

Turismo

Escapada navideña al pueblo más bonito de Castilla-La Mancha: todo lo que hay que ver

Hinojosa de San Vicente, a una hora y media de Madrid, se enclava en la bonita comarca toledana de la Sierra de San Vicente.

25 diciembre, 2023 08:03

Hinojosa de San Vicente ha logrado el título de 'Pueblo más bonito de Castilla-La Mancha 2023'. Esta localidad toledana que se impuso en el concurso promovido por Castilla-La Mancha Media (CMM) y será el lugar desde donde el ente regional lleve a cabo su tradicional gala de las campanas, es un destino perfecto para una escapada en estas fechas.

Enclavado en el precisoso Valle del Piélago, a una hora y media en coche desde Madrid y a una hora desde Toledo, Hinojosa de San Vicente toma su nombre del terreno donde se asienta. Por una parte, del hinojo que crece de manera salvaje en sus montes y por otro de la Sierra de San Vicente, comarca a la que pertenece. Precisamente el olor característico de esta planta aromática es uno de los elementos que marcan su atmósfera.

La arquitectura serrana es una de sus señas de identidad. El casco urbano de esta localidad de 400 habitantes se dibuja con viviendas de fachadas circulares, muros de mampostería encalados en las plantas bajas y esquinas biseñadas. Esta curiosa forma circular de muchas de sus casas tiene que ver con el terreno irregular en el que se asientan y que impide una ordenación clara y regular de sus calles y manzanas. 

Dentro de esta especie de laberinto se encuentra la iglesia de la Concepción, su monumento más emblemático. Se trata de una edificación del siglo XVI formada por una sola nave que representa de manera perfecta la transición del gótico al renacimiento. En ella destacan la imponente torre del campanario y su portada.

Fuera del casco urbano, los visitantes pueden gozar del encanto natural de este enclave y también de los restos de su castillo islámico, declarado Bien de Interés Cultural. Esta fortificación se erigió de manera primigénea entre los siglos VIII y XI pero ya bajo dominación cristiana fue remodelado por la Orden del Temple.

Muy cerca también se pueden visitar más restos de un convento de estilo renacentista que todavía conserva su puerta de sillares y las cuevas donde se dice que se refugiaron durante la persecución de Daciano los santos Vicente, Sabina y Cristeta, mártires de Talavera de la Reina.